Se "recalientan" los alquileres: noviembre llega con fuertes subas y las inmobiliarias buscan derogar la ley
El cierre de octubre fue a puro aumento en los contratos de alquiler y la perspectiva es que la tendencia continuará profundizándose en la primera parte del mes que recién se inicia, con un acumulado superior al 51 por ciento y desde el ámbito de las inmobiliarias anticiparon a iProfesional que la suba se mantendrá fuerte en los próximos días.
Inflación alta y subas salariales siguen empujando los porcentajes de incremento y a eso hay que sumarle el peso del proceso electoral que se llevará a cabo, justamente, en noviembre. La incertidumbre ante el rumbo económico que tomará el país tras las urnas aceleró en las últimas semanas la salida de unidades del mercado locativo. Producto de este movimiento, sigue intensificándose un "sobrestock" de inmuebles en venta que tira hacia abajo la cotización del ladrillo.
Comercializadores consultados por iProfesional reconocieron que prácticamente no existe oferta de departamentos de tres y cuatro ambientes en alquiler. Y advirtieron, también, que se redujo de forma dramática la disponibilidad de unidades de uno y dos ambientes.
Ante este escenario, la decisión común entre las inmobiliarias es insistir con el pedido de derogación de la normativa que regula los contratos locativos. Y desde la oposición ya emitieron luces en sintonía: según pudo saber este medio, en el transcurso de la próxima semana María Eugenia Vidal concretará distintas reuniones con referentes de la comercialización de inmuebles.
El pedido del sector ya cuenta con el apoyo de Javier Milei y José Luis Espert. En los días previos al escrutinio también buscará acercar posiciones con el oficialista Leandro Santoro. En las inmobiliarias hay coincidencias en que, de continuar el marco tal como está, lo que sigue es la destrucción total del mercado de alquileres y una profundización de la emergencia habitacional.
En diálogo con iProfesional, Marta Liotto, flamante presidenta de CUCICBA, la organización que nuclea a los corredores inmobiliarios, sostuvo que entre los candidatos que se enfrentarán al Gobierno predomina la idea de que la ley es contraproducente para la actividad. Y que, en lugar de modificar los dos puntos más criticados de la normativa –esto es, el cálculo de indexación y la duración extendida de los contratos–, lo más rápido y efectivo sería derogar la ley.
"En torno a María Eugenia Vidal existe esa seguridad. Milei expresó lo mismo desde la reglamentación de la ley. Avanzar con un cambio en determinados puntos requeriría de un lapso superior al tratamiento de una nueva norma. La derogación implicaría volver al régimen anterior y eso acercaría cierta confianza a los propietarios", dijo.
"Terminar, por ejemplo, con el contrato a tres años devolvería la posibilidad de alquilar desde otro lugar, otra forma. La ley cercenó el diálogo entre las partes. Terminó con las posibilidades de negociar montos y pagos como ocurría anteriormente. El resultado ha sido de suba constante para los inquilinos y de pérdida permanente de rentabilidad para los dueños. El actual es uno de los peores escenarios posibles", afirmó.
Según la directiva, la derogación revertiría la situación actual de reducción de la oferta y permitiría comenzar a achicar el "stock" de unidades que pasaron del alquiler a la venta directa. Se estima que, en la actualidad, el número de propiedades en ese estado supera los 160.000 departamentos sólo en la Ciudad.
"También están los propietarios que optaron por cerrar el inmueble hasta que cambien las condiciones del mercado. Volver al régimen anterior ayudaría a descomprimir la economía de esas personas, que no son grandes grupos sino particulares que cuentan con apenas un departamento o dos para alquilar. Hoy esos particulares afrontan todos los gastos de esas unidades que no están en el mercado locativo", precisó.
Menor oferta, más aumentos
Liotto comentó que, sólo en Capital Federal, la oferta de unidades de tres ambientes en situación de alquiler se achicó más del 50 por ciento sólo en el último año. "La reducción en segmentos de viviendas como los monoambientes o los dos ambientes es de, cuanto menos, un 40 por ciento. Es una situación insólita. Nunca vista", afirmó.
"El contexto macroeconómico traba la venta a partir de lo que ocurre con el dólar. O sea que no hay ventas más allá de que tenemos un ‘sobrestock’ de inmuebles en esa condición, todos salidos del ámbito del alquiler. Para operar con relativa normalidad necesitamos, por ejemplo, de un dólar estable que hoy no existe. Si el tipo de cambio se estabilizará hoy en un valor, bueno, quizás empezaríamos a ver una mejoría a partir de marzo del año próximo", aseguró.
De regreso con las cotizaciones de los alquileres para noviembre, la titular de CUCICBA anticipó que la suba "continuará por encima del porcentaje de inflación", y que el techo de 51 por ciento de incremento con el que cerró octubre "seguro se superará antes de las elecciones".
"Los aumentos se escaparon de todo control. El actual es un escenario adverso que seguirá siendo impreciso hasta que transcurran las votaciones. Ayer el índice de incremento para los alquileres se movió hacia 51,2 por ciento. La variación es cada día y las condiciones de la economía impulsan los porcentajes hacia arriba. De seguro hablaremos de un aumento mayor para los contratos en la primera parte de noviembre", concluyó.