Inversiones rápidas y simples en el mercado inmobiliario: qué podés hacer con 25.000 pesos
Para los pequeños inversores interesados en incursionar en el mercado inmobiliario pero que no llegan a reunir la totalidad del monto necesario para adquirir una unidad en sí misma (ya sea un terreno, un departamento, oficina o un local comercial) o para quienes apuestan a potenciar la rentabilidad de su dinero, hoy existen opciones desde $25.000 para participar de nuevos proyectos dentro del sector.
Se trata del crowdfunding inmobiliario, una opción propone ser parte de un esquema de financiamiento colectivo de inversión en proyectos inmobiliarios. Le permite al inversor "ser dueño de una porción de un inmueble valorizado en dólares". Es decir, de una cantidad de metros cuadrados en lugar de tener que comprar -como mínimo- una unidad funcional, ya sea en obras en desarrollo o edificaciones ya construidas con renta.
Uno de los referentes del tema es Damián Lopo, presidente de Crowdium, plataforma dedicada al crowdfunding que permite entrar con $25.000 de inversión inicial. Sí, pesos, no dólares.
El titular de esta compañía explica las diferencias entre los dos tipos de productos que ofrecen: "El proyecto en pozo suele tener una rentabilidad un poco mayor porque el retorno del capital inicial con toda la ganancia se recibe cuando se finaliza y se vende, usualmente a los 30 o 36 meses".
"En cambio – continúa- en los proyectos terminados con renta, la rentabilidad es un poco más baja, pero, como el inmueble ya está finalizado y se alquila, mes a mes se recibe el ingreso y el resultado de la inversión".
Las ganancias de esta opción dentro del mercado inmobiliario
Si bien las ganancias dependen de múltiples variables, como ser del tipo de proyecto, de la ubicación, del estadio y la solidez de la obra y del tiempo de inmovilización del capital, en el caso de esta empresa "la mayor ventaja proviene del poder de negociación como comprador mayorista" que se ejerce sobre el desarrollador del emprendimiento.
Esto les permite cerrar operaciones a mejores precios que si el inversor acordase en forma independiente.
"Generalmente logramos entre 20% y 30% de descuento por comprar cash y mayorista, con lo cual la rentabilidad que damos se basa en esta posibilidad y está muy por arriba de la media del mercado inmobiliario, que suele rendir entre 10 y 20% en tres años, según el tipo de producto. Nosotros podemos ofrecer entre 25% y 35% de rentabilidad en el mismo plazo", detalla Lopo.
Sin embargo, advierte que, si bien "buscan rentabilidades de dos dígitos anuales", ésta es "estimada" porque en ningún proyecto inmobiliario "está asegurada".
Una puerta que se abre para los pequeños inversores
El empresario amplía al respecto: "Le damos la oportunidad de entrar al mercado inmobiliario a gente que tiene poco capital, pero no aseguramos rentabilidad. Damos accesibilidad desde $25.000 a inversiones que si no tuvieran cientos de miles de dólares no la podrían hacer."
"En el mercado de inmobiliario argentino, al comprar una propiedad nadie te asegura la rentabilidad porque uno no sabe qué va a pasar en el país, qué sucederá con el dólar y con la inflación", señala.
En la actualidad, Crowdium ofrece la tercera tanda de participación en Condominio Copa, un emprendimiento residencial cuya propuesta arquitectónica fue premiada y cuenta con casi 9.000 m2 construibles. Está ubicado en Moreno, provincia de Buenos Aires.
"A partir de una buena negociación con los desarrolladores conseguimos un muy buen precio así que fuimos comprando unidades. Y seguimos. Ya se encuentra más del 80% fondeado con lo cual en los próximos días se va a cerrar. Con este proyecto la gente puede estimar que va a obtener entre 25% y 35% en dólares. Está terminado y brindará rentabilidad todos los meses por alquileres", detalla.
Y agrega: " La gente que invierte en tickets bajos, hoy los proyectos con alquileres –es decir, los que todos los meses pagan- gustan mucho".
En cuanto a las garantías del procedimiento, aclara que "los inversores pasan a ser propietarios de una participación en un fideicomiso (creado para ese proyecto) que es el que compra las unidades. Es decir, son dueños de un porcentaje de todas las unidades adquiridas a través del fideicomiso".
Según explica, todo se hace con contratos en blanco, está auditado por una compañía fiduciaria independiente que está registrada en la Comisión Nacional de Valores y se otorgan certificaciones de participación.
No obstante, antes de apostar a este tipo de propuestas, Lopo acoseja ser cautos: "Hay que ver cuál es la plataforma, qué track récord tiene, quiénes son los desarrolladores, analizar cómo es el proyecto en el que se está comprando y -sobre todo- considerar quién es la fiduciaria, que es la que audita y maneja el capital".