La mayor cervecera argentina apuesta a los commodities para generar dólares
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Con un consumo interno con cepos a los precios y un escenario económico local inestable que se podría potenciar por el clima político que vivirá este 2023, las empresas de consumo masivo apuestan a diversificar sus ingresos a partir de hacer frente a la demanda local y a incrementar sus exportaciones para poder obtener dólares que les permitan equilibrar los ingresos en pesos que les reporta el mercado doméstico.
Es el caso de Cervecería y Maltería Quilmes, que durante el año pasado aumentó un 50% sus exportaciones, más que nada a partir de los commodities que utiliza y no de sus marcas de bebidas.
En ese marco, la compañía que pertenece al holding europeo AB InBev, cerró ventas al exterior por u$s421 millones, superando ampliamente las que había enviado en el 2021 cuando llegó a los u$s282 millones, alcanzando su récord histórico.
La división de agronegocios fue "la estrella" del grupo, e incluye tanto cebada como malta, insumos que representaron casi el 95% de las exportaciones de la compañía. El 5% restante corresponde principalmente a exportaciones de cerveza, incluyendo su marca insignia, Cerveza Quilmes, con la que está presente en más de 15 países alrededor del mundo.
El peso de los negocios agropecuarios
Según un informe distribuido por Quilmes, la división de agronegocios representó casi el 95% de las exportaciones con un incremento del 20% de volumen de cebada en relación con el año anterior.
La compañía trabaja con más de 1.100 productores de cebada, distribuidos en más de 250 ciudades de la Provincia de Buenos Aires, en la implementación de buenas prácticas agronómicas que buscan restablecer el bienestar del suelo y la biodiversidad, aumentar la captura de carbono y eficientizar el consumo de agua. La cebada es transformada en malta en sus dos Malterías bonaerenses, una en Tres Arroyos yla otra en Puán.
En porcentaje, el aumento de sus exportaciones de agronegocios fue del 50% en comparación con las del 2021. Y en el caso de los productos elaborados, también realizó partidas al exterior de Stella Artois; Budweiser; Andes Origen; entre otras, como vino de la Bodega Dante Robino.
"Estos resultados son fruto de un plan de inversiones que la compañía viene realizando durante los últimos años con el objetivo de sustituir importaciones y elaborar localmente todas las marcas de la compañía", detalla un informe difundido por las autoridades de la principal fabricante de cervezas de la Argentina.
Venta de commodities
Sin embargo, el foco está puesto más que nada en los recursos que puede obtener de la venta de commodities más que del portfolio de sus marcas, a pesar de que cuenta con el respaldo del mayor holding productor belga de cervezas del mundo dueño de marcas globales como Budweiser, Corona Extra, Stella Artois y Beck's.
Además, a modo nacional tiene Bud Light, Skol, Brahma, Quilmes, Labatt's Blue, Michelob, Harbin, Sedrin, Leffe, Cass, Paceña, Klinskoye, Sibirskaya, Gilde, Chernigivske, Jupiler, Pilsen, Patricia y Norteña.
Toda una cadena de producción que involucra a más de 130.000 personas y va desde el campo hasta la botella y que, según los ejecutivos de Quilmes le permitió a la Argentina fortalecer su participación a nivel regional posicionándose como el principal proveedor de cebada y malta de América del Sur y uno de los 10 principales complejos exportadores del país.
Al respecto, Martín Ticinese, presidente de Cervecería y Maltería Quilmes, explica que el complejo agro cervecero del grupo "nos permite generar importantes ingresos para el país". Según su visión, el trabajo con los productores locales le permite "tener una cebada de excelente calidad, reconocida a nivel mundial al punto que uno de cada cuatro cervezas que la compañía elabora en el mundo es con cebada de la Provincia de Buenos Aires".
Cambio de modelo
En cuanto a cerveza, la compañía exportó un 37% más de volumen que el año anterior, principalmente porque crecieron las ventas a Uruguay. La compañía exporta su marca insignia Quilmes a 15 países, entre ellos Estados Unidos, Brasil, Francia, Japón, Alemania, Australia, México; y, en menor medida, Cerveza Patagonia, Stella Artois, Budweiser, Corona y Goose Island a Chile, México, Paraguay, Uruguay y Perú.
Además, por primera vez exportó Isidra, la sidra de Cerveza Patagonia, a Paraguay y Uruguay; y tapas de cerveza a Paraguay, Uruguay, Chile y Bolivia. Estas tapas se elaboran en Coroplas, ubicada en la ciudad de Quilmes. Hizo lo mismo con gaseosas e isotónicos: Gatorade a Bolivia, Brasil y Uruguay; y 7up y Paso de los Toros a Uruguay.
En el caso de Bodega Dante Robino, que adquirió en 2020, había duplicado sus exportaciones en 2021, y en 2022 logró mantener el nivel, haciendo llegar sus productos a Brasil, Paraguay, Uruguay Ecuador, Guatemala, Emiratos Árabes, Irlanda, Italia, Países Bajos, Catar, EEUU y República Dominicana.
Una plataforma de marcas inspiradoras que interactúa
A partir de este pool de marcas y de la importancia que los agronegocios están comenzando a generar, Quilmes se está transformando para pasar de ser una compañía tradicional de bebidas, con un modelo unidireccional, a una plataforma de marcas inspiradoras que interactúa y crece junto a su ecosistema.
Elabora, distribuye y comercializa cervezas, gaseosas, vinos, sidras, espumantes, energizantes, aguas minerales, jugos e isotónicos, en alianza con empresas líderes como PepsiCo, Nestlé, RedBull y Bodegas Cuvillier. Al mismo tiempo, desarrolla soluciones tecnológicas como Ta-Da, la aplicación de envío de bebidas número 1 de Argentina; y BEES, la plataforma B2B que renueva la experiencia de compra y mejora el negocio de sus clientes en todo el país a través de la inclusión digital.
La compañía cuenta con 6.000 empleados directos en toda la Argentina, además de 10 plantas productivas incluyendo cervecerías y plantas de gaseosas; una bodega; dos malterías; una chacra de lúpulo, una fábrica de tapas, nueve oficinas regionales de venta y nueve centros de distribución. También opera seis centros de distribución urbanos para entregas de última milla con vehículos eléctricos; trabaja con una red de más de 6.000 proveedores PyME y 170 distribuidores abasteciendo más de 300.000 puntos de venta en todo el país.
Desde 2019 es la primera compañía de consumo masivo en migrar su matriz energética a 100% renovable a través de un acuerdo a 20 años con Central Puerto, y en 2022 anunció su camino hacia la carbono neutralidad, reafirmando su compromiso de largo plazo en el país.