"¿Quién se ha robado mi bonus?", se escucha reclamar entre los ejecutivos

Antes de enfrentarse a la "hora de la verdad", los ejecutivos ya se hacen a la idea que los bonus que cobrarán por el desempeño del 2009 estarán por debajo de los del año pasado y, más aún, de los percibidos allá por el 2007.

Quienes ocupan posiciones clave y de toma de decisiones conocen en detalle la situación que atraviesa la compañí­a, ya que mes a mes van monitoreando cómo evoluciona –o no- el negocio. Y estar al tanto de los números sirve, al menos, para irse preparando "psicológicamente" y no imaginar abultadas cifras como premio, que quizá nunca lleguen. Y la antesala de una situación de menos pesos en el bolsillo y alta presión inflacionaria, el mal humor y la desmotivación no tardó en llegar y ya se instaló en todas los niveles de las organizaciones. A lo que se le suma la preocupación por la creciente pérdida de salario real dado que los aumentos de sueldos a lo largo del 2009 no superarán el 15 por ciento.

Incluso, según datos de Total Rewards, un 10% de las firmas locales aun no pagó el bonus del 2008, algo que tendrí­a que haber sucedido entre marzo y abril. Este porcentaje, si bien no es alarmante, era inexistente años atrás. "Esto no es normal. Demuestra que muchas empresas están complicadas", aseveró Juan Carlos Rodrí­guez, socio y director de la consultora.El bonus target versus el real

Las proyecciones a las que accedió iProfesional.com respecto al cumplimiento de los bonus por la performance 2009 (que se pagarán en el 2010) revelan que:

• Un 40% de las compañí­as prevé que serán menores al 2008
• Un 19% que estarán en lí­nea con los del año pasado
• Un 11% que serán mayores
• Un 30% de las firmas consultadas todaví­a no ha tomado una decisión

En definitiva –y en base a las proyecciones de Total Rewards- seis de cada diez empresas no superarán el rendimiento de 2008. Al respecto, Rodrí­guez destacó que "muchas compañí­as ya habí­an revisado sus presupuestos pero así­ y todo no alcanzaron los objetivos o ya prevén que no llegarán a cumplirlos."

Y datos recientes de la consultora HayGroup -basados en un sondeo realizado en septiembre entre 68 empresas de primer nivel- van en la misma lí­nea:

Es que, en concepto de bonus, un ejecutivo percibe una determinada cantidad de sueldos target (que varí­an de acuerdo al cargo que tenga en la organización) siempre y cuando se alcancen las metas fijadas de antemano. Claro que, en un contexto de caí­da de ventas y recesión económica durante el primer semestre, en muchos casos es alto el riego de no cumplirlas.

Con el inicio de la recuperación económica, los ejecutivos argentinos vení­an llegando al target, pero ya por la gestión del 2008 cobraron el 80% y por 2009 cobrarán entre el 60 y el 70%. A los CEO, en tanto, no le toca la mejor parte: ya se olvidaron de la mitad de su bonus (por los malos resultados globales) y sólo les queda pelear por el otro 50 por ciento. A quiénes les toca

Esta práctica está sumamente extendida y se aplica –en la gran mayorí­a de los casos- para el personal fuera de convenio, desde analistas hasta el número uno. De hecho, de acuerdo al relevamiento de HayGroup, el 96% de las firmas consultadas informó poseer una polí­tica de bonus.

Según el sondeo de HayGroup, en el 42% de los casos la práctica se aplica a toda la dotación y en el 58% se otorga en forma selectiva, sólo a un grupo. Tal como se puede ver a continuación, el alcance de la polí­tica varí­a según los niveles jerárquicos:

A su vez, la ponderación del bonus depende de la posición que el ejecutivo ocupe en la organización. Mientras que para los puestos más altos están muy asociados a los resultados del negocio, en el caso de los gerentes están más vinculados al desempeño del área con la que tienen relación directa y para los analistas tienen un fuerte componente de desempeño individual.

El cuento de la "manta corta"

Dado que el bonus es un importante componente de la compensación total -representa alrededor del 20% del paquete- y persistiendo el grave problema del solapamiento salarial en un contexto de inflación de dos dí­gitos, conflictividad gremial y social en aumento, su otorgamiento es otro dilema que enfrentan los números uno de Recursos Humanos.La situación que se vive por estos dí­as se asemeja mucho al cuento de la manta corta: las empresas necesitarí­an un margen de rentabilidad sumamente importante para poder corregir los problemas de solapamiento salarial y abonar el 100% del bonus target sin tener que trasladar a los precios de sus productos y servicios el mayor costo laboral.El segundo semestre, punto de infracción

Sin embargo, el escenario varí­a según el perí­odo en el que se maneje la empresa. Mientras las multinacionales de origen estadounidense el año fiscal transcurre entre julio y junio, para las compañí­as argentinas es de enero a diciembre. Las europeas, en tanto, suelen estar más ajustadas al año fiscal local, que cierra en el último mes del año.

