Con amigos así: grandes empresas vuelven a remarcar precios incluso tras la reunión con Macri
Después de unas semanas donde frenaron las entregas de las listas de precios -como consecuencia de la incertidumbre que la corrida cambiaria generó en la economía del país-, las empresas proveedoras de comercios, de grandes cadenas de retail, de híper y supermercados comenzaron a normalizar la situación con anuncios de incrementos que llegan hasta el 10%.
Además, con la advertencia de nuevos aumentos durante esta semana o las próximas.
En especial, las vinculadas con el sector alimenticio, electrodomésticos y de artículos de perfumería y bazar que, según pudo saber iProfesional, están empujando las mayores subas. Algunos casos son los de Molinos Río de la Plata y Arcor que parecen liderar la confección de los nuevos listados.
No fue casual que en el encuentro que el presidente Mauricio Macri mantuvo el jueves pasado con empresarios para informar sobre el acuerdo con el FMI, se encontraran importantes referentes de este sector como Amancio Oneto, CEO de Molinos; Alfredo Coto, dueño de una de las mayores cadenas de supermercados de la Argentina, y Miguel Acevedo quien, además de ser titular de la UIA, es dueño de AGD, una de las fabricantes líderes de aceites de la Argentina.
Los tres fueron parte de la comitiva de 11 ejecutivos y dirigentes empresariales que ese día convocó el Gobierno a la Quinta Presidencial en busca de apoyo corporativo a la solicitud de un préstamo con el organismo financiero internacional y también para pedirles ayuda en la contención del traslado de la devaluación a los costos, precios y valores que manejan a través de sus respectivos negocios.
De hecho, salvo Jaime Campos, titular de AEA, y Gerardo Díaz Beltrán, presidente de la CAME, los otros cinco empresarios son referentes de sectores fuertemente ligados a los vaivenes de la moneda norteamericana como Luis Betnaza, director de Techint; Eduardo Eurnekian, CEO de AA2000; Enrique Cristofani, a cargo del Santander Río; Cristiano Rattazzi, CEO de Fiat, y Martín Migoya, uno de los dueños de Globant.
Tras la reunión, aumentos
Sin embargo, el pedido del jefe de Estado no tuvo mucho eco en cuanto a un esfuerzo para que la evolución del dólar no se sienta en los bolsillos de los consumidores.
Hasta el propio Rattazzi salió a pedir un precio mayor al que cotiza por estos días, mientras que el resto de las terminales automotrices ya iniciaron el proceso de adecuación del valor de sus modelos a la nueva realidad cambiaria la semana pasada.
Las concesionarias ya venden con incrementos de entre el 5% y el 9% en la mayoría de las unidades, y con una reducción de las bonificaciones, ofertas y planes de cuotas que venían ofreciendo para la venta en especial de autos 0 Km.
Ahora se suman empresas proveedoras de las grandes cadenas de hipermercados y retail que avanzan con nuevos aumentos a pesar de que se trata de un sector castigado por la caída del consumo y que no tiene demasiado margen para poder soportar nuevas correcciones en los valores de las góndolas.
Incluso, durante este primer cuatrimestre del año, el sector logró una suba de 0,8% con respecto al mismo período del año pasado, evidenciando una tenue recuperación que los nuevos incrementos pondrán en riesgo.
También causará un achicamiento en la financiación ya que la suba del dólar y de las tasas tendrá fuerte influencia en los costos financieros provocando que los planes de pago se reduzcan drásticamente de las 12 o 24 cuotas a solamente dos y con un interés casi impagable para los consumidores.
Por caso, alimenticias de primer nivel, productores de golosinas y hasta fabricantes e importadores de electrodomésticos, en especial de televisores, que venían liderando la demanda por la cercanía del Mundial de Rusia, están anunciando retoques a sus precios.
En el rubro alimenticio, la compañía de la familia Perez Companc ya les informó a los supermercados sobre nuevas listas con subas del 10% en promedio y que vincula directamente con la presión ejercida por la cotización del dólar en días en los que ya roza los $25.
Se trata del segundo incremento que aplica Molinos en menos de siete días. En el anterior había retocado los valores de los productos que integran la lista oficial de Precios Cuidados y también los de sus aceites, harinas y el resto de artículos que integran sus marcas más baratas.
En ese momento, más que el "dólar doméstico", las subas estuvieron motorizadas por el valor internacional del trigo que aumentó casi un 13% en tan sólo dos semanas producto de la preocupación que existe en Estados Unidos por el futuro de sus cultivos y ante una menor previsión de cosecha en Rusia.
Ahora, la empresa avisó a los dueños de las cadenas de supermercados sobre otra suba en todas sus marcas y no solamente en los derivados del trigo como son las pastas, margarinas, mantecas y galletas, por ejemplo. Es decir, al 10% de la semana pasada le suma otro 7% en promedio para estos días.Números en rojoLa empresa no la viene pasando bien en su performance comercial y financiera. El año pasado registró pérdidas por $187 millones producto una inflación, costos fijos y dólar que subieron más que el precio de sus productos, sumado a la fuerte caída del consumo.
