Por inconvenientes en Brasil, se dilata la venta de la mayor cementera argentina
Como ya ocurrió otras seis veces durante lo que va del año, los dueños de Loma Negra no pudieron cerrar la venta de la cementera con un grupo de origen brasileño que, desde mediados de año, venía negociando para quedarse con el control de la compañía fundada por la familia Fortabat.
Se trata de Compañía Siderúrgica Nacional (CSN), que acaba de volver a bajarse de la operación y de las negociaciones que venía sosteniendo con InterCement por sexta vez consecutiva en este 2024, luego de haber firmado un acuerdo de confidencialidad para comprar Loma Negra que, nuevamente venció sin éxito, en esta oportunidad de manera anticipada a la fecha de finalización de la exclusividad que era el próximo 16 de diciembre.
Por lo menos así se desprende de un comunicado enviado a la Comisión Nacional de Valores (CNV), por InterCement para informar sobre la solicitud ante la justicia brasileña de la llamada Medida Cautelar Preliminar con los principales acreedores financieros del grupo y un procedimiento de Recuperación Extrajudicial para poder reordenar su deuda.
En el documento, el holding dueño de Loma Negra informó que junto con su controlante Mover Participações S.A., y sus sociedades controladas InterCement Brasil S.A., InterCement Financial Operations
B.V., InterCement Trading e Inversiones S.A., e InterCement Trading e Inversiones Argentina S.L, no lograron alcanzar un acuerdo definitivo, en el marco y en el plazo de la recuperación extrajudicial "a pesar de los esfuerzos realizados con respecto a las negociaciones en torno a la reestructuración de su endeudamiento y la readecuación de su capital".
Proceso concursal
Como consecuencia, sus ejecutivos solicitaron el inicio de un procedimiento de Recuperación Judicial (RJ), "medida que brindará estabilidad a las sociedades solicitantes, preservando su capacidad de generar valor para sus clientes, empleados, proveedores, socios y otros grupos de interés, y que permitirá concluir en tiempo y forma las negociaciones con los acreedores, independientemente de cualquier proceso de venta de activos, dada la robusta capacidad de generación de caja de InterCement".
Este proceso, tal como sucede en la Argentina con un concurso preventivo de acreedores, implica además la terminación del acuerdo de exclusividad por la venta de acciones de InterCement a favor de CSN en Loma Negra.
De todos modos, la cementera argentina no forma parte del proceso de reestructuración judicial (una especie de concurso preventivo de acreedores), sino que solo participan ciertas sociedades extranjeras del grupo brasileño.
"Por lo tanto, dicha presentación no afecta nuestros derechos y obligaciones como así tampoco nuestras operaciones, las cuales continuarán ejecutándose de forma habitual", agrega el comunicado en el cual también el holding aclara no tener "contratos con cláusulas que aceleren plazos de pago o generen incumplimientos".
Adiós, exclusividad
En el caso de Loma Negra, el paper aclara que la empresa "mantendrá informado a sus inversores y al mercado en general y reitera su compromiso con la transparencia en el mercado".
Esto significa que la exclusividad que CSN había solicitado el mes pasado y que vencía por estos días, lo cual no significa que el grupo también brasileño termine comprando Loma Negra.
Lo cierto es que ahora, InterCement abre el juego a nuevos interesados que pretendan quedarse con el control de la mayor cementera de la Argentina y una de las principales de América latina.
"No habrá más exclusividad en la venta de Loma Negra como venía sucediendo hasta ahora", aseguran fuentes conocedoras del proceso de negociaciones que la empresa viene encarando para encontrar un nuevo propietario.
Año "inestable"
Lo hará en el marco de un año en el cual sus operaciones se vieron afectadas por la inestabilidad de la economía local y en el que la mayor parte de sus datos evidencian un escenario negativo en cuanto a ventas, rentabilidad y operaciones si se tiene en cuenta el informe que presentó hace unos meses ante la CNV.
En ese paper se refleja una caída de su rentabilidad con un tercer trimestre de ganancias por $21.200 millones, contra los $23.200 millones del mismo período del año anterior.
