Cuál es el plan para incentivar inversiones en GNL que tiene en carpeta la Secretaría de Energía
Si bien tienen en claro que en el escenario actual resulta imposible obtener los acuerdos necesarios debido a la marcada divisoria de aguas que existe en el Congreso entre el oficialismo y la oposición por el proyecto de juicio político a la Corte Suprema de Justicia, los funcionarios del área energética siguen dando las puntadas finales al proyecto de ley destinado a la promoción de inversiones en el negocio del GNL (Gas Natural Licuado).
El borrador del proyecto de ley marco para GNL -que circula en los pasillos de Energía- contiene un paquete de incentivos que, entre sus principales lineamientos, prevé: un esquema de garantía de estabilidad fiscal, exenciones impositivas, libre disponibilidad de divisas, acceso al mercado de cambios y un compromiso de inalterabilidad regulatoria para la firma de contratos a lo largo plazo tanto para la provisión interna de insumos y gas, como para la industrialización y exportación del combustible.
El nuevo marco regulatorio -que el ministro de Economía, Sergio Massa quiere sacar con un amplio respaldo del Congreso para que se transforme en una suerte de "política de Estado"- declara "de interés público la licuefacción de gas natural con destino a la exportación de GNL" y sienta las bases para poder apuntalar "el desarrollo tecnológico del sector y la cadena de valor de las empresas e industrias locales".
Para alcanzar esos objetivos centrales, el proyecto contempla la implementación de un nuevo "régimen de promoción de inversiones" que abarca los proyectos orientados a obras de transporte del gas natural destinado a la producción de GNL, el almacenaje, la licuefacción, comercialización y exportación.
Promoción de inversiones en el negocio del GNL: puntos principales
El esquema específico de incentivos tiene los siguientes puntos salientes:
- El otorgamiento de beneficios fiscales a proyectos que comprometan como mínimo una determinada inversión y una capacidad mínima de producción anual de GNL.
- Los alivios tributarios pasarán por el Impuesto a las Ganancias, devoluciones en materia de IVA, exenciones por importación de bienes y un tratamiento especial en en materia de derechos de exportación que oscilarían en función del comportamiento de los precios internacionales del GNL.
- Un compromiso de estabilidad fiscal y regulatoria y la garantía de libre disponibilidad de un porcentaje de las divisas obtenidas por las exportaciones de GNL.
- Las empresas tendrán asegurado el acceso a las divisas que requieran para poder hacer frente a la cancelación de los créditos y líneas de financiamiento que tomen con entidades y bancos del exterior.
- En cuanto a la capacidad de los gasoductos, las empresas beneficiarias del régimen promocional tendrán garantizado tanto el suministro de gas y el transporte hasta las plantas de licuefacción, como la autorización de exportación en firme de GNL.
- El conjunto de beneficios e incentivos se mantendrán durante un período de 30 años, pero para poder acceder a ellos las empresas interesadas tendrán que desembolsar las inversiones y poner en marcha los proyectos en los primeros tres años de vigencia del nuevo marco legal.
En cuanto a la participación de empresas y mano de obra local, el proyecto establece como exigencia para las empresas el cumplimiento escalonado de una serie de requisitos de integración de contenidos nacionales.
Para no perder los beneficios tributarios y cambiarios, deberán incrementar con el paso de los años la incorporación de bienes e insumos producidos en el país con el fin de generar "ahorro de divisas, desarrollo tecnológico interno y creación de nuevos puestos de trabajo".
La potencialidad del GNL
Tras el cimbronazo que produjo en el mercado energético mundial el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el GNL se convirtió en el combustible más demandado por los países europeos.
Según un informe de la consultora McKinsey & Company, Europa y los principales países asiáticos se aprestan a remplazar este año con GNL el equivalente a 140.000 millones de metros cúbicos de gas que antes importaba de yacimientos rusos. Ese volumen presenta un 27% más de la comercialización que se registra anualmente en el mercado de GNL.
Por su parte, un trabajo realizado por la fundación Fundar e IDEA destacó que, hasta el avance de la tecnología del GNL, el gas natural se transportaba exclusivamente a través de gasoductos, pero el desarrollo de este sistema posibilitó el almacenamiento y transporte a lugares alejados y para 2030 se espera que el GNL concentra la mayor parte de las operaciones comerciales en el mercado internacional de combustibles.
Proyectos locales en danza
En el plano local, ya se encuentran en la gatera tres grandes proyectos de inversiones en GNL que están esperando la aprobación de las nuevas reglas de juego que impulsa el Gobierno para el desarrollo del sector. En septiembre pasado, la petrolera de mayoría accionaria estatal YPF y la malaya Petronas suscribieron un "Acuerdo de Estudio y Desarrollo Conjunto para un proyecto integrado de GNL".
El proyecto comprende la producción de gas no convencional, el desarrollo de gasoductos y la construcción de plantas de licuefacción y muelles portuarios en la zona de Bahía Blanca que implicarían una inversión inicial conjunta de u$s10.000 millones.El acuerdo contiene un compromiso de confidencialidad que se mantendrá vigente hasta la sanción de la ley marco para el desarrollo de la actividad productiva y exportación del GNL.
Por su parte, Transportadora Gas del Sur (TGS) y la estadounidense Excelerate Energy también tienen latente un proyecto para construir una planta de licuefacción en Bahía Blanca destinado a exportar GNL producido con el gas no convencional de Vaca Muerta. A diferencia del proyecto de YPF-Petronas que prevé la exportación permanente y continua, la iniciativa de TGS-Excelerate apunta al despacho de barcos de GNL sólo durante los durante los meses de verano, cuando baja la demanda local.
A su vez, también figura en carpeta otro proyecto que el gobierno de la provincia de Río Negro podría llevar adelante con la petrolera Tecpetrol del grupo Techint. Consistiría en la construcción de un gasoducto desde Fortín de Piedra hasta el Golfo San Matías donde se instalaría una planta de licuefacción destinada a la exportación de GNL.