Un ex Garbarino asume la gerencia general de Aerolíneas Argentinas
Luego de casi ocho meses en los cuales el puesto estuvo vacante, Aerolíneas Argentinas acaba de designar un nuevo gerente general para, de este modo, completarse la estructura organizativa de la compañía aérea de bandera.
El cargo había quedado vacío en agosto del 2108, cuando Abott Reynal, por ese momento dueño del puesto, presentó la renuncia para retornar a la actividad privada.
El ejecutivo había ocupado antes la dirección financiera de Aerolíneas y se había sumado a la gestión pública en marzo de 2016, cuando asumió como secretario de Coordinación Interministerial de la Jefatura de Gabinete.
Venía de tener una exitosa carrera en el sector privado que incluyó 9 años en el banco holandés Rabobank -donde ocupó cargos en Chile y Estados Unidos-, en Boston Consulting Group y Merrill Lynch.
Cuando llegó a Aerolíneas lo hizo en reemplazo de Mario Dell Acqua, quien había asumido en diciembre del 2016 también como presidente hasta julio del año pasado. En ese momento, fue reemplazado por Luis Malvido, en la presidencia, quien tras la salida de Reynal también absorbió la gerencia general.
Ahora, Malvido mantendrá el puesto más alto del esquema de poder de Aerolíneas pero cederá la gerencia general a Nicolás Ovejero, quien se venía desempeñando como director Ejecutivo de Retail de la cadena Garbarino.
Su desembarco en Aerolíneas tiene más que ver con su pasado en el negocio aerocomercial ya que también fue director Comercial de Latam, antes de asumir en Garbarino.
De hecho, se trata de otro ex ejecutivo de la firma chilena que llega a Aerolíneas. El anterior fue Francisco Chiari, quien el año pasado asumió como gerente de Ventas de la firma tras haber pasado por la gerencia General de Latam.