Presidente de Cencosud: "A Macri hay que ponerle un monumento"
En medio de la crisis política y económica que se vive en la Argentina tras las elecciones primarias que dejó debilitado al presidente Mauricio Macri que quedó 15 puntos abajo de su principal rival, Alberto Fernández, el fundador y titular del grupo chileno Cencosud, Horst Paulmann, elogió al líder del PRO.
"A Macri hay que ponerle un monumento -dijo- porque él quiso llevar a Argentina hacia una economía abierta de mercado y ojalá que alguien se atreva a hacer lo mismo", destacó el empresario en una entrevista concedida al diario El Mercurio.
"Era muy bueno lo que estaba haciendo Macri, lo mejor que podría haberle pasado a Argentina. Es de esperar que el gobierno actual o próximo sigan por este camino para ir liberando el mercado, porque no puede ser que los televisores que se arman en la Patagonia, donde lo único que hacen es importar la caja, las perillas, embalarlos y ponerles 'Hecho en Argentina', se vendan al doble de precio", agregó.
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Paulmann también mostró su conformidad con el encuentro que mantuvieron los dos principales candidatos a presidentes. "Estoy muy contento de que Macri y el candidato Alberto Fernández hayan tenido un diálogo abierto esta semana, eso es algo muy bueno. No están llevando a la Argentina a una hiperinflación o a un desastre. Dos meses es mucho tiempo y cualquier cosa puede pasar".
El presidente de Cencosud (grupo propietario de Easy y Jumbo) no fue optimista cuando le consultaron si espera que el candidato del Frente de Todos abra la economía: "No creo que Fernández vaya a hacerlo. Es muy dañino cuando hay que pagar un 50% o 100% más caros los bienes comparado con otros lugares del mundo. ¿Por qué los televisores valen más en Argentina que en Chile? Eso es algo que yo no entiendo".
Sin embargo, para equilibrar, también tiró flores hacia el bando peronista: "Se ve que Alberto Fernández es una persona que está preocupada del bienestar de Argentina y de su pueblo, de que vaya creciendo".
Continuidad. Más allá de sus evaluaciones políticas, el empresario dejó en claro que su compañía va a seguir en Argentina, pese a las turbulencias: "Nosotros no fuimos a Argentina a jugar. Cuando vamos a un país nos quedamos ahí. No fuimos a Argentina por diez años, sino por cincuenta. Ya llevamos 39 años y vamos a ir por cincuenta más", indicó.