Éxodo: con Dafiti, son 40 las empresas que salieron o están por dejar el país en la era Alberto Fernández
El sitio de e-commerce de moda, Dafiti abandona el mercado argentino y agiganta el éxodo de marcas extranjeras que prefieren "bajar la persiana".
La compañía comunicó oficialmente la decisión a iProfesional: "Lamentamos confirmar que Dafiti Argentina se cerrará. Las ventas continuarán hasta el 18 de septiembre."
"Para mantener la sostenibilidad de nuestro negocio y seguir creciendo como el principal destino online de moda y lifestyle en nuestros mercados, Dafiti revisa y reajusta periódicamente los costes en toda nuestra empresa. Desafortunadamente, estos cambios han afectado recientemente a nuestro negocio en Argentina y confirmamos el anuncio de una liquidación ordenada de Dafiti Argentina en los próximos meses", dijeron fuentes de la empresa en Latinoamérica a este medio.
Las razones tienen que ver sobre todo con el "prolongado período de alta inflación en Argentina, los controles arbitrarios de las importaciones y el éxodo de marcas internacionales y otros proveedores que se niegan a trabajar directamente con entidades argentinas ha puesto seriamente a prueba nuestra capacidad para operar el negocio."
Las fuentes confirmaron que durante el período 2020-2022, Dafiti Argentina experimentó "un empeoramiento de la rentabilidad" y un "Flujo de Caja Libre Normalizado negativo". Además, no ven "signos de mejora de las perspectivas, dados los problemas a los que se enfrenta el sector de la moda y el comercio minorista a nivel mundial, combinados con el actual entorno macro en Argentina, que no muestra signos de desaceleración."
"Se trata de una decisión muy difícil y, en las próximas semanas, nos centraremos en la mejor manera de cumplir nuestras obligaciones con el personal, los socios comerciales y otras partes interesadas. Nos gustaría dar las gracias a todos nuestros empleados, socios comerciales y otras partes interesadas por su compromiso a lo largo de los años", cerraron desde la compañía de comercio electrónico de moda, que a la vez confirma que tiene "una estrategia ambiciosa para el éxito futuro" de su negocio en Latinoamérica, en Brasil, Chile y Colombia.
Esta decisión profundizó la preocupante tendencia de empresas trasnacionales que se retiran de la Argentina. Imposibilidad de girar divisas y hacerse con insumos importados, restricciones para acceder al dólar oficial, inflación acelerada e incertidumbre política y macroeconómica son algunos de los argumentos que explican la oleada de empresas que pusieron fin a sus operaciones en el país durante los últimos cuatro años.
Multinacionales que previamente desactivaron sus operaciones en el país
Hace dos semanas, el Banco Macro, fundado por Jorge Brito y Ezequiel Carballo, y hoy presidido por Jorge Brito hijo, anunció la compra del Banco Itaú por unos u$s50 millones.
La entidad brasileña tomó esa determinación tras acumular dos años de números financieros en rojo y se añade a una nómina de compañías de todos los rubros que pusieron fin a sus operaciones en el país. Con esas salidas concretadas o por suceder, ya son 40 las multinacionales que abandonaron la Argentina de 2019 a esta parte.
A principios de agosto, la petrolera estadounidense Exxon Mobil activó un proceso de "revisión estratégica" que, en concreto, redundaría en la potencial puesta en venta de sus áreas en el reservorio de no convencionales de Vaca Muerta.
La empresa es dueña de siete espacios de explotación en esa zona de la Patagonia y puso en marcha su estrategia de revisión a fines del mes pasado. Si bien el gigante petrolero estadounidense se ha cuidado de decir que su decisión refiere a una salida total de la Argentina, lo cierto es que el movimiento de Exxon Mobil encendió suspicacias en el ámbito de los hidrocarburos.
Previamente, había sido la decisión de la controlante de Zara de desprenderse de sus activos en país, combinada con una salida de trasnacionales que no ha hecho más que volverse una tendencia firme en los últimos cuatro años.
A principios de julio, se sumaron otros actores a la decisión de desactivar sus operaciones en el ámbito doméstico. La francesa BNP Paribas Cardif Argentina, por mencionar un primer caso, transfirió su negocio de seguros a la local Grupo ST, mientras que la rusa TMH dialoga con grupos argentinos para vender su filial en el país. A estas identidades hay que añadir la decisión de la chilena Rosen de desprenderse de su fábrica y mantener presencia a través del modelo de franquicias.
En el caso de BNP Paribas Cardif Argentina, la firma vendió su negocio al Grupo ST en una operación que aún se encuentra sujeta a la aprobación de la Superintendencia de Seguros de la Nación. Pero el acuerdo está y el movimiento le garantiza a la empresa local una posición más sólida en un mercado en el que ya opera a través de Orígenes y Life. Según fuentes del sector, la compañía francesa pisa fuerte en el segmento de los seguros de desempleo, accidentes, vida, salud, consumo y protección en cajeros.
En cuanto a TMH, la firma negocia con Motora Argentina, controlada por Cale Group, la venta de su filial en el país.
En junio de este año, el conglomerado francés dueño de marcas tradicionales en diferentes rubros como Boulanger, Norauto, Midas, Simply-Sabeco y Leroy Merlin, dejó la Argentina tras vender su concesionaria y empresa de servicios integrantes de autos local. Se trata de la familia Mulliez, que vendió el 90% del capital de Norauto al grupo automovilístico Stellantis, nombre surgido de la sociedad creada tras la fusión entre FCA y Grupo PSA en el 2019.
