Golpeado por la pandemia, IRSA sale a buscar fondos para refinanciar deuda
Tras haber sido fuertemente golpeada por los efectos económicos de las medidas sanitarias para combatir la pandemia del Covid-19, IRSA Inversiones y Representaciones busca refinanciar parte de su deuda mediante la obtención de fondos frescos en los mercados de capitales.
En este escenario, el holding conducido por Eduardo Elsztain debe hacer frente a importantes vencimientos de su deuda en moneda extranjera por u$s450 millones, incluyendo u$s140 millones de IRSA Propiedades Comerciales (IRCP), entre julio y noviembre de este año.
En mayo pasado, había emitido tres nuevas series de Obligaciones Negociables (ON), una en pesos y dos en dólar linked, lo que le permitió captar de manera conjunta $353.9 millones y otros u$s60 millones, con vencimientos a los nueve meses y dos años respectivamente.
Ahora, acaba de lanzar dos series de nuevas de ON, a ser emitidas en dos clases en el marco de su programa global por u$s600 millones. En este caso, se trata de dos títulos por un valor nominal total en conjunto de u$s15 millones pero que puede ampliarse hasta los u$s300 millones, según la demanda que reciban ambas emisiones.
Dos opciones
Según el prospecto lanzado por el desarrollador inmobiliario más importante de la Argentina, las ON se dividirán en dos opciones. Por un lado, la Clase VI denominada y pagadera en pesos, a tasa de interés variable con margen de corte a licitar, con vencimiento a los 12 meses contados desde la fecha de emisión y liquidación.
Serán por hasta un valor nominal equivalente en moneda local de u$s5 millones, ampliable hasta el monto total máximo, convertidos al tipo de cambio publicado por el Banco Central de la República Argentina mediante la Comunicación "A" 3500 el día hábil previo al período de licitación pública.
Por otro lado, se lanzarán las ON Clase VII, denominadas en dólares pero pagaderas también en pesos, con una tasa de interés fija nominal anual, vencimiento a los 18 meses desde la fecha de emisión y por hasta u$s10 millones.
Ambas ON forman parte del prospecto del programa que IRSA anunció el 7 de julio pasado y del anunciado durante esta jornada del 13 de julio que fueron publicados en el Boletín Diario de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
Los agentes colocadores serán los bancos de Crédito y Securitización; Hipotecario; Galicia; Santander Río; Bapro; HSBC Bank Argentina; Patagonia; Balanz Capital Valores; Puente Hnos; SBS Trading; AR Partners; INTL CIBSA S.A. e Industrial Valores.
El período de difusión pública finalizará el 15 de julio próximo, mientras que la licitación comenzará un día después a las 10:00 horas y finalizará en la misma fecha a las 16:00. En cuanto a las fechas de emisión y liquidación serán el 21 de julio.
IRSA encara la búsqueda de fondos para refinanciar deuda en momentos en los cuales la Argentina también intenta cerrar un acuerdo con los bonistas extranjeros para evitar el default y en el medio de un incierto panorama para el sector corporativo sobre el futuro de sus actividades, en especial las vinculadas a sectores fuertemente afectados por las restricciones sanitarias establecidas por el gobierno del presidente Alberto Fernández.
Riesgos
En el caso del holding dueño de los principales centros comerciales del país y de una gran cantidad de edificios corporativos, calificadoras como S&P vienen advirtiendo sobre los riesgos que podría enfrentar por la exposición a las condiciones económicas del país y a la incertidumbre que sobre sus negocios genera el coronavirus.
A nivel global, IRSA es destacado por su posición competitiva en la industria de bienes raíces; con buen acceso al mercado crediticio local e internacional y con una exposición a la depreciación del peso mitigada por el valor de sus activos en el exterior y por el precio de mercado de las propiedades y los alquileres de oficinas que posee.
Sin embargo, a principios de junio, S&P Global Ratings bajó la calificación de las ON de IRSA Inversiones y Representaciones a ‘raCCC-’ desde ‘raBB-’ y les asignó una tendencia negativa, basado en las consecuencias negativas que sufre el grupo por la recesión económica y las dificultades operativas causadas por el coronavirus, que le agregan una considerable presión a su Ebitda y a la generación de efectivo.
Según un informe de S&P, el desempeño operativo de IRSA se verá deteriorado al menos hasta diciembre de este año y se espera para el mediano plazo tasas de ocupación más bajas que las anteriores a la pandemia en los tres segmentos donde opera: centros comerciales, hoteles y oficinas, presionando aún más la generación de fondos y la liquidez.
Para S&P, que lo pueda hacer depende del acceso al mercado de capitales o a la venta de activos, en un entorno sumamente volátil tanto en Argentina como en el exterior.
"La liquidez de IRSA es débil, porque las fuentes de fondos estimadas no son suficientes para cubrir el uso de esos fondos durante los próximos 12 meses, en un contexto de volatilidad en mercados internacionales y un escenario soberano muy complejo en Argentina, y con una capacidad limitada para absorber eventos de baja probabilidad pero de alto impacto, sin recurrir a financiamiento adicional", detalla el informe de S&P.
El análisis también incorpora la compleja situación macroeconómica de la Argentina con elevada devaluación, altas tasas de interés y vencimientos a corto plazo, para anticipar una nueva baja de la calificación de IRSA en los próximos tres a seis meses "si observamos un mayor deterioro en la generación de flujo de caja o en la liquidez, lo que podría darse si continúan restringiendo el tráfico en los shoppings como consecuencia del Covid-19".
Otro motivo se daría si el riesgo de refinanciación aumentara aún más, y la compañía efectúa un canje de bonos que podría ser considerado una restructuración de facto según la metodología de calificación que utiliza S&P.