Cómo hacer para que tu presencia en la web y en las redes juegue a favor al buscar trabajo

Los días en los que un currículum impecable era la llave para conseguir trabajo quedaron atrás. Hoy, los reclutadores investigan quiénes somos online antes de siquiera pensar en una entrevista. Por lo tanto, es clave decidir estratégicamente la identidad digital, es decir, qué mostramos, cómo lo mostramos y qué historia queremos contar sobre nosotros mismos.

Pero, ¿cómo podemos asegurarnos de que nuestra marca en internet nos abra puertas en lugar de cerrarlas? Para responder estas preguntas, iProfesional conversó con dos expertas: Soledad Depresbitero, experta en Personal Branding, y Mariana D’Ardis, HRBP Manager de Operaciones de Adecco Argentina.

"La identidad digital es la huella que dejamos en el entorno online. No se trata solo de nuestro perfil en redes sociales, sino de todo lo que compartimos, comentamos o incluso lo que otros dicen de nosotros", explica Depresbitero. En otras palabras, es nuestra carta de presentación pública y profesional en el mundo digital. Y, teniendo en cuenta que el 70% de los empleadores buscan talento a través de las redes sociales, según LinkedIn, esta huella puede ser determinante a la hora de buscar empleo.

Cada posteo, cada interacción, cada foto y cada contenido que compartimos forman parte de un mensaje global que damos al mundo. Y si no trabajamos estratégicamente en ello, corremos el riesgo de enviar señales confusas o, peor aún, de pasar desapercibidos.

No obstante, ¿somos conscientes de la identidad que proyectamos en el mundo digital o simplemente vivimos las redes sin estrategia? En muchos casos, la segunda opción es la más común. "La gente comparte de manera espontánea, pero si su objetivo es destacarse en el mercado laboral, necesita construir una identidad digital consciente y estratégica", subraya la especialista.

Construir una marca personal no significa ser un personaje. Se trata de definir un propósito, elegir cómo queremos ser percibidos y asegurarnos de que nuestra presencia digital sea coherente con nuestra realidad profesional. "Estudios indican que quienes desarrollan con éxito su marca personal logran un 30% más de ingresos en comparación con aquellos que no lo hacen", destaca Depresbitero.

Entonces, ¿cómo destacar? Depresbitero comparte una receta: propósito, coherencia y autenticidad. "Debes saber qué querés lograr y cómo querés ser recordado", dice. Luego, asegurate de que lo que publicás coincida con quién sos en la vida real. "La autenticidad genera confianza", enfatiza. Y no olvides tu propuesta de valor única: ¿qué te hace diferente? ¿Es tu tono, tu experiencia o tu enfoque innovador? Sea lo que sea, hay que darlo a conocer.

Pero, agrega, lo visual también importa. "Los colores, las tipografías, las fotos de perfil—todo envía un mensaje". Un logo, un banner personalizado en LinkedIn o incluso un estilo coherente en tus publicaciones pueden hacer que tu perfil sea inolvidable. "Tu identidad visual no solo refuerza quién eres; comunica profesionalismo y compromiso", añade.

Mariana D’Ardis, desde su experiencia en Adecco Argentina, confirma que los reclutadores investigan la identidad digital de los candidatos con frecuencia. "Las redes sociales se utilizan para obtener una visión más completa de los postulantes, explorando aspectos que no se reflejan en el currículum ni en una entrevista", afirma. Y aunque LinkedIn es la plataforma más revisada, Instagram y X (antes Twitter) también son analizadas. "En estas redes se crea la reputación digital personal, mostrando el estilo de vida, los hábitos y los rasgos sociales de los candidatos", explica.

Por eso, D’Ardis advierte que es fundamental revisar qué imagen estamos proyectando. "Los reclutadores no buscan solo habilidades técnicas, sino también valores, intereses y hasta la forma en que una persona se comunica", detalla. Esto significa que una foto poco profesional en LinkedIn, comentarios polémicos en X o incluso una falta de actividad en redes pueden jugar en contra.

Un perfil vacío o sin actividad en LinkedIn es una señal de alerta

El error más común, según la especialista, es descuidar la coherencia entre la imagen digital y el perfil profesional. Muchas veces, se encuentran perfiles con información desactualizada, posteos que contradicen lo que el candidato dice en una entrevista o incluso perfiles privados que impiden ver quién es la persona detrás del currículum. No tener presencia digital también puede generar dudas sobre la experiencia y el compromiso profesional de un candidato. Un perfil vacío o sin actividad en LinkedIn es una señal de alerta para muchos reclutadores. Publicar contenido inadecuado, como expresiones agresivas, comentarios polémicos o fotos que no reflejen profesionalismo, puede jugar en contra.

Del mismo modo, si en LinkedIn se muestra un perfil corporativo, pero en otras redes el contenido contradice esa imagen, puede generar desconfianza. La falta de participación en debates relevantes, publicaciones sobre el área de trabajo o conexiones estratégicas también puede ser vista como falta de interés.

Sobre la posibilidad de que un contenido negativo en redes sociales no profesionales descarte automáticamente a un candidato, D’Ardis aclara que dependerá mucho del contexto y de la situación en particular. "Salvo que sea una proyección muy negativa, no es habitual que se descarte automáticamente, ya que las redes sociales son solamente un insight sobre la persona que luego se profundizará con la entrevista o con mayor conocimiento sobre la persona", explica.

En este escenario, la inteligencia artificial también juega un rol clave. Muchas empresas ya utilizan herramientas basadas en IA para analizar la identidad digital de los postulantes, evaluando patrones de comportamiento, contenido compartido y hasta el tono de sus interacciones en redes sociales. "Los algoritmos pueden identificar inconsistencias en los perfiles o incluso detectar habilidades y rasgos de personalidad a partir de la actividad online", comenta Depresbitero. Sin embargo, también advierte que la inteligencia artificial puede ser también una herramienta aliada para anticipar riesgos, potenciar la visibilidad y consolidar una marca personal fuerte.

Cómo optimizar la identidad digital para el mercado laboral

Para quienes buscan mejorar su presencia digital y destacarse ante los reclutadores, las expertas brindan cuatro recomendaciones clave:

1. Optimizar el perfil de LinkedIn: "Es la red profesional por excelencia y el primer lugar donde un empleador buscará información", afirma Depresbitero. Tener una foto de perfil profesional, un banner alineado con la industria y una biografía clara es fundamental.
2. Publicar contenido de valor: "Compartir artículos, escribir sobre experiencias laborales y comentar en publicaciones del sector genera visibilidad y demuestra interés", explica D’Ardis.
3. Cuidar la privacidad: "Si hay contenido personal en Instagram o Facebook, se recomienda revisar la configuración de privacidad para evitar que impacte en la percepción profesional", advierte Depresbitero.
4. Construir una narrativa consistente: La identidad digital debe reflejar una historia coherente. "Cada post, cada comentario y cada interacción contribuye a la marca personal", enfatiza D’Ardis.

Sí, para conseguir trabajo, hoy la identidad digital es tan importante como la experiencia y la formación. No se trata de fingir ser alguien que no se es, sino de proyectar estratégicamente aquello que realmente define a un profesional. Si en este siglo la primera impresión se da a través de una pantalla, no basta con ser bueno en lo que se hace: hay que saber demostrarlo digitalmente.