Quieren que el ahorro en dólares se destine a inversiones en ladrillo
La circulación de los dólares en el mercado doméstico está en el ojo de la tormenta, y el Gobierno, amenazado por la falta de divisas, empezó a trabar, por un lado, todas las opciones de ahorro; y por el otro, la salida de la moneda al exterior, para evitar perder más reservas.
En cuanto a los billetes que se guardan debajo del colchón, desde hace semanas se especula con el recorte a la cantidad de divisas que puede comprar cada cliente en el banco, que tienen un cupo de 200 dólares.
Por el lado de la salida del "billete verde" al exterior, quienes primero recibieron un golpe fueron las empresas importadoras de autos, ya que se decidió, de manera rápida, limitar la cantidad de autos que ingresan al país, a fin de evitar la salida de esta moneda a cambio de ingresar más unidades.
Después de tomar cartas en el asunto en esa industria, así como se analizan de forma detallada otros sectores económicos, ahora el objetivo está centrado en la industria de la construcción, y se intentará crear medidas que permitan canalizar los dólares en este mercado.
Para ello, la Comisión Nacional de Valores (CNV) firmó un convenio de colaboración interinstitucional con los ministerios de Economía y de Desarrollo Productivo para promover el financiamiento de la actividad inmobiliaria a través de instrumentos del mercado de capitales como son los fideicomisos financieros y los fondos comunes de inversión.
El objetivo es movilizar recursos que permitan poner en marcha la actividad productiva, la generación de empleo y las perspectivas de desarrollo federal.
Lo que se busca es convertir estas herramientas en una alternativa atractiva para los ahorristas minoritarios y con varias estructuras de financiamiento, creando vehículos que puedan captar el ahorro local para direccionarlo hacia inversiones con respaldo y que repercutan en la economía y la generación de empleo.
En cuanto a la finalidad de este convenio, hay diferentes beneficios para cada sector.
En el caso del Ministerio de Desarrollo Productivo, se promueve la federalización del comercio, la defensa de la competencia y la creación de empleo; mientras que para Economía, se destaca la política económica, presupuestaria e impositiva, entre otras.
Finalmente, el objetivo mayor de este programa, es promover inversiones en la economía real, destinadas tanto al sector público como al privado, teniendo en cuenta que la industria de la construcción puede tener un rol clave en la reactivación del país con efectos positivos sobre el PBI.
Además del incentivo para que los dólares no se destinen al ahorro, sino que vayan directo a las obras, se coordinarán otras gestiones que tienen que ver con el desarrollo y promoción vehículos financieros y productos de inversión colectiva del mercado de capitales con la finalidad de desarrollar proyectos de alto impacto económico, productivo y social que impulsen el desarrollo de la actividad inmobiliaria en todas sus formas y en todo el ámbito del país.
Un equipo técnico interinstitucional trabajará en el desarrollo de iniciativas de alcance federal vinculadas con la actividad de construcción y desarrollo inmobiliario.