Licuados de frutas, sin cortar ni pelar: argentinas crearon blends con tecnología que usa la NASA

Todo comenzó en un taxi. Al menos, después de ese viaje que duró apenas 20 minutos, donde la charla giraba en torno a la presentación que acababan de hacer como parte del trabajo final de una maestría, quedó claro que la idea que las dos compartían tenía que llevarse a cabo. Se miraron y, antes de bajar, una le dijo a la otra: "¿Llevamos esto a la realidad, no?".

Así cuenta Eugenia Doffo cómo nació IKAI Foods, la marca que fundó junto a Carolina Naboni y que elabora blends de frutas liofilizadas -la misma técnica de deshidratación que utiliza la NASA para suministrarle la comida a los astronautas-, que vienen listos para preparar licuados y sin perder ninguno de los nutrientes y vitaminas que tiene la fruta fresca.

"La idea surge de una necesidad profunda de contribuir en términos de alimentación y nutrición para mejorar la calidad de vida. Carolina, mi socia, se quejaba porque cada vez que iba a buscar a sus hijos al colegio, que salían con hambre y ganas de comer algo ‘ya’, no tenían una opción saludable en cuanto a la oferta que suele haber en la calle. Desde kioscos hasta el típico copo de azúcar y pochoclos", cuenta Eugenia Doffo, quien es ingeniera en alimentos y que, desde que se anotó en la carrera, sabía que quería contribuir desde su profesión en temas de salud y nutrición.

Corría el año 2018 y las dos estaban cursando un máster en Administración de Empresas y Negocios cuando comenzaron a fantasear con el proyecto. "Con las herramientas que teníamos, vimos que la mejor solución era desarrollar un blend de frutas naturales listo para preparar, y a fines de ese año decidimos emprender", recuerda Doffo, y agrega que, hasta el momento, llevan invertidos unos 100.000 dólares. El año pasado, revela Doffo con orgullo, dieron un salto que marcó un hito en el negocio: las ventas se multiplicaron por diez.

La palabra IKAI nace del Ikigai, la conjunción de las palabras japonesas "ikiru", que significa vivir, y "kai", que se puede traducir como "la realización de lo que se espera". La unión de ambas, explica Doffo, se traduce como "un propósito de vida" o "una razón para vivir". Y se conforma por la intersección de cuatro dimensiones básicas: la pasión, la vocación, la profesión y la misión en la vida. "Cuando se tiene claro el sentido de nuestra existencia y se trabaja para eso, la vida se alinea, se vive más tiempo y aumenta la felicidad", sostiene.

-¿Por qué la gente no come suficientes frutas y verduras?

-Las causas son varias y están relacionadas a la complejidad que implica poder consumirlas. Por ejemplo, ir a comprar, trasladar y almacenar la cantidad de kilos que conlleva; la preparación, hay que lavar, sanitizar, pelar, cortar. El tiempo asociado a dichas tareas.

También cuenta la falta de habilidades culinarias para incluirlas en las preparaciones diarias, más allá de consumir fruta cortada, que muchas veces "aburre".

Todo lo anterior lleva a que mucho de lo que se compra, se termina tirando porque se pone feo o por la falta de tiempo. Otro factor es la estacionalidad de frutas y verduras, que a veces nos hace sentir que siempre estamos comiendo lo mismo.

Por último, quizá, la dificultad para poder consumir fuera de la casa: en el lugar de trabajo o de estudio, por ejemplo. Tal vez se puede guardar una banana en la cartera o la mochila, o alguna otra fruta fácil de comer, pero difícilmente hagamos lo mismo con un ananá, una pera o similar fuera de casa.

-¿Es un proceso costoso el de la liofilización?

-No quisiera ponerme técnica en el tema, pero si analizamos el proceso de punta a punta, la liofilización es una solución increíble y el costo se repaga con los beneficios: la posibilidad de aumentar la vida útil de las frutas y verduras, la reducción del desperdicio, la merma del costo energético asociado al transporte, la reutilización de recursos y el no desperdicio de los insumos asociados a la producción.

De acuerdo con los últimos datos, el desperdicio de frutas y verduras a nivel mundial corresponde al 50% del desecho de alimentos, y cuando se desperdicia un alimento se desaprovecha el trabajo asociado a ello. Entonces, si prestamos atención a todo esto, la liofilización es una excelente solución.

