Cada vez más argentinos deciden vivir solos y la "practicidad" invade las góndolas de los súper
En la actualidad, muchos son los jóvenes argentinos que se animan a dejar el hogar familiar para irse a vivir solos.
Una vez que lo hacen se encuentran con una realidad distinta ya que -a partir de ese momento- deben hacer frente a numerosos gastos tales como el pago de un alquiler, de los servicios de luz, gas, teléfono, las compras del supermercado, los vinculados con el mantenimiento del hogar y otros personales como pueden ser vestimenta, transporte, esparcimiento, por mencionar algunos ejemplos.
A este universo de "hogares unipersonales" también se suman aquellos que salieron de un divorcio o pusieron fin a una etapa de convivencia.
Casos como estos se multiplican día a día y esto es algo que las marcas no dejan pasar por alto, lo cual se puede observar claramente en las góndolas de los súper.
Es que, tal como afirman expertos consultados por iProfesional, estos consumidores suelen tener poco tiempo disponible para destinar a la cocina, además trabajan y no quieren perder horas en el supermercado.
Entonces prefieren ir a lo práctico y compran generalmente productos que se puedan preparar rápido y fácilmente. Muchos optan por los freezados y aptos para microondas aunque esto no siempre significa apuntar a alimentos que sean poco sanos.
Asimismo, se suelen inclinar por paquetes pequeños, de pocas unidades.
En general, esto es así porque no quieren desperdiciar y porque de esta forma pueden graduar sus gastos diarios, como así también por el hecho de que muchos de los que viven solos no disponen de tanto lugar como para almacenar los alimentos que usualmente consumen.
Esta última razón justifica, en gran medida, el motivo por el cual se inclinan habitualmente por realizar sus compras en negocios con "formato de cercanía", tales como los supermercados exprés o los chinos.
Freezado y en formato chico
Atendiendo a las demandas de los hogares unipersonales, cada vez más empresas decidieron ofrecer alimentos que sean fáciles de preparar y que no lleven mucho tiempo de cocción.
Es en este contexto en el que se destacan los productos freezados.
Según Juan Manuel Primbas, Country Manager de Kantar Worldpanel, existe "un evidente incremento en la cantidad de productos congelados y esto que se advierte en los estantes de las góndolas de los súper".
En tanto, el economista Fernando Moiguer remarcó que actualmente existe una tendencia generalizada, que también se advierte a nivel internacional, hacia "elegir los formatos más chicos a la hora de hacer las compras".
"Los argentinos prefieren llevarse todo en escala más pequeña", opinó.
Sin embargo, éste parece ser un mercado que presenta oportunidades de desarrollo para las marcas ante la demanda de este segmento de consumidores.
"En un estudio que realizamos sobre el tema, advertimos que la oferta de este tipo de artículos no crece al mismo ritmo que la demanda", explicó Primbas.
Y añadió que "todavía falta que determinados productos sean pensados para hogares de pocas personas".
En este sentido, el experto mencionó dos ejemplos: el de las bebidas y el de ciertos alimentos.
"En el caso de las gaseosas, suele suceder que los envases más chicos sean mucho más caros" en comparación con los de tipo familiar y destacó que "todavía no hay pastas en tamaño individual".
Por eso, concluyó Primbas, "hoy la oferta de estos productos no está saturada y abre un mundo de posibilidades enorme para las marcas.
Y en esto coincidió Emiliano Schwartz de la consultora especializada en consumo Tomadato: "Todavía hay más de este tipo de artículos para desarrollar".
Para el gusto de argentinos que viven solos
Schwartz explicó que, si bien aún existen demandas por atender -tal como se indicó precedentemente- las empresas han avanzado bastante en este terreno a la hora de tratar de identificar los requerimientos de los hogares unipersonales.
"Las marcas incrementaron sus apuestas por esta línea de productos. De hecho, muchas desarrollaron artículos que son de fácil cocción e, incluso, ampliaron la gama de los existentes de modo de responder a estas necesidades", destacó.
En este sentido, el experto citó como ejemplos:
•Las salsas de distintas variedades (tales como pizza, napolitana o cebolla).
•Las sopas de diferentes gustos.
•La amplia gama de pastas secas que ya vienen con la salsa hecha.
•Los paquetes de arroz que se complementan con distintas opciones como primavera, cuatro quesos y vegetales.
"Lo que se busca son productos más prácticos para cocinar, pero que a su vez se asemejen lo más posible a comidas elaboradas", describió.
Otro ejemplo que proporcionó es el de los rellenos listos para tartas y empanadas que ofrecen algunas marcas y los "puré cheff" con distintas variantes (como vegetales y papas rústicas).
