Esta emprendedora creó un negocio de cosmética con plantas recolectadas a mano de la Patagonia
La Patagonia argentina es el lugar elegido como Madre Tierra de este proyecto porque las plantas que crecen en su suelo desarrollan propiedades únicas. En la marca Proyecto Auras trabajan en conjunto con productores y pequeños emprendedores regionales para apoyar a la industria patagónica y con quienes comparten una misma sintonía de valores e ideas. están presentes en cada paso de la creación de los productos, la cual respeta cuidadosamente los tiempos de la naturaleza.
"Nuestro principal fuerte son los activos botánicos provenientes de plantas que crecen en su suelo. Tolerantes al estrés aéreo producido por el viento y las temperaturas extremas y el estrés subterráneo debido a la falta de agua logran desarrollar propiedades únicas. Patagonia, región amplia de suelos áridos y clima hostil", describe Carolina Dinezio, la ideóloga.
Según cuenta a iProfesional, el nombre Proyecto Auras surge pensando en la sinergia de todas las personas que trabajan y vibran en la misma sintonía. "Esta sintonía además de estar conectada con el medio ambiente busca el cuidado de las personas y generar conciencia no solo en los procesos, si no también en los resultados".
"Creemos que todo es posible, que los límites son imaginarios", sigue la emprendedora. "Por eso, nos propusimos dar a conocer las riquezas del suelo en apariencia hostil de la Patagonia. Nuestra principal fuente es el vientre que nutre varias plantas que, por la adaptación al ambiente, se diferencian de cualquier otra de la misma variedad", añade.
En este sentido, esta línea de cuidado de la piel es atemporal, versátil y fácil de incorporar en tu rutina diaria. Desde la empresa aseguran que cada producto puede utilizarse por separado o combinarlos para crear infinitas posibilidades.
La marca propone un mix ideal: por un lado, activos obtenidos de plantas como la zampa, jarilla y rosas cultivadas en la Patagonia, y por otro, minerales extraídos de manera respetuosa con el medio ambiente. No contienen químicos, ni ingredientes cuestionables para tu bienestar porque, el objetivo del proyecto es contribuir a una belleza simple y auténtica, que respete el ritmo de la naturaleza.
Dar el salto: de la startup al proyecto empresarial
La idea surgió en 2017 a partir de una necesidad propia, "En Argentina no veía productos artesanales sin agregados químicos y con imágenes más estéticas, mientras que sí encontraba opciones en otros países", expresa.
Por otro lado, sigue, "hace mucho que en mi cabeza rondaba la idea de poder dar a conocer todas las propiedades que tienen las plantas de la zona donde nací, Alto Valle y estepa patagónica. Dueña de un clima hostil donde las plantas desarrollan propiedades únicas en el mundo".
Todo comenzó como un pequeño emprendimiento, con un solo producto (el bálsamo labial) que se desarrollaba en forma muy artesanal en Rincón de los sauces. Luego, abrió una tienda online y comenzó a vender. Y así fue agregando productos hasta identificar que, para que el negocio pueda crecer, se necesitaba "hacerlo más seriamente": buscar un laboratorio profesional, inscribir los productos en ANMAT, etc.
"Una vez que decidimos encarar el emprendimiento en serio y convertirlo en proyecto empresarial, decidimos armar una sociedad, darle una renovación a la imagen de la marca, buscar laboratorio, y ver el proceso de extraccion de plantas y desarrollo de extractos comprar más materias primas, probar nuevos desarrollos", detalla Cecilia. "Esto nos llevó dos años, entre pruebas y errores; y una inversión de u$s40.000 que incluye la primera producción de siete productos".
El relanzamiento fue en diciembre de 2023. "Teniendo en cuenta el contexto actual y que nuestra estrategia fue comenzar con un crecimiento orgánico, sin pauta, consideramos que estamos bien", manifiesta la joven. Los primeros tres meses de este año llegaron a vender más de $7 millones, todo a través de nuestra tienda online y sin pauta digital.
Hoy, Carolina es quien idea desarrolla los productos y tiene a su cargo todo el proceso creativo de la marca, tanto en productos como en imagen y marketing, mientras que Fernando es quien la apoya en todo el tema números. Costos, precios de venta, negociación con proveedores, administración, y la operación de la tienda online.
En el camino, el mayor obstáculo para el proyecto fue no conocer el ámbito industrial de la cosmética. "No conocíamos laboratorios", cuenta. "De hecho, empezamos el desarrollo con un laboratorio, y luego de varios meses en los que veíamos que no lográbamos el producto que queríamos, debimos optar por cambiar de laboratorio", relata.
Esto implicó no solo una pérdida de tiempo, sino también económica. Por otro lado, agrega: "Teníamos que encontrar el laboratorio que pueda recibir los extractos que elaboramos con plantas recolectadas a mano y hacerles todos los estudios necesarios para poder utilizarla. Si bien hoy estamos contentos con el laboratorio que estamos trabajando, siempre es complicado cuando uno quiere hacer productos diferentes (en nuestro caso con materias primas que nadie usa) y cuando no se tiene escala de producción grande".
El potencial de la marca Patagonia
De cara al futuro, dice Carolina, "nuestra hoja de ruta es continuar con un crecimiento orgánico potenciado por la presencia en redes y medios, sumado a influencers o personalidades destacadas que vemos tienen un perfil acorde a la marca".
La empresa es muy selectiva con sus clientes mayoristas ya que "nuestros productos tienen características particulares que deben ser valoradas por quien los compra, los vende y los consume: es unico, muy natural, casi sin conservantes para dejar actuar la planta en su esencia. No estamos apurados en este punto, ya que no queremos vender Auras en cualquier lado".
El deseo de la joven también es llegar a mercados internacionales, "donde consideramos que la Patagonia es un activo muy valorado".
En cuanto a inversiones, las mismas pasan por seguir desarrollando nuevos productos para ir sumando a la línea. "Ya tenemos desarrollados ocho, de los cuales seis están a la venta. Nos está faltando ajustar la fórmula del otro para poder lanzarlo. Y ya estamos trabajando en el desarrollo de tres productos nuevos para lanzar este año".
Por último, la emprendedora expresa: "Confiamos mucho en nuestro producto, participamos en todas las etapas del proceso productivo, elaboramos nuestros propios extractos lo que nos permite saber la pureza de lo que ofrecemos. Obviamente el servicio es un punto que consideramos esencial, como la calidez y cercanía con el cliente".