Dolarización indirecta: autos y turismo más caros empujan a invertir en refacciones del hogar
Con las restricciones a la compra de moneda extranjera funcionando a pleno y el encarecimiento que vienen exhibiendo otras alternativas para canalizar el dinero -como los automóviles y el turismo en el exterior- destinar recursos a la refacción del hogar se posicionará en 2014 como una opción muy atractiva y conveniente para miles de argentinos.
Así lo aseguran las distintas fuentes que se desenvuelven en el mercado del ladrillo, que señalan que este rubro incluso tiene chances de mejorar aún más los buenos registros de 2013.
Por lo pronto, todo peso que se invierte en mejorar una vivienda es visto como un "puente" para volcar moneda local en un activo que se revaloriza en forma casi permanente.
En buen romance, es percibida como una suerte de "dolarización indirecta".
Este rubro viene de concluir un buen 2013. A ojos de los profesionales, esta opción de inversión ha contribuido a explicar los buenos números con los que cerró el sector integrado por quienes comercializan materiales.
En efecto, el volumen despachado de productos vinculados con este rubro registró un récord histórico, al alcanzar un crecimiento de 8,7% con respecto al año anterior.
El dato surge del Índice Construya (IC), que mide la evolución de los volúmenes vendidos al sector privado de materiales para la construcción que fabrican las empresas líderes.
El indicador (elaborado por Grupo Construya) contempla la comercialización de ladrillos, cerámicos, cemento portland y cal. También incluye aceros largos, carpintería de aluminio, pisos y revestimientos cerámicos, pinturas, sanitarios y grifería, entre otros.
Según el informe, en el último año "el IC recuperó la caída de 2012 y marcó un nuevo récord histórico, superando en 6,5% el máximo alcanzado en 2011". En diciembre, el avance fue de casi el 11% respecto a igual mes del período previo.
Claro que no toda el alza se debe a refacciones, sino también a nuevas construcciones, pero lo cierto es que ha sido un factor de peso a la hora de justificar el incremento del índice.
"Refaccionar se volvió más atractivo por las restricciones cambiarias. A esto se suma que tanto los autos como los viajes al exterior ahora son más caros. De ahí que se termine volcando más inversión a mejorar los inmuebles", señalaron a iProfesional desde la consultora Abeceb.
Del peso al dólar
Quienes se inclinan a las refacciones encuentran además un financiamiento que les es de gran ayuda en la toma de decisiones: la posibilidad de pagar los materiales en cuotas fijas a varios meses y ganar con el "efecto licuación" (ver aviso).
Esto es, que los pagos mensuales se vayan reduciendo en proporción a la inflación y a los incrementos salariales.
En tanto, quienes tienen billetes verdes sacan buen rédito de esa tenencia.
En ese sentido, un informe de Reporte Inmobiliario afirma que reformar un baño cuesta hoy un 27% menos que hace un año.
En el caso de un ambiente de cocina el costo descendió un 25%. Si la comparación se hace en pesos, la consultora da cuenta de que estos se encarecieron en promedio un 20%.
Precios de referencia
Según Reporte Inmobiliario, para refaccionar:
•Una cocina de unos 5,6 metros cuadrados se requiere de unos $60.000.
•En el caso de un baño (3,75 m2) se precisa de unos $52.000.
En el primer caso, el cálculo comprende los gastos en griferías, cerámicos, muebles y mesas, entre otros elementos, cuyo monto acumulado ronda los $28.000.
A dicho importe hay que sumarle la mano de obra ($8.600) y desembolsos vinculados con la instalación de gas (unos $5.300), el tendido eléctrico ($3.700) y la instalación sanitaria ($8.750, con materiales incluidos), como principales ítems.
El siguiente cuadro presenta la estructura de costos asociada:
En lo referente a la mejora en baños, la inversión parte de $21.000 e incluye a los cerámicos, sanitarios, griferías y mesada a colocar a nuevo.
Además, deben considerarse alrededor de $14.000 relacionados con la instalación de los elementos antes mencionados, mano de obra para la colocación de revestimientos ($10.550), electricidad ($2.900) y pintura ($2.600), entre otros aspectos.
El detalle es el siguiente:
¿Cómo se viene dando la evolución de precios? Desde Reporte Inmobiliario dan cuenta del siguiente cuadro:
La remodelación contribuyó a la mayor venta
Consultado por el mayor protagonismo de las refacciones, José Rozados, CEO de Reporte Inmobiliario, aseguró que "las ampliaciones y las remodelaciones salvaron las ventas de materiales de la construcción durante todo el año pasado".
"Esta alternativa ahora favorece todavía más a los que poseen dólares y quieren volcarlos al mercado del ladrillo. Hay que tener presente que refaccionar un baño cuesta alrededor de u$s5.000 y en 2010 valía el doble", señaló.
"Tras el incremento que sufrieron otras alternativas, destinar capital a la refacción es un mejor opción frente a otras tan comentadas como, por ejemplo, comprar un auto", sostuvo.
Y remarcó que hasta el año pasado adquirir un vehículo de alta gama era conveniente, pero ahora los valores cambiaron y, más allá de eso, se encareció mucho el gasto de mantenimiento", agregó.
Rozados expuso, además, la ventaja que implica poder acceder a materiales de construcción en pesos.
"Todo se paga en moneda nacional y eso después incrementa en dólares el precio del inmueble", remarcó.
Mariano Lamothe, economista de Abeceb, anticipó que las reformas y ampliaciones irán cobrando mayor impulso en 2014 por el encarecimiento de las otras alternativas para direccionar el dinero, como autos y turismo en el exterior.
"Si bien es cierto que el que tiene dólares lo piensa dos veces antes de desprenderse, las veces en que se dio un contexto como éste, las mejoras y ampliaciones siempre evolucionaron con fuerza", aseveró a iProfesional.
"Las refacciones mejoran la cotización de los inmuebles pese a que el valor del metro cuadrado está muy determinado por la zona en la que se ubica. En el último tramo del año pasado fueron las que más movilizaron la construcción", comentó.
Lamothe explicó que "durante los meses finales de 2013 se registró un freno en los proyectos en boca de pozo, porque al escaparse el dólar paralelo se profundizó la incertidumbre, más allá de que la mayoría de los desarrolladores opera en moneda local. Ahí es cuando más se notó cómo fluyó la refacción".
Y añadió: "También se encarecieron opciones como los autos de alta gama o los viajes al exterior. Antes, una viaje fuera del país te salía un 40% menos que hacer a nuevo la cocina. Ahora pasó a convenir la reforma ya que, además, permite incrementar el valor del metro cuadrado".