Así­, los ejecutivos que trabajan en compañí­as norteamericanas ya están "anoticiados" del porcentaje de sueldos que cobrarán. Al resto, en enero y con los resultados ya cerrados les llegará la hora de la verdad. Y, más allá del cierre, la gran mayorí­a de las firmas que operan en el paí­s pagan el bonus correspondiente entre febrero y abril del año siguiente.

"Los bonus están muy atados a los resultados de las compañí­as. Hubo un fuerte cambio a partir del segundo semestre. La diferencia fue muy marcada", destacó Oscar Banegas, lí­der de Servicios de Información Salarial de HayGroup.

En diálogo con iProfesional.com, el especialista hizo hincapié en que las empresas más complicadas son las que cerraron el año fiscal a fines del primer semestre, ya que fue bastante malo. Así­, el bonus de los ejecutivos que trabajan en este tipo de compañí­as, no van a ver el impacto positivo de la recuperación que se está dando en esta última parte del año.

"En el segundo semestre, con un repunte que ya se nota en varios sectores de la economí­a, los bonus pueden estar en lí­nea con el target. O sea que para los que tuvieron un mal semestre en la primera parte del año esta última les puede servir para compensar", explicó Banegas. Sectores

Además del tipo de empresa, la situación de los ejecutivos también varí­a de acuerdo al sector. En opinión de Mariano Dantas, director de la consultora de Recursos Humanos homónima, "la crisis ha ocasionado que las compañí­as hayan reducido sus niveles de facturación y ganancias, por lo que los bonus serán más chicos."

No obstante, el consultor aclaró que no todo el mercado o actividades han corrido con la misma suerte y que aquellas que sus niveles de actividad siguieron relativamente bien, quizás con menor crecimiento que años anteriores, están contemplando pagarlos como en años anteriores.

Consultado por este medio, Dantas anticipó que uno de los sectores que estarán más complicados es el de High Tech, ya que el promedio de ajuste de este sector fue el más bajo de todos y el más golpeado por la crisis económica. "Seguirán dentro de los parámetros de otros años, los laboratorios, bancos y las industrias quí­micas. Y los de consumo masivo serán más conservadores", añadió.

De acuerdo con el estudio semestral de compensaciones y beneficios, que por estos dí­as están terminando de procesar en la consultora HuCap, "si bien muchas empresas están previsionando el 100% del bonus target, los criterios y decisión final de pago, se proyectan de manera muy heterogénea."

"Este criterio de heterogeneidad habla de dudas y certezas a la hora de definir lo que ocurrirá. Muchas empresas efectivizarán el pago en los primeros meses del 2010 y resta ver cómo termina de cerrarse el ejercicio, siendo diciembre un mes en el que se juegan y definen los resultados. Es decir, la decisión de abonarlo no sigue necesariamente el mismo carril que el de la previsión contable", enfatizó el director general de HuCap, Miguel Terlizzi.

Y según adelantaron en la consultora a iProfesional.com, al momento de analizar los datos y respuestas se están encontrando con dos situaciones muy diferenciadas:

• Por un lado, empresas afectadas negativamente por la disminución y caí­da de ventas fruto de la desaceleración económica, como ser las del sector de la gastronomí­a, hotelerí­a, turismo, industria automotriz, construcción y comercio exterior, entre otras. Este "grupo" proyecta pagos inferiores al bonus, incluso algunas no tienen decidido si van a pagarlo o no y cuanto abonarán.
• Como contrapartida, están las compañí­as que pudieron sortear el escenario recesivo o incluso se vieron favorecidas por el contexto económico y social. Son aquellas vinculadas a consumo masivo, industria farmacéutica y laboratorios, algunos sectores de logí­stica y comercios. Estas están mejor posicionadas a la hora de poder cumplir con los pagos de los bonos.

No obstante, Terlizzi advirtió: "Aquellos rubros y actividades que les ha ido relativamente bien la duda de pagar el bonus 100% previsionado se da por el hecho de que la estructura de gastos, fruto de la inflación real que caracterizó el actual año, afectó los márgenes de rentabilidad de las empresas."Las empresas, en tiempos de replanteos Desde HayGroup, Banegas destacó que por estos dí­as muchas empresas están revisando sus polí­ticas de bonus, en búsqueda de objetivos más desafiantes para los empleados a lo que habitualmente miden.

"La tendencia es muy marcada. Están privilegiando la retención y por sobre todo la motivación por sobre la atracción ya que ésta última no es tan complicada en un mercado laboral que ha estado en baja y en el que hay más oferta que demanda", concluyó el especialista en materia salarial. Cecilia Novoa© iProfesional.com