Dueños de la mayor cementera local quieren que siga en manos de capitales brasileños
La disputa por quien será el nuevo dueño de Loma Negra sigue sin definirse y abre una grieta entre empresarios brasileños y argentinos que pretenden que la mayor cementera del país siga perteneciendo a un grupo del país vecino y los locales que buscan "nacionalizarla" nuevamente.
Hasta el viernes 12 de julio pasado, Compañia Siderúrgica Nacional (CSN), con sede en San Pablo, tenía la exclusividad para realizar una oferta por la compañía fundada Alfredo Fortabat en Fundada en 1926, cuando descubrió la existencia de piedra caliza en la localidad Loma Negra en Olavarría.
Si bien por ahora no hay información oficial sobre el resultado de ese período de exclusividad, fuentes cercanas a la operación aseguraron que el holding que encabeza el millonario brasileño Benjamín Steinbruch sigue siendo "el candidato", más que nada porque el grupo InterCement, dueño de Loma Negra, no quiere dejar la empresa en manos de argentinos.
"El objetivo es que siga perteneciendo a un grupo brasileño tal como ya lo viene haciendo desde el 2005 cuando pasó a manos de Camargo Correa", aseguran las fuentes cercanas a la operación.
El "frente común" organizado por los propios ejecutivos actuales de Loma Negra; sus dueños y hasta el empresariado del país vecino tiene como objetivo impedir que Loma Negra sea comprada por Marcelo Mindlin. El dueño del holding petrolero argentino Pampa Energía estaría dispuesto a realizar una oferta ante el Banco BTG Pactual que tiene el mandato de venta de la cementera y que también tiene sus preferencias puestas en la propuesta que pueda acercar el dueño de GSN y ex cabeza del grupo textil Vicunha, el mayor de América latina, y de la minera Companhia Vale do Rio Doce de la que luego se desprendió en el 2002.
Venta de Loma Negra: no quieren "otro Fortabat"
De todos las formas posibles pretenden que Mindlin, que con su grupo ya opera activos en generación eléctrica (centrales térmicas, termoeléctricas, hidroeléctricas, energías renovables) y está presente en el mercado de los hidrocarburos, se convierta en el nuevo "Fortabat" de Loma Negra intentando sumar a la cementera a través de su constructora controlada, Sacde.
Además, el éxito de la transacción es hasta una "cuestión de orgullo" para el dueño de CSN quien se encuentra enfrentado a Paolo Rocca, el empresario más importante de la Argentina y que encabeza el Grupo Techint con el cual Steinbruch mantiene una vieja enemistad que data de 1998. Ese año, Techint, el holding de la familia Rocca acusó a su grupo de hacer dumping en el país con el acero que importaba desde su país, Brasil y con el que competía con Siderar.
Por ese motivo, la empresa local le pidió al gobierno del ex presidente Carlos Menem la imposición de aranceles (antidumping) contra las ventas de su rival en nuestro país y la entonces Comisión Nacional de Comercio Exterior (CNCE), el organismo que dependía del Ministerio de Economía encargado de llevar adelante este proceso, respondió diciendo que estudiará el caso, pero que eventualmente aplicaría derechos a toda la siderurgia brasileña. Unos años después, en febrero del año pasado Siderar, a través de su controlada Provid Investments SCA; Ternium y Tenaris, mediante su subsidiaria Confab Industrial; fueron demandadas en Brasil por CSN tras la compra hace un año de una participación del 27,7% en Usinas Siderúrgicas de Minas Gerais SA (Usiminas).
Según informó Siderar, los compradores debieron lanzar una oferta pública de adquisición a todos los tenedores minoritarios de acciones ordinarias de Usiminas a un precio por acción equivalente al 80% del precio por acción pagado en dicha operación, o 28,8 reales.
Disputa por Usiminas
Por ello, CSN solicitó que se ordene lanzar esa oferta a dicho precio más interés. Siderar, que aún no fue notificada de la demanda, dijo a la CNV considerar que los reclamos de CSN carecen de fundamento y mérito, como ha sido confirmado por varias opiniones de abogados brasileños y decisiones previas del regulador de valores brasileño, la Comissão de Valores Mobiliários.
Esto incluye una decisión de febrero de 2012 por la cual la adquisición arriba referida no imponía la obligación de lanzar una oferta pública de adquisición. En consecuencia, Siderar adelantó que se defenderá "vigorosamente".
En este contexto, CSN cerró a fines de mayo pasado un acuerdo con InterCement para adquirir Loma Negra imponiendo un plazo de un dos meses para tener la exclusividad de analizar la situación comercial y financiera de la cementera y realizar o no una propuesta.
