El "sucio secreto" de la empresa Tesla: gana plata pero no con la venta de autos eléctricos
En 2020 el fabricante de automóviles estadounidense Tesla -una de las principales compañías del multimillonario Elon Musk- registró su primer año completo de beneficio neto. Sin embargo, este éxito suyo no proviene de la venta de autos eléctricos, sino se debe a otra fuente de ingresos, que, según el periodista Chris Isidore, representa su "sucio secreto".
En varios estados de EE.UU. están actualmente vigentes programas medioambientales que exigen que todos los fabricantes de automóviles produzcan un determinado porcentaje de vehículos de cero emisiones.
Estas iniciativas otorgan los llamados créditos regulatorios a todas las empresas que operan en respectivo mercado. Si algunos fabricantes no alcanzan cumplir con el requisito, tienen que comprar los créditos regulatorios a otros agentes de mercado para evitar medidas punitivas por parte de las autoridades.
El "secreto" de las ganancias de Tesla
Dado que Tesla solo fabrica vehículos eléctricos, acumula muchos más créditos regulatorios de los que necesita para cumplir con los requisitos reglamentarios mínimos. Por ello vende lo que le sobra a otras empresas para que puedan evitar las sanciones.
Se trata de un negocio muy lucrativo para Tesla. En los últimos cinco años, la empresa de Elon Musk ha ingresado 3.300 millones de dólares vendiendo créditos regulatorios. Casi la mitad de estos recursos, unos 1.600 millones de dólares, los obtuvo en el 2020. Esta cifra supera con creces a sus ingresos netos que rondaron unos 721 millones de dólares, lo que significa que si no hubiese vendido estos productos habría registrado una pérdida neta en el 2020.
"Estos tipos están perdiendo dinero, vendiendo vehículos. Lo están ganando, vendiendo créditos. Y los créditos van a desaparecer", aseguró a CNN Gordon Johnson, analista de la empresa GLJ Research y uno de los mayores bajistas de las acciones de Tesla.
Los principales ejecutivos de Tesla admiten que no podrán vender siempre este producto y esperan que a largo plazo los créditos regulatorios dejen de ser una parte importante de su negocio.
"Es posible que durante un par de trimestres más [esta fuente de ingresos] siga siendo fuerte. También es posible que no lo sea", comunicó el director financiero de Tesla, Zachary Kirkhorn. El flujo de caja libre de la empresa subió un 158% respecto al año anterior, marcando una mejora espectacular en comparación con el 2018, cuando Tesla estaba gastando el efectivo y corría riesgo de quedarse sin dinero. Sus partidarios aseguran que este cambio muestra que Tesla está ganando dinero por fin.
Esa rentabilidad es una de las razones por las que las acciones mostraron una dinámica tan positiva durante más de un año, destacó Isidore en su artículo CNN.
Una "guerra santa"
El debate entre los críticos y los partidarios de la empresa acerca de su rentabilidad se ha traducido en una "guerra santa" en los últimos años, afirmó a la cadena Gene Munster, socio gerente de Loup Ventures. Los críticos se centran demasiado en que la venta de créditos regulatorios por parte de Tesla continúa superando sus ingresos netos, destacó. Sostiene que el margen de beneficio bruto de la automoción es el mejor barómetro del éxito financiero de la empresa.
"Están debatiendo dos cosas diferentes. Nunca llegarán a una resolución. Es el principal indicador. No hay ninguna posibilidad de que GM y VW estén ganando dinero de esa manera con sus vehículos eléctricos", pronosticó Munster.
El fugaz crecimiento del valor de las acciones de Tesla, que subió casi un 700% en 2020, la convierte en una de las empresas estadounidenses más valiosas del mundo. Sin embargo, los 500.000 autos que vendió en 2020 fueron una mínima parte de los más de 70 millones de vehículos ecológicos que se comercializaron en todo el mundo, señala Sputnik.
Hoy en día Tesla se enfrenta a una competencia cada vez mayor en este mercado. Prácticamente todos los fabricantes de automóviles producen sus propios vehículos eléctricos, o planean hacerlo. De hecho, Volkswagen ya ha superado a Tesla en cuanto a la venta de vehículos eléctricos en la mayor parte de Europa. A su vez, General Motors comunicó que espera pasar a producir solo vehículos sin emisiones en 2035.