Con Paolo Rocca imputado en la causa de los cuadernos, Techint se expande en Asia

Mientras Paolo Rocca comenzó a preparar su estrategia legal de cara a su indagatoria en octubre ante el juez Claudio Bonadío por la causa de los cuadernos, su holding sigue expandiéndose a nivel mundial en el negocio del acero.

Lo hizo a través de Tenaris, que acaba de cerrar la compra del 47,79% de las acciones de una empresa ubicada en Arabia Saudita por la cual desembolsó u$s144 millones. Se trata de Saudi Steel Pipe Company (SSP), que produce acero soldado, opera tres líneas de producción y atiende segmentos energéticos, industriales y comerciales.

Las instalaciones de SSP están ubicadas en la Provincia Oriental del Reino de Arabia Saudita y tienen una capacidad de fabricación de 360,000 toneladas por año. La compañía comenzó a operar en 1980 y está calificada para suministrar productos a las principales compañías petroleras nacionales de la región.

Según fuentes de Techint, la operación le permite al holding de la familia Rocca complementar las actividades que actualmente desarrolla Tenaris en Arabia Saudita, donde viene prestando servicios a la industria del petróleo y gas de la región desde hace ya varias décadas.

La empresa es además la principal proveedora de Saudi Aramco, la compañía petrolera de esa nación que es considerada como la mayor firma de gas y petróleo del mundo y líder global en la exploración, producción, refinación, distribución y comercialización de hidrocarburos.

De hecho, con la compra de SSP, en el caso de Tenaris expandirá su presencia industrial en esa zona de Asia, aunque la operación todavía debe ser autorizada por la Autoridad del Mercado de Capitales de Arabia Saudita, y se espera que finalice en el primer trimestre de 2019.

El holding desembarcó en Arabia Saudita en el 2010 cuando inauguró la primera planta de su filial Tenaris Saudi Arabis Ltd., ubicada en la segunda ciudad industrial de Dammam, en la provincia oriental de esa nación asiática.

Se trata de una fábrica que tiene capacidad de producir 35,000 toneladas de tubos, en la cual trabajan cerca de 120 personas y que le permitió a los Rocca mejorar las relaciones con sus socios en la región y también incrementar la oferta para Saudi Aramco y otros clientes locales.

Armando la estrategia defensiva

Pero mas allá de este anuncio de expansión, en la actualidad las preocupaciones de Paolo Rocca pasan más por definir que argumentos legales esgrimirá ante Bonadío en próximo 16 de octubre. Ese día deberá presentarse ante el magistrado, quien lo acaba de imputar en la causa del pago de coimas y sobornos a ex funcionarios del gobierno anterior y en la que también están involucrados y procesados otra docena de empresarios locales y ex miembros del gobierno de Cristina Kirchner.

Según consta en la causa, Techint aparece involucrada en el pago de dinero a Claudio Uberti, el ex titular de la embajada paralela que funcionó en Venezuela para hacer negocios con el país que por esos años era presidido por Hugo Chávez por fuera de los canales legales y diplomáticos.

El dinero que acercó Techint en el 2008 a través de dos de sus principales ejecutivos como son Héctor Zabaleta y Luis Betnaza fue para poder lograr que Venezuela pagara la indemnización correspondiente por haber nacionalizado Sidor, una filial del holding de los Rocca que opera en ese país.

Incluso el propio Paolo Rocca admitió públicamente esta maniobra, pero advirtió que su grupo no formó parte del llamado “club de la obra pública” y que fue formado con las empresas integrantes de este entramado ilegal de coimas y sobornos para quedarse con las licitaciones de infraestructura lanzadas por el kirchnerismo.

En la investigación, Bonadío identificó tres líneas de responsabilidades. En la primera ubica a los jefes de la asociación ilícita. Es decir, a Néstor Kirchner y Cristina Kirchner. En la segunda línea se encuentran los organizadores, entre los que figuran Julio De Vido y Roberto Baratta, quienes estuvieron a cargo del Ministerio de Planificación Federal. Y en la tercera, están identificados los integrantes de esta supuesta banda y entre quienes se encuentran los empresarios involucrados.

Si bien no se conoce en detalle la declaración de Uberti sobre Rocca, una de las hipótesis que se baraja en Comodoro Py es que Bonadío termine procesando también al empresario, considerado por la revista norteamericana Forbes como el hombre más rico de la Argentina, con una fortuna calculada en u$s4.600 millones.

De ser así, las especulaciones rondan en torno a la estrategia que adoptará el dueño de Techint. Es decir, si admitirá los pagos adicionales a lo ya probado en el caso de Venezuela, si involucrará a los ex funcionarios kirchneristas, incluyendo a Néstor y Cristina Kirchner. Y si en ese caso, se acogerá a la figura de imputado colaborador o arrepentido para evitar la cárcel, siguiendo los pasos de otros empresarios que adoptaron ese camino legal.