El menor resultado operativo se debió principalmente a una caída de sus volúmenes de comercialización que la empresa logró compensar parcialmente con una mayor ganancia financiera empujad por el impacto de la devaluación y el menor gasto financiero neto que, a su vez, fueron parcialmente contrarrestados por una ganancia más baja en la posición monetaria neta, debido a una menor dinámica inflacionaria.
En cuanto a sus ventas, se situaron en los $180.686 millones (u$s185 millones), y disminuyeron un 21,2% interanual, explicado principalmente por una caída del 21% en los volúmenes de ventas del segmento de cemento.
El EBITDA Ajustado Consolidado alcanzó los $43.279 millones, cayendo un 18,5% interanual en pesos, mientras que en dólares alcanzó los u$s55 millones, bajando un 16,5%.
Con estos datos como escenario, el multimillonario brasileño Benjamín Steinbruch, uno de los mayores accionistas de CSN, vino encarando las negociaciones para quedarse con el 51% de Loma Negra, que se encuentra bajo control de InterCement, grupo también con sede en el mayor mercado del Mercosur.
Sin embargo, nuevamente no podrá logarlo, por lo menos mediante un proceso de negociaciones exclusivas, al frenarse esa posibilidad por el ingreso de InterCement al período concursal.
Ya lo había hecho en cuatro oportunidades anteriores y la última venció el pasado 16 de noviembre sin que haya definido si acerca o no la oferta para que su empresa, se convierta en dueña de la cementera que actualmente lidera el mercado local, produciendo y distribuyendo cemento, cemento de albañilería, cal, agregados y hormigón, que mayormente son utilizados principalmente en la construcción privada y pública.
Pero, más allá de los números o del interés por el negocio del cemento, la insistencia de Steinbruch por desembarcar en la Argentina se encuentra estrechamente ligada con la enemistad que mantiene con el principal hombre de negocios local como es Paolo Rocca y que data de más de 30 años.
El enemigo de Paolo Rocca
El último capítulo de esta eterna disputa entre ambos multimillonarios se dio en febrero del 2023 cuando Siderar, a través de su controlada Provid Investments SCA; Ternium y Tenaris, mediante su subsidiaria Confab Industrial; fueron demandadas en Brasil por CSN tras la compra de una participación del 27,7% en Usinas Siderúrgicas de Minas Gerais SA (Usiminas).
En 1998, este grupo brasileño ya había sido acusado por el holding de la familia Rocca de hacer dumping en el país con el acero que importaba desde Brasil y con el que competía con Siderar, la empresa madre del poderoso grupo Techint.
Por ese motivo, la empresa local le pidió al gobierno del expresidente Carlos Menem la imposición de aranceles (antidumping) contra las ventas de su rival en nuestro país y la entonces Comisión Nacional de Comercio Exterior (CNCE), el organismo que dependía del Ministerio de Economía encargado de llevar adelante este proceso, respondió diciendo que estudiará el caso, pero que eventualmente aplicaría derechos a toda la siderurgia brasileña.
Hace unos meses, CSN le ganó un millonario juicio a Techint que deberá abonar alrededor de u$s2.000 millones (o 700 millones de euros) precisamente por ese caso iniciado por CSN contra la mayor productora de acero plano en América Latina.
La Corte Superior de Justicia (SCJ) de Brasil resolvió que Ternium Investments y Ternium Argentina deben abonar a CSN una indemnización por la compra de una participación en Usiminas en enero de 2012.
La posible indemnización calculada por los abogados del Grupo Techint podría alcanzar hasta 4.200 millones de reales (unos 551 millones de euros).
La mayor de la región
En la actualidad, Loma Negra posee 34 unidades de producción, con una capacidad activa de más de 33 millones de toneladas de cemento por año, que emplean a más de 6.000 colaboradores.
Además, posee nueve fábricas de producción de cemento en el país y también opera plantas de hormigón en Sudáfrica y Brasil, siendo localmente la principal cementera del país, con el 45% del market share total.
La compañía se encuentra integrada verticalmente, con operaciones en todo el país, respaldada por grandes reservas de piedra caliza, plantas ubicadas estratégicamente, marcas de primer nivel y canales de distribución desarrollados y además cotiza tanto en BYMA como en NYSE en los Estados Unidos, bajo el símbolo "LOMA".