¿Puede haber desabastecimiento de nafta en Argentina por el conflicto con Chubut y Tierra del Fuego?
La intervención de la Justicia en el reclamo que mantiene Chubut ante la Casa Rosada por la coparticipación parece haber calmado, al menos momentáneamente, los intentos de esa provincia y su similar regional Tierra del Fuego por aplicar un corte rotundo a la salida de hidrocarburos de esos territorios y su distribución en el resto del país. Sin embargo, la posibilidad de que una medida de esas características pueda implementarse en algún momento obliga a reparar en los números de ambos distritos y sus respectivas capacidades productivas.
La decisión del Gobierno nacional apelar el fallo que ordenó la suspensión del recorte de fondos a Chubut podría reavivar la decisión de promover el recorte de petróleo y gas. Semejante escenario mantiene en tensión al resto de las provincias que dependen de los suministros para el funcionamiento de sus aparatos productivos y la estabilidad social.
La incertidumbre que predomina tiene asidero en el peso que, sobre todo en el caso de la provincia que gobierna Ignacio Torres, presenta Chubut en el ámbito de la producción de petróleo y gas.
Chubut pesa en la generación de petróleo y gas
En ese sentido, y según datos oficiales, la cuenca chubutense representa casi el 20% del petróleo que se produce en la Argentina, mientras que es fuente del 8% de los despachos de gas. En enero último, Chubut produjo a razón de 134.788 barriles por día.
Combinada con Santa Cruz, Río Negro y Salta, la provincia produce el 35% del total de crudo que se extrae a nivel nacional, mientras que la porción de gas asciende al 25 por ciento.
Vale señalar que Neuquén concentra el 55% de la producción de petróleo con un tope de 374.856 barriles por día promedio registrado, también, en el primer mes de 2024. Esta última también es origen de casi el 60% que se genera en Argentina.
Según precisó recientemente Emilio Apud, ex Secretario de Energía de la Nación, Chubut produce "un petróleo pesado, el Escalante, necesario en refinerías para producción de gasoil, combustible del que la Argentina importa un 10% del consumo interno".
"(De ocurrir un corte) sería un problema adicional para transporte y las actividades de siembra y cosecha del sector agrícola. Ya el año pasado hubo problemas serios por falta de gasoil", explicó el especialista.
"En gas, la importancia de Chubut es mucho menor, pero las amenazas del gobernador Torres le sirvieron para ganar apoyo político y atención mediática. Pero el recorte del envío de petróleo y gas es difícil que lo haga Chubut e imposible que adhieran las demás provincias patagónicas", agregó.
La incidencia de Tierra del Fuego en los hidrocarburos
En cuanto a Tierra del Fuego, el distrito produce alrededor del 1% del petróleo nacional. En enero pasado, la provincia subió su nivel de extracción a 3.802 barriles diarios promedio. En concreto, aumentó en 35 barriles su producción entre diciembre de 2023 y el primer mes de este año.
Si bien forma parte de la Cuenca Austral que aporta casi el 20% del gas que se explota en el país, lo cierto es que en ese apartado la diferencia la genera la provincia de Santa Cruz. En los últimos años, la generación diaria de Tierra del Fuego se ubicó apenas por encima de los 2.100 mm3. La misma provincia reconoce de forma oficial que la producción de gas "se encuentra en un marcado declive desde 2016, cuando alcanzó su pico máximo".
Respecto del peso de ese distrito en la torta nacional de los hidrocarburos, un informe reciente de la Fundación Innovación Fueguina (FINNOVA) señala, también, que "la producción de gas ha estado en declive desde 2016 y la de petróleo desde 2018, en una provincia en la que la industria hidrocarburífera representa el segundo ingreso de divisas más importante".
"De enero a septiembre de 2023, la producción acumulada de petróleo alcanzó el registro de 180.055 m3, representando una disminución relativa del 24,7% respecto al mismo período de 2022. Por otro lado, la producción acumulada de gas durante el mismo período registra 2.116 millones de m3, un deterioro de 3,5% respecto de 2022", precisó la organización.
"La perspectiva de mediano plazo es desalentadora en ambos casos. En el caso de la producción de gas, la misma viene decreciendo sostenidamente desde septiembre de 2016 (407 millones de m3), y los niveles actuales se acercan al piso histórico (desde enero 2001), 191 millones de m3", acotó la fundación.
En concreto, FINNOVA da cuenta de una incidencia de Tierra del Fuego en el mapa de los combustibles que, a diferencia de lo que ocurre con Chubut, se exhibe cada vez menos relevante y que, de aplicarse una interrupción a los suministros, no tendría gran impacto en la escena nacional de demanda y consumo de hidrocarburos.
De intensificarse la disputa entre Chubut y Tierra del Fuego con la Casa Rosada, y aplicarse un veto en la distribución de petróleo y gas, los números de producción de ambos distritos dejan a la vista que las posibilidades de un desabastecimiento potente de hidrocarburos a nivel nacional son claramente bajas. En la ecuación, un parate en los yacimientos chubutenses podría implicar algunos dolores de cabeza para el sector industrial pero no al punto de detener por completo la actividad de ese nicho.
En cuanto a la incidencia de la extracción en suelo fueguino, las estadísticas dan cuenta de una participación menor en la torta general de producción de hidrocarburos. En el ámbito energético existe la certeza de que la situación sí podría volverse dramática en un contexto de freno en Río Negro y Neuquén. Para fortuna del Ejecutivo, hasta el momento ambas provincias no han dado muestras de evaluar o promover algún tipo de recorte en el flujo de gas y petróleo.