En la actualidad, CSN está controlada por el holding Vicunha Aços, propietario del 51,24% del capital del grupo siderúrgico, que a su vez tiene en su composición participaciones pertenecientes a miembros de la familia del actual presidente ejecutivo de CSN.
Sin "compromisos"
De hecho, el acuerdo fue informado por la empresa local a la Comisión Nacional de Valores (CNV), mediante una nota en la cual sus ejecutivos aseguran que "en el marco del proceso competitivo que se encuentra realizando el banco BTG Pactual, nuestro accionista controlante indirecto, InterCement Participações (InterCement), ha informado que con fecha 1 de Mayo de 2024 firmó un acuerdo de exclusividad hasta el 12 de julio de 2024 con Compañía Siderurgica Nacional ("CSN") para la potencial adquisición de las acciones que representan el 100% de su capital".
Sabiendo que ese plazo no le daba el control sobre Loma Negra, Steinbruch se apuró para renovar el plazo, aunque todavía no se sabe si tuvo éxito en su pedido o si los dueños de la cementera tienen ahora vía libre para negociar con Mindling.
Más allá de ese dato, la idea de InterCement es que la ex compañía de la familia Fortabat permanezca bajo control de capitales brasileños, luego de que el año pasado llegó a un acuerdo con la firma china Huaxin Cement Co., para venderle sus negocios en Mozambique y Sudáfrica.
Antes, en enero, había vendido sus operaciones en Egipto con el objetivo de reducir su millonario pasivo y acelerar la revisión estratégica más amplia del holding para volver a centrarse en sus mercados principales.
Por la segunda vuelta
No sería la primera vez que, en el caso de Argentina, se podría analizar la venta de Loma Negra, teniendo en cuenta que en el 2018 salió a ofrecer Loma Negra. En aquel momento, la compañía local tenía un valor de u$s6.470 millones y Camargo recibió ofertas de la mexicana Cemex y otra compañía latinoamericana no identificada. Por entonces, Camargo Correa se había desprendido de varios negocios en el país como de la textil Alpargatas que traspasó a otro fondo brasileño a fines de 2015 y entendía que Loma Negra tenía un valor de u$s6.470 millones.
En la actualidad la cementera posee 34 unidades de producción, con una capacidad activa de más de 33 millones de toneladas de cemento por año, que emplean a más de 6.000 colaboradores. Posee nueve fábricas de producción de cemento. Pero también opera plantas de hormigón en Sudáfrica, Argentina y Brasil. Es es la principal cementera del país, con el 45% del market share total y en el 2021 lanzó un programa de compra de acciones propias por un monto de hasta $750 millones que luego amplió a $900 millones con el objetivo de que el grupo controlante adquiera títulos que flotan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires necesarias como para evitar las fluctuaciones y la inestabilidad que evidencia el mercado de capitales en la actualidad.
Los títulos se encuentran repartidos entre 70 inversores institucionales como Capital International Investors (1,40%); Redwood Capital Management (1,09%); Capital Research Global Investors (0,77%); Dynamo Administracao de Recursos Ltda (0,44%). También el fondo Blackrock Inc. (0,11%); Advisory Services (0,08%); New World Fund (1,29%); o Eaton Vance Global Macro Absolute Return Advantage (0,07%), entre otros. Además, cerró un préstamo con el HSBC Bank Argentina por $3.000 millones con vencimiento a 180 días, y tasa fija de interés del 52% anual
En el 2022 extendió un plan de recomprar de acciones destinando otros $1.000 millones para quedarse con otro 10% del capital y que anteriormente había sumado un mismo porcentaje con la misma finalidad de disponer de liquidez. En el mismo período, cerró varios acuerdos de financiamiento con diferentes bancos, como el Industrial and Commercial Bank of China (Dubai Branch), que le cedió u$s56 millones a cancelar en tres cuotas iguales, con intereses que devengan a una tasa nominal variable en base a la tasa libo más un plus del 8% a pagar en forma trimestral. Hizo lo mismo con el Citibank N.A. por $5.500 millones a cancelarse a 180 días de su celebración, devengando una tasa nominal fija del 47,25% a pagar en forma mensual.
Luego, sumó un nuevo préstamo con el Eurobanco Bank Ltd por u$s80 millones por un plazo de 90 días prorrogable a 180 días, cancelable a su vencimiento con intereses que se devengan a una tasa nominal variable en base a la tasa SOFR, a pagar en forma trimestral. Adicionalmente, cerró un acuerdo de préstamo con el HSBC Bank Argentina por $3.000 millones con vencimiento en un plazo de 180 días devengando una tasa fija de interés del 52% anual.