El dato sobre los millones que perdió en 2017 se complementa con un escenario difícil como el actual, que la obliga a atravesar un momento complicado que, como consecuencia de su nula rentabilidad, sufrió la baja en su calificación financiera por parte de Fitch Rating, que le redujo la nota de "AA" a "A+" ante el impacto adverso del menor consumo interno en su último balance.
En su último balance, correspondiente al primer trimestre de este año, Molinos obtuvo una pérdida de $42 millones, lo que implica una caída de $75 millones respecto de igual periodo del año anterior.
Los resultados financieros por su parte, reflejan un deterioro interanual de $292 millones, mayoritariamente producto del efecto negativo de la devaluación sobre la deuda financiera en dólares, en tanto el primer trimestre del año anterior se registró una apreciación cambiaria.
Así, Molinos finalizó el primer trimestre con un resultado neto, inferior en $32 millones al obtenido durante el mismo periodo del año anterior.
Otro caso emblema es el de Arcor que, si bien logró resultados positivos en su balance del año pasado, se viene sustentando por su negocio de commodities más que por los ingresos que genera a partir de la comercialización de sus marcas.
La alimenticia cordobesa ya avisó a los supermercados de una lista nueva con aumentos que en su caso oscilan entre el 7% y el 9% a lo cual le agrega el retiro de bonificaciones por otro 4% en promedio. Pero ocurre que esta suba anunciada se deberá aplicar sobre la lista anterior que aplicó en abril pasado.
Lo hace en momentos en los cuales su máximo ejecutivo, Luis Pagani, dijo públicamente que el Gobierno no tiene plan económico y le pide previsibilidad a la economía local.
Sus palabras no parecen ser ajenas a la fuerte caída de rentabilidad que viene sufriendo Arcor en los últimos siete años en los cuales su margen viene oscilando entre el 0,5% y el 1,2%. De hecho, el año pasado obtuvo ganancias de 0,8% sobre sus ventas contra el 1,2% del 2016.
En este segmento de alimentos, otras empresas fabricantes y comercializadoras de chocolates y golosinas prefirieron congelar sus ventas como los casos de Georgalos, Chocolates Lacassa, Felfort, Ipo, Don Satur y Paulista. Todas suspendieron las entregas a los comercios y supermercados por lo menos por los próximos días y hasta evaluar el impacto de la suba del dólar en sus costos.
El panorama obliga a los supermercadistas a apelar al stock para no dejar sin mercadería a sus establecimientos con lo cual el faltante de productos en góndola se hace relativo, aunque si la situación empeora, en los súper vaticinan que en un plazo de una semana a 10 días se va a notar falta de productos.
En el caso de las lácteas, tanto Mastellone con su marca La Serenísima, y SanCor también informaron a los comercios y supermercados que deberán remarcar sus productos en las góndolas con subas promedio del 7% para las leches, y del 5% al 6% para el resto de los artículos, como las mantecas, por ejemplo.
Incluso las marcas propias que comercializan los supermercados sufrieron variaciones. Un caso es el de Carrefour, que abandonó en mayo la promoción mediante la cual había congelado el valor de los productos con su logo y aplicó subas de entre el 4% y el 7% de acuerdo a la categoría. Se trata de un listado de 1.300 artículos que hasta principios de mes se vendieron a los mismos valores que tenían en agosto del año pasado bajo el slogan de "Precios Corajudos".
En el rubro de artículos de electrónica y bazar, las cadenas reconocen haber recibido nuevos listados de precios e identifican a los televisores en donde se encuentran los retoques más importantes.
Esto se debe, dicen, a que el valor de referencia de los artículos electrónicos importados van a cambiar ya que ingresaron al país a un dólar FOB con un precio mucho menor al actual y por lo tanto habrá una revalorización de esos artículos.
En cuanto a las ofertas, promociones y descuentos que ofrecen las cadenas en la actualidad, habrá algunos productos que no estarán incluidos durante los próximos lanzamientos. Por lo menos, hasta que se termine de discutir el impacto de las nuevas listas de precios y las formas en las cuales se implementarán los aumentos en las góndolas. El escenario se sumará a las subas que se vienen aplicando en el úlitmo año y que no dejan sector sin variaciones.
De hecho, según un estudio de la consultora Focus Market, en el último año hubo artículos que subieron un 70% en sus precios. El rubro alimenticio protagonizó el top 5 de la lista, de acuerdo a los precios exhibidos en abril de 2018.
En primer lugar están las galletas, con una suba interanual del 71,5%. El segundo lugar lo ocupan las gaseosas con un 67% de incremento.
En tanto, la leche y la cerveza también mostraron subas superiores al 50%, con un alza del 54,9% y 51,6%, respectivamente.
Dentro de la misma categoría, los yogures tuvieron un incremento del 43,6%, seguidos por la yerba con un 40,7% y muy cerca se ubicó el aceite con un 40,1%.
Del otro lado del ránking quedaron las pastas frescas y el puré de tomates con un aumento de precios del 26,4%, el dulce de leche con un 26,5% y los alfajores con un 26,6%. Entre los productos para el hogar, el que más sintió el impacto fue el detergente para ropa con un 39% de aumento.