Aportan millonarios fondos para el plan de la compañía dueña de Don Mario: cuáles serán sus objetivos
:quality(70)/assets.iprofesional.com/assets/jpg/2024/07/578761.jpg)
La firma GDM Argentina, (antes denominada Asociados Don Mario SA), pertenece a GDM Holding, un grupo global de genética vegetal de origen argentino orientado al mejoramiento vegetal. Su directorio acaba de definir un nuevo proceso de financiamiento para apuntalar sus planes de negocios en el país, a complementar su liderazgo en el segmento de la semilla de soja y de trigo.
Su sede se encuentra en el país desde hace 40 años con un objetivo definido desde ese momento para convertirse en un holding líder en genética vegetal de cultivos extensivos.
En la actualidad, tiene presencia en todos los mercados relevantes del mundo y su foco principal está puesto en el desarrollo y comercialización de semillas de soja principalmente, como así también de variedades de trigo, híbridos de maíz y forrajeras.
Si bien es un grupo nacido en Argentina, sus principales competidores son Nidera, seguido Corteva con Brevant y su facturación alcanzó en el 2023 los u$s600 millones, y una ganancia antes de impuestos de u$s250 millones.
En marzo pasado se quedó con el negocio de maíz y sorgo de la compañía alemana KWS en Sudamérica, referente en soja y con una facturación anual de u$s700 millones por año con el objetivo de apuntar a la diversificación de sus productos.
Gigante global de la soja: ¿en cuántos países opera?
En este contexto, su marca insignia es Don Mario, que impulsó el crecimiento del grupo que hoy opera en más de 15 países y emplea a 750 colaboradores.
Está presente en los principales países productores de soja en donde ofrece tecnología de vanguardia aplicada al mejoramiento genético tanto de este cultivo como de trigo y maíz y, a partir de su plan de expansión, se convirtió en un gigante global en el negocio de la genética vegetal.
Concretamente en Argentina posee una participación mayor al 50% en el mercado de semillas de soja OGM, además de ser el principal desarrollador de genética en Brasil con una participación mayor al 80%.
En cuanto a las firmas que conforman el grupo, GDM Argentina es una de sus principales subsidiarias, con base en Uruguay, ostenta una participación en las ventas del 32%.
También forman parte del holding, GDM Genética do Brasil Ltda con un 46% de las ventas y en orden de importancia le sigue GDM Seeds Inc (Estados Unidos) con un 19% de las ventas. El 3% restante se divide en menor medida entre otros mercados.
Sus ingresos derivan de la venta y desarrollo de semillas que incluyen mejoras genéticas y entre sus principales clientes se destacan Los Grobo Agropecuaria; LIAG Argentina; Barraca Jorge W. Erro; Pelayo Agronomí; Areco Semillas; Grobocopatel Hnos. y Daser Agro.
Para sostener su liderazgo, en la empresa explican que deben invertir casi de manera constante en el desarrollo de nuevas variedades, dado que estas suelen perder vigencia y productividad al cuarto ciclo de reproducción.
La inversión en desarrollo e innovación (activos intangibles para el desarrollo de activos biológicos) y renovación de capital operativo representó los últimos años entre el 15% y 20% de las ventas, unos u$s20 millones en promedio por año, según se destaca en una nota publicada por el portal Bichos de Campo.
Estrategia de expansión del gigante de la soja: qué prevé
Si bien en Estados Unidos, su posicionamiento todavía es menor, el grupo apunta a crecer teniendo en cuenta el potencial de crecimiento y una regulación atractiva para el desarrollo del negocio que ofrece ese país.
De todos modos, sus flujos en ese mercado seguirán siendo negativos y se mantendrán financiados por la mejor rentabilidad de Brasil, en tanto en Argentina y Brasil, apunta a mantener su posicionamiento en el mercado de semillas de soja, e incrementar su participación en maíz.
Para este año prevé una buena cosecha de soja a raíz de las mejores condiciones climáticas que atravesó el cultivo versus 2023, al punto que la superficie de esta semilla podría llegar a aumentar en la campaña 2024/25 dado que se espera una reducción en la siembra de maíz por efecto de Spiroplasma.
Respecto a las marcas y el negocio de licencias, la expectativa de ventas entre semilla fiscalizada y declaraciones de Uso Propio asciende a 7.8 M bls con una participación mayor al 50% de tecnologías.
En cuanto al trigo, estima que se mantendrá la superficie vs 2023, aunque sus ejecutivos se encuentran atentos al precio de de commoditys e insumos teniendo en cuenta que generan cierta "incertidumbre".
A pesar de ello, prepara varios lanzamientos en especial de su marca Don Mario que este año lanzará su primera variedad bajo el sistema Aracuaria, y estará trabajando en el sistema de control a través de marcadores ópticos para realizar las primeras pruebas.
Cuáles serán los objetivos de las nuevas inversiones
En este contexto, el grupo GDM acaba de definir un nuevo proceso de financiamiento para apuntalar sus planes mediante aportes a su controlada local GDM Argentina.
Lo decidió el directorio durante una reunión que se celebró este lunes 1 de julio en la cual ofreció a su subsidaria, que lo aceptó, un millonario aporte irrevolcable por $40.000 millones o su equivalente en moneda extranjera según el tipo de cambio que resulte aplicable en cada oportunidad en una o más integraciones, a cuenta de futura suscripción de acciones, o bien para absorción de pérdidas.
En el marco de ese convenio, GDM Holding S.A. realizó un adelanto en concepto de aportes irrevocables, por un valor total de $1.434 millones, mediante transferencia bancaria hacia una cuenta de titularidad de su controlada.
Uno de los objetivos establecidos sería el de apuntalar el negocio de maíz de Don Mario, que adelanta fuertes inversiones y una visión de largo plazo y que apunta a complementar su liderazgo en el segmento de la semilla de soja en la Argentina, y que desde hace tres campañas tiene también las variedades más vendidas de trigo.
La idea es convertir a esta empresa en un "jugador clave en pocos años", para lo cual hasta financia la compra de bolsas de maíz a un año y a una tasa fija en pesos de 30%, muy por debajo también de la inflación.