De pirotecnia a repelentes, la reconversión de Cienfuegos

A partir de diferentes acciones legales y de campañas contra el uso de pirotecnia en las fiestas y de la caída de las ventas, los fabricantes de fuegos artificiales eligen desembarcar en nuevos negocios para sostener sus operaciones.

En el caso de la pirotecnia, existen una innumerable  cantidad de normas provinciales o municipales que prohíben el uso de estos productos; así como campañas para evitar este tipo de celebraciones que, de todos modos, se siguen dando especialmente en la medianoche del 31 de diciembre.

En la actualidad, el mercado está compuesto por ocho empresas locales que este año lograron una reactivación moderada, sobre el escenario de las celebraciones pasadas como las ocurridas en el 2023, 2022 y 2021, en este caso fuertemente afectada por las consecuencias de las medidas sanitarias que se habían impuesto en la lucha contra la pandemia del Covid-19.

Igualmente, no se trata de una cifra menor si se tiene en cuenta que Navidad y Año Nuevo representan cerca del 70% de las ventas anuales del sector, según un informe de la Cámara Argentina de Empresas de Fuegos Artificiales (Caefa) en el cual se aclara además que el 80% de los productos son importados de China y el 20% restante se fabrica en plantas industriales ubicadas en las provincias Buenos Aires, Santa Fe y Tucumán.

Cienfuegos: pirotecnia "amigable"

Por quinto año consecutivo, la entidad lanzó su campaña nacional para promover el uso responsable de fuegos artificiales llamados amigables porque tienen bajo impacto sonoro y son predominantemente lumínicos, además de estar autorizados por la Anmac para usar por mayores de 16 años. 

Se ensayan en laboratorios oficiales y universitarios, se testean 48 horas en hornos a 75 grados.

Es más, el presidente de la (CAEFA), Mario Ruschin, destacó el éxito de este tipo de pirotecnia durante esta temporada festiva, subrayando el impacto positivo de la reconversión de la industria desde 2020. 

"Este resurgimiento tiene que ver con el compromiso por generar productos más inclusivos y sostenibles, respetando a las personas y a los animales", expresó.

Sobrevivir a la pandemia 

Sin embargo y bajo este escenario y sin dejar su core business, algunas empresas buscaron reconvertirse para sobrevivir a la profunda crisis que dejó el coronavirus en el sector. 

El caso más saliente es el de Cienfuegos, una de las referentes y más importantes a nivel local, con 45 años de trayectoria y plantas en el Parque Industrial de Pilar y San Miguel del Monte y una red de comercialización de 15 locales en todo el país.

Llegó a tener además un establecimiento en el estado brasileño de Minas Gerais que ya cerró y a exportar sus productos a Uruguay, Paraguay, Perú, Guatemala, Canadá y Francia.

Los problemas generados por el combate a la pirotecnia sonora; por la pandemia y por los cambios de hábito de la sociedad la obligaron a reducir su operatoria local y a casi anular el negocio internacional, al haber sido muy golpeada por la pandemia, por la falta de eventos y celebraciones, por las restricciones.

De matafuegos a lubricantes

En ese contexto, lograron mantener las actividades y a sus 70 trabajadores a partir de la producción de aerosoles industriales y la suma de otros negocios como el de la venta de artículos de cotillón y máquinas de efectos especiales.

En el caso del negocio de aerosoles se abrió a comienzos del 2020, en los primeros momentos del Coronavirus, a partir de un establecimiento de 3,5 hectáreas ubicado en la localidad bonaerense de San Miguel del Monte.

En ese predio, la empresa elabora matafuegos; lubricantes para motos, bicicletas, cintas de correr, armas y para reeles, además de silicona para autos; limpia contactos electrónicos; removedor de partículas; gas para cocinas de camping; arranca motores; desmoldante siliconado; gas para encendedores y nieve de carnaval.

Actualmente Cienfuegos cuenta con una línea de más de 300 artículos de los tres rubros y su producción total llega a tres millones de unidades por año.

Cambio cultural 

En este sentido, Daniel Landeira, gerente general de Cienfuegos, aseguró que la compañía cierra el año con un crecimiento del 50% en unidades vendidas respecto al 2023.  "Este logro refleja tanto la confianza de los consumidores como el resultado de una industria que evoluciona para adaptarse a los nuevos tiempos", destaca. 

De acuerdo a su visión, "este cambio cultural impulsa a Cienfuegos a explorar nuevas fronteras, enfocándose en la sostenibilidad y la innovación". En este sentido y luego de las tradicionales fiestas de fin de año, ahora la empresa inaugura la temporada de carnaval con su tradicional nieve en aerosol que es fabricada íntegramente en su planta de San Miguel del Monte. Pero la verdadera innovación viene de la mano de Kantón, la marca de aerosoles de la compañía, que este año presentó un repelente de insectos fabricado localmente.

"El producto, dermatológicamente testeado, ofrece hasta ocho horas de protección contra insectos, incluyendo mosquitos transmisores del dengue. Es un producto diseñado para mejorar la calidad de vida de nuestros clientes mientras refuerza nuestro compromiso con la producción local", sostiene el ejecutivo de Cienfuegos.

También explica que, a partir de una inversión de más de u$s2 millones, la planta de San Miguel del Monte "se ha transformado en un centro de producción, capaz de fabricar una amplia gama de productos en aerosol". Desde lubricantes hasta pegamentos multiuso, la marca Kantón se consolida como un símbolo de calidad e innovación en el mercado argentino.

"Producir estos nuevos artículos en el país no solo fortalece la economía de la compañía, sino que también permite generar más empleo y promover el desarrollo tecnológico local", destaca.

Landeira señala que las tres plantas industriales de Cienfuegos abarcan 85.000 metros cuadrados y están equipadas con tecnología de última generación. "Esta visión ratifica nuestro liderazgo en la región y nos consolida como un referente de calidad y sostenibilidad para marcar el camino hacia una industria más responsable y comprometida con el bienestar de la comunidad", añade, a la vez que recuerda que Cienfuegos tiene presencia en Paraguay, Chile y Guatemala y que es la única empresa en Latinoamérica que certificó procesos de calidad bajo la norma ISO 9001:2008, que avala las prácticas en producción, diseño y montaje de espectáculos de fuegos artificiales.