"Nos caemos a pedazos": shoppings exigen abrir y preparan esta gran movilización en el Abasto
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La situación que transitan los centros comerciales, a partir de la decisión oficial de mantenerlos cerrados por efecto de la proliferación de casos de coronavirus, no deja de ganar dramatismo. Las entidades del sector reconocen que la vacancia volvió a sumar velocidad y preparan una movilización para el jueves en reclamo por una reapertura urgente.
El objetivo de fondo, reconocieron ante la consulta de iProfesional, es blindar la continuidad de al menos 40.000 puestos de trabajo.
La medida se llevará a cabo a partir de las 17 y consistirá en una concentración de vehículos frente a las puertas del shopping del Abasto.
"Están en juego decenas de miles de empleos que dependen directa o indirectamente del funcionamiento de nuestros centros comerciales. Vemos que miles de locales tienen sus puertas abiertas; seguimos sin entender por qué los de nuestros centros comerciales permanecen nuevamente inactivos", expresa un comunicado de la CASC, la cámara que integra a los emprendimientos del rubro, al que accedió este medio en las últimas horas.
"La CASC ha puesto de manifiesto la discriminación de nuestro sector, que ha estado cerrado durante 7 meses en el año pasado. Y que, actualmente, luego de un breve período, nuevamente es impedido de ejercer sus actividades comerciales, pese al cumplimiento estricto de los protocolos presentados y aprobados por las autoridades sanitarias", añade.
Desde la organización anticiparon que la movilización de mañana contará, incluso, con la presencia de representantes del gremio de Empleados de Comercio que encabeza Armando Cavalieri.
El escenario que transitan los centros comerciales, aseguró Mario Nirenberg, gerente general de la cámara, es de auténtico desastre económico. "Nos estamos cayendo a pedazos", dijo a iProfesional.
"Los locatarios y los mismos empleados nos dicen que las empresas no dan más. Hoy tenemos a muchos franquiciados con el problema grave de que compraron productos para la temporada de invierno y no pueden vender. En varios shoppings los inquilinos ya comenzaron a devolver las llaves", añadió.
Para compensar esta vuelta a cero en la actividad comercial, Nirenberg comentó que los shoppings volvieron a aplicar la medida de no cobrar los alquileres mientras continúe el cierre. Sin embargo, el directivo reconoció que decisión no alcanza. Y que el aumento de la vacancia vuelve a ser la tendencia dominante.
"El año pasado pronosticamos un nivel de vacancia, para el pico de la cuarentena, del orden del 25 por ciento. Por fortuna no fue así: anduvimos en el orden del 12 por ciento. Pero, claro, el Gobierno aportada los ATP para cubrir parte de los sueldos. Había otras ayudas. Ahora, sin nada de eso y encima este cierre, consideramos que subimos a un 17 por ciento sólo en este tramo de nueva inactividad", detalló.
Situación de amparo
Nirenberg expresó, que a la par de la movilización, los centros comerciales aguardan por una decisión judicial positiva respecto de las acciones presentadas por el sector hace muy pocos días.
A fines del mes pasado, la CASC elevó un amparo ante el Juzgado Contencioso Administrativo Federal N°6 exigiendo la reanudación de la actividad. El pedido en cuestión se hizo con el respaldo de IRSA y Cencosud, dos de los principales operadores de shoppings de la Argentina.
Asimismo, indicaron también desde la entidad, Recoleta Mall, El Solar y Devoto, son otros de los emprendimientos que elevaron una medida judicial con el mismo pedido. Los centros comerciales proponen una reapertura con limitación horaria y el establecimiento de un aforo para evitar las aglomeraciones.
"Sabemos que el juez está en condiciones de emitir respuesta. Confiamos en que eso ocurrira antes de que concluya esta semana", dijo el entrevistado.
Hasta el más reciente cambio de reglas, los niveles de ventas que venían exhibiendo los shoppings de Capital Federal tras el retorno del año mostraban a la recesión como otro gran enemigo a vencer. El directivo sostuvo que las ventas crecieron 11 por ciento durante febrero –versus igual mes pero del año pasado–, aunque volvieron a caer en el transcurso de marzo.
El segmento de los centros comerciales sufrió, sólo durante el primer año de pandemia, pérdidas por 1.200 millones de pesos en concepto de expensas impagas, lucro cesante y alquileres no cubiertos.