Presentan renovado emprendimiento en Villa Rosa Pilar
Lo que hasta hace poco fue un proyecto a la deriva, abandonado por Enrique Blacksley al frente de la empresa Hope Funds, terminó siendo una historia feliz con nombre propio: Blü – Comunidad del Lago.
Desde hace casi tres años, buena parte de los compradores de lotes del emprendimiento Verazul que iba a desarrollar la empresa en Villa Rosa, Pilar, decidieron unirse, no darse por vencidos y tratar de recuperar sus ahorros invertidos en el lugar.
Tanto empeño pusieron, que lograron organizarse en un Consorcio de Cooperación, y con sus aportes voluntarios y un persistente control de gestión permitieron que el Fiduciario no solo recupere el proyecto sino que pudiera llevarlo adelante y arrancar de cero nuevamente. De hecho recién en estos días se definió el nuevo nombre con el que quieren identificarse: Blü – Comunidad del lago. Al barrio se accede por Panamericana Ramal Pilar, saliendo en el Km 50, recientemente reinaugurado, a solo 10 minutos directo por esa misma calle Chubut.
Protegidos por el fideicomiso, se diseñó un nuevo masterplan con un fuerte énfasis en la preservación del medio ambiente, de la fauna y flora local, ya que como afirma Claudia Ferrara, una fundadora del Consorcio de los fiduciantes, "la primera coincidencia entre todos fue la de preservar el espacio agreste y natural que impacta desde las lagunas y las tierras lindantes con el rio Luján". Aquello que había enamorado a los compradores en un principio, se transformó en el eje de todas las decisiones del grupo. El fideicomiso ha conseguido todos los permisos y habilitaciones necesarias para esta etapa preparatoria, ya tienen las tierras y empezaron algunas obras para poder transitar internamente. Sobre el campo de suaves ondulaciones y con dos enormes lagunas, blü aprovecha las privilegiadas vistas y pendientes naturales del lugar, en total integración con el ambiente. Los espacios y flujos internos se diseñaron para maximizar la calidad de vida y el disfrute de los residentes de la comunidad, y su interacción con un entorno de gran belleza naturalPor supuesto no están solos en esta difícil tarea: dispuestos a hacer las cosas bien como primera medida, el fiduciario convocó a prestigiosos profesionales en cada materia. Es el caso de un abogado con una vasta trayectoria en derecho ambiental y de los recursos naturales, Daniel Silva, para que lleve adelante el proyecto; encargó el master plan al estudio Bodas Miani Anger (BMA) y finalmente están en tratativas con una ONG para desarrollar un proyecto de reserva ambiental, en una superficie de 15 has que sería donado al municipio de Pilar.Aspectos ambientales
Desde el primer momento, Daniel Silva supo que había que ser muy claros con respecto a los planteos ambientales del proyecto, aun resignando grandes superficies de tierra. Blü se desarrolla sobre un terreno de más de 200 hectáreas, con suaves ondulaciones, lomadas, quebradas, y vistas a dos lagos que suman 36 hectáreas; esta integrado ambientalmente con una gran reserva natural y ecológica al margen de la extensa costa sobre el Río Luján y no afecta al escurrimiento de aguas en el río y en la zona, y a los humedales del área
Silva, fue Consultor Senior externo sobre temas ambientales y de recursos del Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo, del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Por otro lado es el abogado que representa al pueblo de Magdalena contra la empresa Shell por contaminación con hidrocarburos y al pueblo de Berazategui con la empresa Aguas Argentinas, también por contaminación.El experto ambientalista, designado por el fideicomiso, aclara los principales puntos fuertes ambientales del futuro barrio: incluye la cesión del dominio de 15 hectáreas al Partido de Pilar en toda la margen del rio Luján del proyecto, para integrarlas al futuro Parque Natural ribereño y crear así un corredor de flora y fauna nativa que se integre con el Parque Nacional Ciervo de los Pantanos, ex Reserva Otamendi.
"En los reglamentos de propiedad del emprendimiento nos obligamos a reforestar exclusivamente con especies de fauna nativa en todo el valle de inundación del emprendimiento, ya que cuando se repone la flora nativa, la fauna vuelve sola, recuperando el ecosistema perdido.
El proyecto prohíbe, como lo establece la normativa ambiental, el movimiento de suelos en todo el valle de inundación. De esa manera no se modifican los suelos ni las cotas, manteniendo el régimen hídrico actual del Rio Luján.También se estableció para los propietarios actuales y futuros la obligatoriedad de construcción sobre palafitos, para asegurar la escurrentía natural de las aguas, en toda el área del Valle de Inundación del proyecto, que ocupa unas 100 hectáreas.
Finalmente, Silva explica que el proyecto cuenta con todos los permisos necesarios para esta etapa, como: Estudio de Impacto Ambiental aprobado y actualizado y la prefactibilidad hídrica, de usos del agua y de vuelcos aprobadas. Por otro lado, sostiene que "el proyecto tiene una densidad poblacional 3 veces menor a la permitida según las normas de ordenamiento territorial vigentes" ya que esa fue la voluntad general de los fiduciantes que siempre pensaron en un barrio muy integrado con lo natural y con el menor impacto posible. Si bien aun no se realiza el lanzamiento, se sabe que contará con más de 650 lotes de entre 700 y 5.000 m2; áreas de condominios y townhouses; club house, colegio, área deportiva y club náutico.