Tendencias en Recursos Humanos y Comunicación Interna para 2025
El panorama de Recursos Humanos y Comunicación Interna (CI) está evolucionando a una velocidad vertiginosa, impulsado tanto por avances tecnológicos como por un resurgir de lo humano.
En este contexto, el año 2025 se perfila como un período de transformación significativa. Sí, una vez más nos estamos transformando, pero esta vez apunta a ser grande y para todas las organizaciones.
La integración de la Inteligencia Artificial (IA) y las relaciones humanas convivirán, no como fuerzas opuestas, sino como elementos complementarios que redefinirán la manera en que las organizaciones se comunican y gestionan su capital humano.
Lo humano como lujo: revalorización de lo auténtico
El futuro del trabajo está marcado por un cambio cultural que pone en primer plano lo humano. En un mundo saturado de tecnología, las organizaciones se están dando cuenta de que lo humano se ha convertido en un lujo, un valor agregado que no puede ser reemplazado por máquinas.
En este sentido, la autenticidad, la empatía y la conexión emocional serán claves en la creación de culturas organizacionales exitosas.
Si bien la IA ofrecerá herramientas poderosas para agilizar procesos y mejorar la eficiencia, serán las relaciones humanas las que marcarán la diferencia en la fidelización de los empleados, la creación de equipos de alto rendimiento y los proyectos con ese "no sé qué" humano que la IA -por ahora- no pudo reemplazar.
Según un informe reciente de Gartner, uno de los puntos clave para los líderes de RR.HH. en 2025 es la capacidad de empoderar a los "influenciadores del cambio" dentro de la organización. Este enfoque reconoce que el verdadero cambio transformador viene desde dentro, en colaboración con los empleados, y no desde arriba.
Para esto es fundamental involucrar a las personas en la identificación de áreas críticas para la adopción de nuevas herramientas y enfoques, como la IA. De este modo, los líderes de RR.HH. deberán gestionar el cambio a la vez que lideran el proceso de adaptación humana a la tecnología.
Sin dudas, es momento de investigar y analizar para poder tomar decisiones en función de lo que la tecnología ofrece de nuevo y lo que las personas esperan de las organizaciones.
IA y humanización del trabajo
El péndulo entre la tecnología y lo humano está más presente que nunca. Las empresas ya no buscan solamente integrar asistentes virtuales e IA en sus operaciones. Trabajan también en pos de capacitar a sus equipos para interactuar y colaborar con estas tecnologías.
La capacitación en habilidades digitales, junto con el desarrollo de competencias emocionales, será crucial para lograrlo. Los empleados necesitarán comprender cómo interactuar eficazmente con herramientas automatizadas para optimizar su rendimiento sin perder de vista el valor de los vínculos humanos.
La clave aquí es la colaboración entre humanos y máquinas. Si bien la IA puede encargarse de tareas repetitivas o de gran volumen de datos, será la inteligencia emocional y la creatividad humana lo que permitirá aprovechar al máximo estas herramientas. ¿En qué instancia intervendrán estos factores? Una vez que todos tengan el acceso a la IA y el conocimiento para darle, por ejemplo el prompt correcto, la habilidad diferencial del aporte humano se verá en la capacidad para gestionar el resultado obtenido, sumándole la mayor creatividad, estrategia y emocionalidad.
La siguiente pregunta es cuál será el diferencial humano cuando la IA sea capaz de emular estas aptitudes. Habrá que encontrarlo cuando suceda, y no falta demasiado.
Además, la capacidad de los empleados para adaptarse a estos nuevos entornos de trabajo, donde las máquinas pueden hacer de asistentes pero no de sustitutos, dependerá de una cultura organizacional flexible que favorezca la interacción constante entre lo digital y lo humano.
La importancia de los vínculos
Otro aspecto esencial en la transformación de RR.HH. y CI para 2025 es la manera en que la comunicación interna debe evolucionar. Ya es hasta vintage decir que no basta con informar a los empleados y que es necesario crear vínculos significativos que promuevan la colaboración, el sentido de pertenencia y el compromiso con el equipo, la empresa y el negocio.
La comunicación debe ser simple, accesible y, sobre todo, enfocada en la persona. Los líderes de CI deben ser conscientes de la importancia de construir una comunicación con impacto, que informe pero que también inspire, motive y conecte a las personas en un nivel emocional.
En ese marco, la autenticidad será una de las principales tendencias. Los empleados valorarán la transparencia y la verosimilitud en la comunicación. No bastará con "vender" un mensaje institucional. Debemos saber que será necesario además que las empresas muestren su verdadero rostro, sus valores y su propósito, especialmente en tiempos de cambio o crisis. La capacidad de las organizaciones para mostrar su lado más auténtico será un factor determinante para mantener la lealtad y el compromiso de sus equipos.
Hoy, con inteligencia artificial, es posible que cada empleado reciba información y mensajes adaptados a sus intereses específicos en la empresa. Pero, ¿están las culturas organizacionales listas para este nivel de personalización en el ámbito laboral? Al darle a la organización acceso a cierta información, muchos colaboradores sienten que su privacidad laboral y personal está en juego.
Hay que tener en cuenta ese factor para que la tecnología se vea como una herramienta de mejora y no como una amenaza. ¿Cómo lograrlo? Con una Comunicación Interna transparente y orientadora, que explique el valor de estas herramientas y alivie los miedos.
Liderazgo y transformación desde el Interior
Como señala el informe de Gartner, las organizaciones exitosas no gestionan el cambio de manera unilateral desde la cima de la jerarquía, sino que lo desarrollan de forma colaborativa, integrando a los empleados en el proceso. Este modelo de gestión del cambio dirigido desde dentro de la organización busca crear un cambio sostenible que se asiente sobre un compromiso real y participativo de todos los niveles jerárquicos y no dependa de medidas externas.
Los líderes de RR.HH. deberán entonces tener la habilidad de crear un ambiente de confianza y colaboración que facilite la integración de estas innovaciones, ya que no alcanzará con que sean visionarios en cuanto a la adopción de nuevas tecnologías.
A medida que las organizaciones invierten en IA y otras tecnologías emergentes, será esencial que los equipos trabajen juntos para maximizar los beneficios de estas herramientas, asegurando que el cambio sea efectivo, inclusivo y humano.
Como conclusión, podemos decir que las tendencias en RR.HH. y Comunicación Interna para 2025 apuntan a un equilibrio entre lo digital y lo humano, donde la tecnología, y en particular la Inteligencia Artificial, será una aliada estratégica para mejorar la eficiencia y el rendimiento organizacional. Sin embargo, será la capacidad de las empresas para fomentar la autenticidad, las relaciones genuinas y el sentido de pertenencia, lo que les permitirá crear un entorno de trabajo más colaborativo, inclusivo y sostenible.
Ya hemos atravesado momentos como este: grandes cambios organizacionales que nos hacen frenar la pelota, repensar y barajar de nuevo. La diferencia es que la IA llega con un cambio más profundo que, además de cambiar la manera de hacer CI y de gestionar personas, cambiará también el mundo del trabajo y las industrias, algo similar a lo que generó la aparición de Internet. Lo bueno es que en Argentina estamos bien preparados, porque tenemos una velocidad muy grande para adaptarnos a los cambios y lo hemos demostrado en más de una ocasión.
*Guadalupe Díaz es líder de Consultoría y Agencia de BW Comunicación Interna