Consorcios y barrios privados: preocupa la morosidad y aumentos de expensas

El contexto inflacionario sumado a la morosidad y acumulación de deuda se vuelve un tema recurrente y alarmante para los administradores. Si bien a nivel general, podemos decir que en los consorcios y barrios, la mayoría de los vecinos pagan regularmente las expensas, el hecho se produce por una minoría de unidades que directamente han dejado de pagar y acumulan deuda e intereses.

"Si bien los consorcios son entidades sin fines de lucro, para afrontar las obligaciones de pagos (ejemplo, sueldo del encargado, mantenimiento de ascensores, fumigación) quien administra debe recaudar las expensas lo antes posible", comenta Nicolás Baccigalupo, CEO de Octopus Proptech.

"Cada consorcio en sí mismo es un mundo, y gestionarlo como si fuese una empresa puede generar una mejora en la vida de los vecinos. La Administración puede analizar el modelo de negocios de su cartera de consorcios como si fuese una suscripción mensual, al mejor estilo Netflix, Spotify, un gimnasio o una universidad. Baccigalupo agrega: "No recaudar el total de las expensas es estancarse; no crecer. Impacta directamente en el mantenimiento y las posibilidades de mejora de cada consorcio o barrio. En contrapartida, si todos cumplen, el beneficio será común."

Es importante diagramar una estrategia que tenga los objetivos claros: no acumular deuda nueva de mis clientes y reducir la deuda ya acumulada (morosidad). 

Para ello, es necesario tener en cuenta las siguientes recomendaciones: 

Cambio de modelo de Cobranzas: De Reactivo a Proactivo

La principal recomendación es pasar de tener un modelo de cobranzas reactiva a un modelo de cobranzas proactiva. Esto es, no esperar a que se genere deuda para cobrar, si no anticiparse. ¿Cómo? poder implementar un sistema de débito automático, por ejemplo. 

De este modo, la ecuación cambia. El reactivo pasa a ser el usuario, y el proactivo, el que recauda.

Consorcios y barrios privados: preocupa la morosidad y aumentos de expensas

En un modelo reactivo, hay una dependencia de la buena voluntad del deudor para cobrar. Y a lo sumo, uno reclama en base a lo no recibido, se reacciona ante la ausencia de pagos.

En cambio, al ser proactivo en la gestión de la deuda, uno puede anticiparse a un comportamiento de pago. Es pensar de antemano de qué forma automatizar el proceso de cobranzas.

Modelos de pago: adaptarse al universo de usuarios/clientes

Un primer análisis realizado por Octopus Proptech destaca que la mayoría de las personas no paga expensas como paga habitualmente otros bienes de consumo. La forma más habitual de pago continúa siendo la transferencia bancaria, mientras que otros rubros la forma de pago se realiza mediante tarjetas de crédito o débito, QR o envío de dinero. Actualmente, en consorcios y barrios al menos el 90% paga por medios digitales. 

Es clave entender qué usuario target se tiene y cómo es su comportamiento para definir qué modelo de cobranzas adaptar, con qué herramientas y, muy importante, qué medios de pago priorizar. Como modelo ideal, podríamos poner un modelo de débito automático, o débito directo en cuenta. Sin embargo, es posible que en el rubro de los consorcios, exista una porción de usuarios que no acepte un formato de débito porque desee revisar los gastos antes de pagar. Entonces, debo buscar alternativas y ofrecer varias opciones de pago. 

Es necesario incluir opciones de pago que se acomoden a lo que esté acostumbrado el usuario en su vida de todos los días. Por ejemplo, sumar un botón de pago o un código QR que tiene hoy en día una aceptación universal.

La estrategia es clara, aunque también se vuelve imprescindible cobrar a los morosos con deuda acumulada. Cuando los pagos comienzan a retrasarse es necesario buscar nuevas alternativas para cambiar la situación. "Debemos contemplar un formato de planes de pagos, o pagos cuotas. Y, adicionalmente, activar un plan para que ese usuario en particular no vuelva a acumular deuda". "Es importante, por último, destacar que estar dispuesto a ofrecer todas estas herramientas y soluciones implica incluir nuevos costos. Incluir modelos de pago implica intereses que es necesario estar dispuesto a asumir", concluyó  Nicolás Baccigalupo.