Rápido, pero también sano
Cuando cargan el carrito de compras, quienes viven solos no siempre apuntan a alimentos tales como embutidos o con un gran contenido calórico o grasas trans.
Si bien es posible ver salchichas, hamburguesas, snacks, pastas y pizzas -entre otros- en la mesa de muchos argentinos, esto no es una regla general de cada almuerzo o cena.
Y tal es así que cada vez más marcas "proponen alimentos nutritivos y que sean, a su vez, prácticos para hacer", comentó Schwartz.
En este sentido, Federico Rubinstein Savoury, Director de Unilever Argentina, comentó que si bien es cierto que las personas que viven solas no suelen tener suficiente tiempo para preparar comidas elaboradas, esto "no implica no querer comer buenos platos".
Y agregó: "La nueva tendencia nos llevó a implentar soluciones que sean ricas, nutritivas, prácticas y accesibles para resolver de una manera práctica la comida de todos los días".
Compras exprés
La búsqueda de practicidad no sólo se aplica a qué se come y al tiempo que lleva prepararlo. También apunta a conseguir lo que se quiere lo más rápido y cerca posible, sin largas colas y sólo aquello que se necesita.
Quienes viven solos no suelen pasar horas recorriendo el súper. Van a lo concreto.
Al respecto, Primbas sostuvo que "la llegada del formato de cercanía es consecuencia de que, en los últimos años, subió la cantidad de hogares en los que vive una sola persona".
Es que, aseguró, "las personas que viven solas prefieren, en general, los supermercados exprés".
Y agregó que estos clientes se caracterizan, además, porque "usan en forma intensiva las tarjetas de crédito, son ahorrativos y viven conectados".
"En promedio, estos compradores visitan los puntos de venta cada cuatro días, es decir, tardan un día más que la media en volver al negocio", puntualizó.
Y destacó que si bien son ahorrativos tienden a ser "fieles a las primeras marcas", pero en la medida de sus presupuestos.
Un sello personal
Según los expertos consultados por iProfesional, las personas que viven solas han dejado en estos últimos años "su sello personal" a la hora de las compras, dado que las marcas tuvieron que dar una respuesta a estas necesidades lanzando productos en envases pequeños, ofreciendo variantes, y hasta apostando con una suerte de "accesorios" al artículo principal -como, por ejemplo, las salsas listas que acompañan a los paquetes de arroz-.
E, incluso, tuvieron que "recrearse" y proponer establecimientos de tipo exprés para que sus clientes compren lo que precisan sin perder tiempo.
Todo ello requiere de un profundo análisis de los hábitos de consumo de los muchos argentinos que conforman un hogar unipersonal. Y, para cada estudio, las compañías arriban a distintas conclusiones que las llevan a redefinir sus estrategias.
Sin embargo, tal como puntualizaron los especialistas consultados, existen cuatro patrones que siempre definen sus preferencias y caracterizan lo que buscan quienes integran este segmento. Ellos son: rapidez, practicidad, funcionalidad y calidad.
Con respecto al primer punto, destacaron que hoy en día van ganando lugar en las góndolas los artículos pensados para microondas por sobre los que deben, por ejemplo, cocinarse en el horno convencional.
Aunque también remarcaron que aparecieron opciones interesantes tales como alimentos para cocinar en un wok, algo que hasta hace algunos años no era tan común y que permite comer sano, elegir lo que realmente se quiere ingerir y también combinar los productos insumiendo poco tiempo para su preparación.
Es el caso de las bandejitas con "verduritas" (tipo las que contienen brotes de soja) que pueden acompañarse de pedacitos de pollo (se adquieren por presas, por ejemplo, de pechuga y sin piel).
A la hora de hablar del segundo punto, la practicidad, indudablemente se destacan los productos congelados.
Tal vez lleve unos minutos desfreezarlos -si fuera necesario- pero se los suelen cocinar rápido y sin tener que hacer, prácticamente nada. Es el caso de las papas bastón o noisette que fácilmente se puede colocar en una fuente y llevar al horno con patitas de pollo o milanesas de las que hoy se ofrecen en el mercado con múltiples opciones, entre ellas las que se acompañan con queso y espinaca.
En cuanto a la funcionalidad, los productos "todo en uno" son los que responden en mayor medida a estas demandas. Las pastas con salsas listas o con cubitos de sabor (como cuatro quesos, panceta, albahaca, entre otros) tientan a más de un argentino y, además, tienen la ventaja de que si bien se venden en paquetes, su contenido se puede fraccionar cómodamente.
Por último, la calidad siempre está presente en mayor o menor medida. Según los expertos consultados por este medio, las marcas no cesan en sus esfuerzos de combinar calidad y precio, bajo distintas opciones que hasta pueden dejar conformes a los paladares más exigentes.