Presidente inglés, recompra de acciones y más inversiones, los planes de los nuevos dueños de Edenor
Después de casi seis meses desde que se anunció la operación y una vez recibido el aval del gobierno nacional, los nuevos dueños de Edenor acaban de concretar el desembarco oficial en la principal distribuidora de electricidad de la Argentina.
Es decir, los empresarios y socios para esta transacción, Daniel Vila; José Luis Manzano y Fabricio Filiberti, comenzaron a tomar el control total de la compañía que hasta ahora era propiedad de Pampa Energía.
Así ocurrió durante la jornada de este miércoles 30 de junio, cuando se terminó de cerrar la transferencia de la totalidad de las acciones Clase A, representativas del 51% del capital social y votos de Edenor que estaban en poder del holding controlado por el empresario Marcelo Mindlin, mientras que el resto por ahora seguirá en manos de la Anses y flotando en la bolsa de comercio porteña.
A partir de ahora, dicho capital accionario pasó a formar parte de los activos de la Empresa de Energía del Cono Sur (Edelcos), sociedad de la que además de Vila, Filiberti y Manzano, participan los fondos Andina PLC y Global Income Fund Limited.
De acuerdo a un comunicado enviado por Pampa Energía a la Comisión Nacional de Valores (CNV), con esta transacción "se produce en consecuencia el cambio de control de Edenor".
Esto supone que Pampa Energía terminó de recibir el dinero restante para alcanzar lo pactado por la operación. Es decir, u$s50 millones de los u$s140 millones totales, teniendo en cuenta los anuncios realizado por ambos grupos a fines de diciembre del 2020 cuando firmaron el cambio de dueño de la empresa que tiene tres millones de clientes y un área de concesión que abarca una población de nueve millones de personas y más de 350.000 empresas, del norte de la Ciudad de Buenos Aires y el noroeste del Gran Buenos Aires.
A partir de ahora serán los ejecutivos de Edelcos los que comenzarán a analizar la situación actual de Edenor y el escenario económico y de negocios que deberá enfrentar la compañía.
En principio, los objetivos apuntan al recambio de la cúpula de la compañía, la compra del 49% del capital accionario que no pertenecen a los nuevos dueños y a abrir un proceso de negociaciones sobre un posible nuevo aumento de tarifas para este año.
En el primer caso, un ejecutivo de origen inglés asume como presidente y gerente General de Edenor. Se trata de Neil Blasdeale, quien venía ocupando ese cargo en la distribuidora mendocina de electricidad Edemsa, también parte de los activos controlados por la dupla Vila-Manzano en el negocio energético.
Según información publicada hace unos días por el medio especializado Ecojournal.com, Blasdeale trabaja desde hace 25 años en el grupo Vila-Manzano, ocupando cargos en la operadora de TV por cable Supercanal hasta diciembre del 2008 cuando se mudó a la presidencia de Edemsa.
Gestión y nuevos negocios
Pero no es el único cambio ya que también arriba Esteban Macek, con pasado en Telecom Argentina donde ocupó el cargo de director tras el desembarco en esa empresa del fondo Fintech, del empresario David Matinez.
En el resto del directorio se destaca Edgardo Volosin, quien ya trabajó más de 20 años en la empresa hasta que en el 2015 abandonó sus tareas para sumarse a la gestión de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires como director de Servicios Públicos del gobierno provincial.
Su puesto en Edenor habría sido propuesto por Filiberti ya que actualmente asesora al llamado Rey del Cloro en varios de sus negocios, siempre según Ecojournal.com.
El nuevo directorio se completa con Nicolás Mallo Huergo; Eduardo Marcelo Vila; Federico Zin y Mariano C. Lucero, mientras que como directores suplentes llegan Hugo Quevedo; Mariano Cuneo; Daniel O. Seppacuercia; Diego Hernán Pino; Sebastián Álvarez y María Teresa Grieco.
En el primer comunicado emitido por la flamante conducción de Edenor se sostiene que, teniendo en cuenta los importantes estándares de calidad logrados por la actual gestión de la compañía y con la continuidad de su equipo, "procuraremos seguir mejorando el servicio de energía eléctrica a cada uno de los más de 3,2 millones clientes".
Según el informe, "el invierno y la mayor pandemia que ha sufrido la humanidad en el último siglo han generado un consumo récord de electricidad nunca antes visto para estas épocas. De hecho, el lunes pasado, la empresa alcanzó su pico histórico de demanda con 5.596 MW, superando al anterior del 17 de junio de este año de 5.313 MW".
También se argumenta que los clientes, el servicio y su atención serán la prioridad de la gestión, además de asumir grandes desafíos para que Edenor cumpla un rol activo en la innovación y en promocionar la transición energética, la electrificación de la economía, del transporte y distribución de energías renovables, donde los propios usuarios sean en un momento consumidores y en otro, generadores de energía al sistema.
Otra de las tareas que le esperan al nuevo directorio es la de encarar la refinanciación de una deuda por u$s300 millones que acumula la distribuidora producto de los años de congelamiento de tarifas dispuestos por los gobiernos kirchneristas y de Cambiemos, y la suba de costos que durante esos períodos debió afrontar con una caja cada vez más empobrecida.
De hecho, el market cap actual de Edenor que no supera los u$s156 millones y en su último balance correspondiente al primer trimestre de este año informó pérdidas por $650 millones cuando en el mismo lapso del 2020 había registrado ganancias por $1.030 millones.
La situación de Edenor se vio agravada por los efectos de la pandemia del Covid-19 que hasta ahora le impide encarar un proceso cierto de evaluación de las consecuencias a largo plazo para sus operaciones.
Hasta ahora, las cuentas de la compañía sumarán ingresos provenientes del aumento del 9% en las tarifas autorizado por el Gobierno y que empezó a regir este mes, teniendo en cuenta además que sería el único retoque de todo el año, a pesar de las declaraciones de Daniel Vila sobre la posibilidad de que se aplique una nueva suba antes de fines de diciembre próximo.
Mientras tanto, los ejecutivos también deberán realizar una oferta pública de acciones para quedarse con el 49% del capital restante, en virtud de lo establecido por las normas de la Comisión Nacional de Valores y las normas de la Securities and Exchange Commission (SEC) de los Estados Unidos.
Probablemente, la experiencia de los empresarios en el negocio energético y sus buenas relaciones con el Gobierno serán importantes para concretar esos objetivos.