Pampa Energía logra mantener la concesión sobre una hidroeléctrica clave
Situada sobre el río Atuel, en la provincia de Mendoza, desde junio de 1994 HINISA tiene una concesión por 30 años para la generación, venta y comercialización de electricidad del sistema hidroeléctrico Los Nihuiles. Actualmente es propiedad del Pampa Energía, el holding que dirige Marcelo Mindlin, que la adquirió en el 2006 junto con la central Diamante, que también se encuentra en Mendoza por las que pagó u$s35,5 millones. Ahora, el Gobierno nacional prorrogó la concesión hasta junio de 2025.
Estos complejos hidroeléctricos fueron concesionados en 1994 mediante un contrato de 30 años, cuando la Nación y Mendoza acordaron la privatización de la operación que hasta 1992 estuvo a cargo de Agua y Energía Eléctrica (AyEE) Sociedad del Estado.
Para hacerse cargo de la operación, el empresario se asoció con la local Stein Ferroaleaciones (con plantas en Villa Mercedes -San Luis- y Mendoza), que en conjunto poseen el 64,9% de Inversora Nihuiles SA (controlante de Hidroeléctrica Los Nihuiles SA - Hinisa) e Inversora Diamante SA (controlante de Hidroeléctrica Diamante SA - Hidisa).
En concreto, Pampa tiene una participación directa del 52% sobre el capital accionario de HINISA.
Las acciones restantes son propiedad de Banco Galicia y Nucleamiento Inversor SA. En tanto, la operadora Hinisa mantuvo su estructura original que se reparte entre Inversora los Nihuiles con 51%, el gobierno de Mendoza 47% y los empleados a través del Programa de Propiedad Participada 2%.
En el caso de HINISA cuenta con una capacidad instalada de 265 MW, que representa el 0,6% de Argentina, y está conformada por tres represas y tres plantas generadoras de energía hidroeléctrica (Nihuil I, Nihuil II y Nihuil III), así como por un dique compensador. El Sistema Los Nihuiles cubre una longitud total de cerca de 40 km y una altura comprendida entre los 754 m y 1.251 m sobre el nivel del mar.
Pampa Energía logró extensión de la concesión de hidroeléctrica clave
Desde 1990 a 2023, la generación anual promedio fue de 778 GWh, con un máximo de 1.250 GWh registrado en 2006 y un mínimo de 428 GWh registrado en 2022.
Hace unos días, el 1 de junio venció la concesión de HINISA y el gobierno nacional acaba de publicar una resolución en la cual le otorga a Pampa Energía el plazo de transición que establece el contrato de concesión para extender por 12 meses más la operación y el mantenimiento.
Así lo establece la Resolución 83/2024,publicada este martes 4 de junio por el Ministerio de Economía y la Secretaría de Energía que, en sus considerandos entiende que "la energía hidroeléctrica constituye una fuente renovable de generación, segura y limpia que, además, favorece la diversidad de la matriz energética y otorga confiabilidad al Sistema Argentino de Interconexión (SADI)".
La norma recuerda además que a partir de la década de 1960 se inició en el país un importante proceso de planificación y desarrollo de la hidroelectricidad por parte del Estado Nacional, a través de las empresas Agua y Energía Eléctrica Sociedad del Estado (AYEE S.E.) e Hidroeléctrica Norpatagónica Sociedad Anónima (HIDRONOR S.A.) que proyectaron, construyeron y operaron grandes aprovechamientos que existen en el país y los dos complejos hidroeléctricos binacionales.
Como resultado de esas reformas efectuadas, a partir de la sanción de la Ley N° 24.065, se estableció la división vertical de la industria eléctrica y se declararon sujetas a privatización las actividades de generación, transporte y distribución de energía eléctrica.
Pampa Energía continuará con la concesión hasta junio 2025
En ese marco, la provincia de Mendoza se convirtió en titular de los bienes de uso y de los bienes propios del Sistema Los Nihuiles, que acaba de caducar por lo que se encontraría en el supuesto de extinción del acuerdo.
Por eso, la resolución explica que "resulta pertinente adoptar medidas dentro del marco contractual que permitan garantizar la continuidad del servicio que presta la central y resguardar los intereses públicos vinculados con la generación energética y preservar la seguridad de las personas y los bienes ubicados en la cuenca".
Agrega que se deben tomar medidas tendientes a realizar un traspaso ordenado tanto de los bienes, como de la operación y mantenimiento de las centrales a los nuevos responsables "y garantizar que la culminación de los Contratos de Concesión vigentes no incida negativamente en el despacho de energía que sea requerido por el SADI".
A partir de estos términos obliga a Pampa Energía a continuar a cargo del Sistema Hidroeléctrico y cumplir con todas sus obligaciones derivadas del contrato durante otros 12 meses, el que representa el plazo máximo fijado en los contratos.
Y si bien desde el grupo aclaran que continuarán operando "igual que lo hemos hecho en los últimos 20 años, haciendo las inversiones necesarias para mantener la seguridad de las presas y la disponibilidad de los equipos", el gobierno de Javier Milei igualmente dispuso designar un veedor.
El cargo recayó en Energía Argentina Sociedad Anónima (ENARSA) por ser la empresa pública que se encuentra actualmente actuando también como veedor en los contratos de concesión para la región Comahue y que, asimismo, llevó a cabo una auditoría técnica del Aprovechamiento Hidroeléctrico Los Nihuiles.
El objetivo de la secretaría que dirige Eduardo Javier Rodriguez Chirillo es "preservar la seguridad de las personas y los bienes ubicados en la Cuenca e iniciar el período de transición y para ello, la concesionaria deberá continuar a cargo del Complejo Hidroeléctrico correspondiente y cumplir con todas sus obligaciones derivadas del contrato".
Cómo funciona el sistema
En el caso de Pampa Energía luego del plazo de transición, analizará los nuevos pliegos de concesión para confirmar si se vuelve a presentar para la licitación cuyos pliegos ahora debería comenzar a elaborar el gobierno nacional.
La operación a reprivatizar será, como hasta ahora, el Sistema Hidroeléctrico "Los Nihuiles" situado sobre el río Atuel, que tiene una capacidad instalada aproximada de 290 MW, que representa el 0,7% de la capacidad instalada de la Argentina.
El complejo está conformado por tres represas, cuatro plantas generadoras de energía hidroeléctrica, y un dique compensador.
Cubre una longitud total de cerca de 40 km y una diferencia de altura aproximada de 460 m.
Y su aprovechamiento comprende el embalse El Nihuil (1947), y la presa de cabecera del sistema. El desnivel generado se aprovecha en la Central hidroeléctrica Nihuil I (75 MW) "Ing. Juan Eugenio Maggi".
En el caso del Nihuil III, está conformado por la presa Tierras Blancas (construida en 1969 pero entra en servicio en 1977) y la Central hidroeléctrica Nihuil III (52 MW).
El sistema se completa con el embalse Valle Grande (1964) a la que se agrega la Central hidroeléctrica Nihuil IV (30 MW), que entra en operaciones en 1997.