- ¿Cuáles son las combinaciones de los blends? 

- El proceso del diseño de los blends implicó el entendimiento del consumidor. Analizamos el mercado de licuados y jugos relacionados con las costumbres argentinas y, a partir de allí, empezamos a probar las combinaciones que podían ser las que más aceptación tuvieran, tratando de apartarnos de lo más tradicional como un simple licuado de frutilla o banana.

Antes del lanzamiento, realizamos más de 50 combinaciones, y mediante diversas técnicas de análisis y evaluación sensoriales fuimos dando con las cinco que finalmente llegarían al mercado. Hoy, tenemos variedades más tradicionales como el exitoso blend de frutos rojos (frutillas, frambuesas y arándanos), el de durazno-frutilla y algunas más exóticas como durazno-mango. También sumamos una variedad muy fresca como la de pera-ananá-manzana verde y otra más tradicional, con un tinte moderno y casual como banana, almendras y miel.

"Antes del lanzamiento, realizamos más de 50 combinaciones, y mediante diversas técnicas de análisis y evaluación sensoriales fuimos dando con las cinco que finalmente llegarían al mercado"

-¿Quiénes fueron los primeros en testear y hacer una crítica de los blends?

-En el proceso de creación contábamos con familia, amigos y compañeros de trabajo y oficina. Ellos fueron los primeros que se animaron a degustar las distintas combinaciones. Volvíamos locos a todos en la oficina, probando y probando, tratando siempre de mejorar las recetas para encontrar los blends perfectos.

-¿Con qué tipo de obstáculos se encontraron en el camino?

-Emprender es un camino muy desafiante, una montaña rusa de emociones en la que es clave la persona con la que decidís hacer esa aventura. Y acá es donde todos los días nos damos la mano para seguir caminando juntas. Cuando el propósito es grande, cuando tenés una fuerte convicción y fe en lo que estás haciendo, los obstáculos hacen parte del camino.

¿Es una aspiración llegar a las góndolas de los supermercados? 

El gran sueño de IKAI es impactar en todas y cada una de las personas para que puedan sumar más frutas y verduras a su rutina diaria, y así mejorar su calidad de vida. Si eso significa estar en los supermercados para tener mayor cobertura, entonces allí estaremos. Actualmente, IKAI tiene llegada a todo el país y a un amplio espectro de consumidores por diversos canales. Vendemos por medio de nuestra página web, a bares, empresas, heladerías, restaurantes, colegios.

Nuestro próximo paso es poder realizar la primera exportación. Para eso estamos buscando socios estratégicos de negocios que nos acompañen en este gran paso.

-De licuadoras y anécdotas. ¿Cuál es la historia más divertida que quedará en la biografía de IKAI?

-Fue con un cliente grande, muy grande. Estábamos en la sala de reunión en plena demostración en vivo del producto, para lo cual nosotras siempre llevamos una licuadora portátil -de las que trituran hielo y se cargan por USB- y todos los ingredientes, como agua fría, leche fría, hielo y nuestros packs de blends.

Ya habíamos probado el de frutos rojos con agua y hielo, que les había encantado. Pero como buenas entusiastas queríamos que degustaran otra variedad con leche. Bueno, me pongo a hacer todo, incorporo cada uno de los ingredientes en la licuadora y le doy "start". Imaginá el final. Debe haber quedado mal tapada, porque la leche sale volando por toda la sala de reunión. Caro, mi socia, roja instantáneamente. Yo apago todo y limpio a máxima velocidad, como si nada hubiera pasado.

Gracias a Dios, lo hicimos otra vez y les encantó. Al día de hoy ellos se siguen acordando y, por suerte, nos reímos todos.

IKAI Foods: datos y precios

• Los blends de durazno-mango y el de durazno-frutilla son dos de los más vendidos.
• Cada blend tiene un precio de 820 pesos, y el combo de 5 blends se comercializa en 4.100 pesos.
• ¿Qué es la liofilización? Es la técnica de deshidratación que conserva todos los nutrientes y propiedades de los alimentos. Además, permite mantener su textura y sabor inalterados sin necesidad de conservantes, aditivos ni refrigeración por, al menos, un año.