De emprendedor a empresario: así pasó a liderar el negocio de cargadores para autos eléctricos
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Jorge Sanvitale, director de Mehcco S.A., comenzó a trabajar en el rubro de la electricidad siendo adolescente. "A los 16 años, tuve mi primer trabajo como ayudante de electricista, no tenía noción de las cuestiones prácticas y fui aprendiendo el oficio", cuenta el emprendedor, hoy empresario, a iProfesional.
"Después me anoté en la Facultad de Ingeniería, empecé a trabajar en una casa que armaba artefactos de iluminación y ahí un amigo me llamó para hacer la primera instalación eléctrica que fue en un lavadero de ropa. Ahí empezó todo y, aunque esa sociedad duró poco, en el 1992 nació Mehcco".
Los comienzos del emprendimiento
Según narra, "la ‘empresa’ estaba en una habitación en la casa de mis padres, al año siguiente me casé y la mudé a la que un año después iba a ser la habitación de mi hijo. Por entonces estaba totalmente vacía, pero el atractivo principal era la gran ventana balcón que daba a la calle y llenaba de luz el espacio".
"Con algunas estructuras de estanterías comerciales y un poco de imaginación, -sigue- logré improvisar un escritorio con una biblioteca adosada para colocar los documentos de las obras. Ni siquiera tenía computadora, una vieja calculadora con rollo de papel era el soporte tecnológico para preparar presupuestos y un libro de cheques, que llenaba a mano era el sistema de gestión".
En 1995 Mehcco tuvo su primer "espacio real" con un espacio para el almacenamiento, una oficina, un estacionamiento y "muchos sueños depositados", recuerda Sanvitale. "En aquel tiempo logramos un acuerdo con mi tío (dueño del garaje pegado a mi casa), para alquilar el espacio y lograr instalar allí un sitio de trabajo".
La superficie total era de 35m², suficientes para armar una oficina, un baño, algunas estanterías tomadas a la pared para almacenar materiales y el espacio restante donde Jorge estacionaba la camioneta o lo convertía en taller eventualmente.
De emprendedor a empresario
Desde entonces, el emprendedor devenido empresario transitó una serie de obstáculos. "Las dificultades que afronta todo emprendedor cuando comienza un negocio, al no descender de una familia con tradición empresaria tenía que aprender todos los detalles en el transcurso de la acción", dice. "Prepararme para lo que podía venir, aprender, cosa que seguimos haciendo para ser cada día mejores", enfatiza.
La empresa se transformó en S.A. en 2005. A 31 años de su creación, la Pyme se consolida en la comercialización, instalación y puesta en marcha de cargadores para fomentar la electromovilidad en el país. Realiza obras de miles de metros cuadrados y apuesta a la energía solar.
Gracias al crecimiento de la empresa, fueron adquiriendo mejores espacios. "Hoy nuestro taller y oficinas están en un mismo lugar y cuentan con más de 2.000 m². Trabajar allí es un logro importante. Si bien parte de ese proceso fue hipotecar mi casa para adquirirlo, valió la pena", remarca.
La evolución del negocio
Para la compañía, hubo dos hitos que marcaron un antes y un después en su operación: por un lado, la certificación del proceso de fabricación de sus tableros bajo Norma ISO 9001/2015 en 2018, que es parte de un proceso largo e importante para las empresas. Por otro, haber sido homologada por la marca internacional ABB, que se especializa en energía eléctrica, automatización, equipos industriales y movilidad eléctrica.
"Gracias a este paso, hoy estamos trabajando junto a ellos en el desarrollo de puntos de carga para vehículos eléctricos en el país y estamos experimentando el fruto de nuestro esfuerzo en la industria", sostiene.
Según cuenta el vocero, no existió una inversión original. "No teníamos capital alguno más allá de los recursos que surgían de ejecutar las obras", dice. "Al año siguiente de la fundación de Mehcco comenzó en Argentina una crisis que llevó a le reestructuración de los bancos".
"Por entonces, los pocos fondos que disponíamos por los trabajos realizados quedaron atrapados y fueron recuperados tres años después", se lamenta. "No fueron épocas fáciles. Necesitábamos pagar a nuestros proveedores y todo cuanto generábamos se repartía para saldar nuestras deudas. Vivimos algunos años con el sueldo de mi esposa quien por entonces trabajaba en relación de dependencia", recuerda.
Pero esa racha fue cambiando. "Hoy tenemos una facturación superior a los $300 millones. Nuestra propuesta de valor está vinculada a los más de 30 años de experiencia que tenemos en el mercado y a buscar siempre optimizar la experiencia del cliente para superar sus expectativas", dice.
En este sentido, destaca la vocación de servicio y el contacto que tiene con cada cliente. "La cadena de valor que tenemos en la empresa, sumada a nuestras políticas de calidad y poder adaptarnos a lo que cada cliente requiere. Además, estar a la vanguardia en cuanto a la tecnología disponible en el mercado siempre fue esencial".
En línea con ello, a la planificación, diseño e instalaciones de infraestructura eléctrica para las industrias la empresa le agregó su vocación por tener un mundo más sostenible. "Siempre hicimos foco en la eficiencia energética e incorporamos una nueva unidad de negocios, Mehcco Mobility, con el fin de reducir las emisiones de gases que producen los vehículos tradicionales".
En sintonía, agrega: "Tratamos de hacer un aporte al medio ambiente desde nuestras oficinas, donde hemos instalado paneles solares para generar parte de la energía que consumimos y, además, lograr la mayor eficiencia posible en nuestras instalaciones".
Los próximos pasos de la empresa
La tecnología se ha impuesto en los últimos años y su aplicación es fundamental en el trabajo de compañías como Mehcco. "Trabajamos para estar actualizados, capacitamos a nuestro personal e intentamos estar a la vanguardia de cuanto desarrollo nuevo aparezca en el mercado", sostiene Sanvitale.
Sin dudas, augura, "la aplicación de la inteligencia artificial es parte hoy de lo que nos ocupa y no de los próximos pasos. Estamos haciendo nuestras primeras experiencias para aplicarla a nuestros desarrollos y esperamos obtener resultados satisfactorios".