La falta de acceso al dólar para importar complica los negocios de la mayor productora de aceros del país
A principios de año, las negativas consecuencias económicas a nivel mundial derivadas de la invasión rusa a Ucrania y las regulaciones domésticas que incrementan las restricciones de acceso al mercado de cambios, eran los principales puntos de la "agenda de problemas" identificados por Ternium Argentina todo el 2022.
En ese contexto, la empresa del grupo Techint estimaba para el segundo semestre de este año una muy leve recuperación en el nivel de despachos de acero al mercado doméstico, así como para las exportaciones. También advertía de "la incertidumbre sobre la disponibilidad y los costos de diversos insumos utilizados por la industria del acero".
Ahora, todos sus pronósticos parecen hacerse realidad, teniendo en cuenta los problemas que está evidenciando para poder cumplir con sus clientes las operaciones pactadas a la fecha de aceros planos y largos.
Con una capacidad de producción anual de 10,8 millones de toneladas es una de las líderes del mercado latinoamericano para la fabricación de acero y una amplia gama de productos semi elaborados, planos, largos, conformados, tubos y perfiles. Y el actual problema que atraviesa deriva de las dificultades que tiene para acceder al dólar oficial para financiar las importaciones de su principal insumo, que es el mineral de hierro.
Panorama complicado
Así se lo hicieron saber sus ejecutivos a representantes de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la Argentina (Adimra), durante un encuentro mantenido este martes 26 de julio.
La reunión fue solicitada por esta entidad empresarial por la preocupación evidenciada entre sus asociados como consecuencia de la falta de cumplimiento de las entregas por parte de Ternium Argentina.
Desde la empresa informaron que ante la situación de faltante tomaron la decisión de abastecer al 100% a los fabricantes y al 70% a los distribuidores. A partir de esta situación y la necesidad de las empresas metalúrgicas de obtener los insumos, Adimra comenzó a distribuir entre las empresas un formulario para conocer la situación particular.
"Desde Adimra mantenemos un diálogo permanente con los proveedores de insumos para solucionar el problema de desabastecimiento. En este sentido, les pedimos que aquellas empresas que le compran a Ternium (Siderar) completen el siguiente relevamiento para plantear caso por caso", dice el documento distribuido por la entidad empresarial.
Cada compañía debe completar el formulario cuyos resultados le permitirán a Adimra obtener un panorama claro sobre los problemas que está generando el incumplimiento de la mayor productora de aceros laminados en caliente y en frío, galvanizados, electrocincados, prepintados y hojalata de la Argentina.
Escenario incierto
En la actualidad, Ternium Argentina, que es controlado por la familia que orienta Paolo Rocca, cuenta con cinco centros productivos ubicados en la provincia de Buenos Aires (Ramallo, Ensenada, Haedo, Bosques y Canning).
En la planta de Villa General Savio, Partido de Ramallo, se trabaja el acero en caliente y cuenta con dos altos hornos para su producción, además de las plantas Sidercrom y Serviacero III
La de Ensenada elabora acero en frío, que proviene de la planta de Ramallo. Adicionalmente se encuentra una planta en Rosario que abastece al mercado interno, principalmente a las industrias de la construcción, automotriz, línea blanca y maquinaria agrícola, además de exportar al exterior.
Ya a principios de año, la compañía estimaba un escenario incierto para sus negocios. Por lo menos así lo anticipaba en un documento elaborado para informar sobre los resultados financieros del primer trimestre.
Incertidumbre
Para la Argentina, el informe advertía sobre la persistencia de "un elevado nivel de incertidumbre con respecto a diversos factores con potencial de afectar la demanda de acero en el mercado local y las operaciones de la compañía".
En este sentido, identificaba a la situación macroeconómica del país como un escenario desafiante, mientras que asegura que las nuevas regulaciones que incrementan las restricciones de acceso al mercado de cambios podrían afectar la capacidad de la compañía y su cadena de valor para realizar importaciones de materias primas e insumos.
Adicionalmente, advertía que el conflicto en Ucrania "ha provocado tensión en los mercados globales de energía, afectando la disponibilidad y precio del gas natural licuado, algo que podría resultar en faltantes de gas importado en el país durante el invierno".
La empresa también consideraba ya en ese momento que el ambiente de negocios para la industria siderúrgica global había cambiado significativamente desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania a fines de febrero de 2022.
"El papel de ambos países en el mercado global del acero, junto con la reciente ola de sanciones internacionales contra Rusia, ha conducido a una disrupción en el suministro global de productos de acero y materias primas relacionadas, induciendo aumentos en los costos para la industria que causaron un repunte en los precios del acero en comparación con sus bajas previas", aseguraba Ternium.
Del mismo modo, advertía sobre las dudas que generan las principales variables macroeconómicas de la Argentina y el alto nivel de volatilidad de los precios internacionales, por lo cual estimaba que sus negocios vinculados a la producción de acero tendrán un importante nivel de incertidumbre y moderación durante este año.
Incluso aseguraba que no iba a poder repetir la mejora en sus resultados que logró en el 2021, cuando alcanzó ganancias netas por $134.993 millones contra los $18.866 millones del 2020.