Previamente, la empresa OLX Autos confirmó el fin de sus operaciones en el país.
La continuidad de salidas de mayo
En mayo, dos nombres de peso optaron por cesar actividades en el país. En la primera parte de mayo, el banco estadounidense Lazard y la Universidad de Harvard –que participaba de forma contundente en el negocio forestal– "levantaron campamento" a raíz de las dificultades económicas que atraviesa la Argentina.
Lazard se dedica al negocio de fusiones y adquisiciones, busca compradores a otras empresas en venta y también elabora reestructuraciones y planes de financiamiento de deuda.
Según indicaron sus directivos, la salida se inscribe dentro de la estrategia de reducir costos luego de tres meses de pérdidas. El cierre implicó la pérdida de medio centenar de puestos de trabajo.
Por el lado de Harvard, la institución operaba en el negocio forestal a través de EVASA, un fondo de inversión que administraba las estancias Las Misiones y Celina, y el establecimiento Empresas Verdes Argentina, en todos los casos ubicados en la provincia de Corrientes.
La casa de altos estudios traspasó su negocio forestal, basado en la explotación de casi 90.000 hectáreas, a la firma Central Puerto.
En abril también hubo retiradas
Durante el mes de abril tuvo lugar la salida de la catalana Grifols. Se trata de una firma enfocada en la producción de medicamentos plasmáticos y que en Argentina funcionaba a través de oficinas operativas en Munro, provincia de Buenos Aires. La firma recibió un primer impacto en su negocio con la irrupción del Covid-19.
La pandemia pegó de lleno en la disponibilidad de donantes de sangre y a esa complicación luego se añadieron las trabas vigentes para la gira de divisas que pesan sobre gran parte de las empresas extranjeras.
También en ese mes se confirmó la salida de H.B. Fuller, una multinacional estadounidense con operaciones en el parque industrial de Pilar. Su salida redundó en la desaparición de más de 60 empleos.
La compañía notificó que sus instalaciones en Pilar dejarán de operar de manera definitiva el 30 de este mes. La intención de la compañía es concentrar su producción en Brasil, Chile, Dinamarca y México.
En la Patagonia, las canadienses Pan American Silver y Silver Standard Resources pusieron fin al funcionamiento de su subsidiaria Minera Triton en Gobernador Gregores, Santa Cruz. Ambas compañías desactivaron el proyecto de oro y plata que explotaban en esa zona y al menos 200 personas se quedaron sin trabajo.
En marzo ocurrieron otras salidas de peso
A fines de marzo, Lactalis, el gigante lácteo francés que desembargó en el país en 2015, vendió su última planta argentina a un operador local. La desinversión tuvo lugar después de que la firma adquiriera, en diciembre de 2022, la empresa Dairy Partners America, un "joint venture" de Fonterra y Nestlé por el que pagó alrededor de 136 millones de dólares.
También en ese mismo momento se conoció la decisión de la alemana Edding de poner fin a su negocio productivo en el país.
El movimiento de Lactalis y Edding ocurrió a escasas semanas de que la chilena Masisa pusiera a la venta sus activos forestales en las provincias de Corrientes y Entre Ríos. Y de que de la italiana Enel avance con la decisión de deshacerse de la cuestionada Edesur.
A estas salidas hay que añadirles el final de operaciones de Dr. Martens, marca emblemática de botas, borcegos y calzados en general, que puso fin a su negocio en la Argentina en el primer semestre del año pasado.
Antes, a principios de noviembre, la startup de transporte Beat, la primera aplicación en aceptar los taxistas a su plataforma al mismo nivel y en igualdad de condiciones que los particulares, anunció que su decisión de dejar de operar en Argentina por un cambio en su modelo de negocio. La firma comunicó, también, su intención de centrar operaciones en el mercado europeo.
A inicios de ese mismo 2022, la peruana Alicorp, dueña de etiquetas como Okebon, Zorro y Plusbelle, también cesó sus operaciones comerciales luego de 13 años ininterrumpidos de funcionamiento en el país.
Un aluvión de retiradas de empresas entre 2020 y 2021
En el último tramo del segundo semestre de 2021 dijo adiós la española Ecolumber, especializada en el cultivo y comercialización de frutos secos, y se despidió MetLife, que decidió vender su negocio a GST –firma que ya había comprado su unidad Metlife Seguros de Retiro– en un monto que en el mercado se estima en alrededor de 8 millones de dólares.
A principios de agosto de ese mismo año, Dow anunció su la intención de cerrar su planta en la localidad santafesina de San Lorenzo, decisión que en octubre fue para atrás luego de intensas gestiones efectuadas por Matías Kulfas y Omar Perotti, ministro de Desarrollo Productivo y gobernador de Santa Fe, respectivamente.
Un poco después, a fines de octubre, la local Georgalos adquirió el 100 por ciento de las acciones de Alimesa S.A., una planta hasta ese momento propiedad de Pepsico, ubicada en la provincia de La Rioja, y en la cual se elaboran las marcas Toddy y Zucoa.
Si bien la marca de la gaseosa se apuró en informar que la medida no se correspondía con una salida de la Argentina, lo cierto es que ejecutivos de la filial en el país sí reconocieron la decisión de la marca de pasar a enfocarse en categorías estratégicas.
Entre 2020 y 2021, la lista de empresas multinacionales que dejaron el mercado local o anunciaron sus intenciones de irse de la Argentina fue aumentando más allá de los casos emblemáticos como los de Walmart y Falabella o LATAM.