SALARIOS

Cómo evolucionó el salario en Latinoamérica en los últimos 10 años

En promedio, la desigualdad salarial, que compara los salarios altos y bajos, disminuyó en muchos países a una tasa promedio de entre 0,5% y 1,7%
MANAGEMENT - 04 de Diciembre, 2024

Un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) reveló que la desigualdad salarial ha disminuido en cerca de dos tercios de todos los países desde 2000. A pesar de esta tendencia positiva, persisten diferencias salariales significativas en todo el mundo.

El Informe mundial sobre salarios 2024-25 señala que desde comienzos de la década del 2000, en promedio, la desigualdad salarial, que compara los salarios de los asalariados altos y bajos, disminuyó en muchos países a una tasa promedio que osciló entre 0,5 y 1,7 por ciento anual, dependiendo de la medida utilizada. Los descensos más significativos se produjeron en los países de renta baja, donde la disminución media anual osciló entre el 3,2% y el 9,6% en las dos últimas décadas.

La desigualdad salarial está disminuyendo a un ritmo más lento en los países más ricos, reduciéndose anualmente entre un 0,3 y un 1,3 por ciento en los países de renta media-alta, y entre un 0,3 y un 0,7 por ciento en los países de renta alta. Además, aunque la desigualdad salarial se redujo en general, los descensos fueron más significativos entre los trabajadores asalariados del extremo superior de la escala salarial.

Persisten las diferencias regionales

La OIT también concluye que los salarios a nivel mundial han crecido más rápidamente que la inflación en los últimos tiempos. En 2023, los salarios reales mundiales crecieron un 1,8%, y las previsiones alcanzan un crecimiento del 2,7% para 2024, el mayor aumento en más de 15 años. Estos resultados positivos suponen una notable recuperación si se comparan con el crecimiento negativo de los salarios, del -0,9%, observado en 2022, un periodo en el que las elevadas tasas de inflación superaron el crecimiento de los salarios nominales.

Sin embargo, según el informe, el crecimiento salarial ha sido desigual entre regiones, y las economías emergentes han experimentado un crecimiento más fuerte que las economías avanzadas. Mientras que las economías avanzadas del G20 registraron un descenso de los salarios reales durante dos años consecutivos (-2,8% en 2022 y -0,5% en 2023), el crecimiento de los salarios reales se mantuvo positivo durante ambos años en las economías emergentes del G20 (1,8% en 2022 y 6,0% en 2023).

Los patrones regionales de crecimiento salarial variaron considerablemente. Según el informe, los trabajadores asalariados de Asia y el Pacífico, Asia Central y Occidental y Europa del Este experimentaron sus aumentos salariales reales a un ritmo más rápido que los de otras partes del mundo. "El retorno al crecimiento de los salarios reales es un avance positivo», dijo el Director General de la OIT, Gilbert F. Houngbo. «Sin embargo, no debemos olvidar que millones de trabajadores y sus familias siguen sufriendo la crisis del coste de la vida que ha erosionado sus niveles de vida, y que las disparidades salariales entre y dentro de los países siguen siendo inaceptablemente elevadas."

A pesar de los recientes avances, los altos niveles de desigualdad salarial siguen siendo un problema acuciante. El informe muestra que, a nivel mundial, el 10% de los trabajadores peor pagados ganan sólo el 0,5% de la masa salarial mundial, mientras que el 10% mejor pagado gana casi el 38% de esta masa salarial. La desigualdad salarial es mayor en los países de renta baja, donde cerca del 22% de los trabajadores asalariados están clasificados como mal pagados.

Las mujeres y los trabajadores asalariados de la economía informal tienen más probabilidades de estar entre los peor pagados. Este hallazgo refuerza la necesidad de acciones específicas para cerrar las brechas salariales y de empleo y garantizar salarios justos para todos los trabajadores asalariados.

La desigualdad salarial es relevante en todos los países y regiones. Sin embargo, a escala mundial, uno de cada tres trabajadores es un trabajador no asalariado. En la mayoría de los países de renta baja y media, la mayoría son trabajadores autónomos, que sólo encuentran oportunidades para ganarse la vida en la economía informal. Por este motivo, el informe amplía su análisis para incluir a los autónomos en el caso de los países de renta baja y media. Como resultado, la desigualdad medida de los ingresos laborales aumenta significativamente en estas regiones, en comparación con la que se mide basándose únicamente en los salarios de los trabajadores asalariados.

"Las estrategias nacionales para reducir las desigualdades requieren el fortalecimiento de las políticas e instituciones salariales", afirmó Giulia De Lazzari, Economista de la OIT y una de las principales autoras del informe. "Pero igualmente importante es diseñar políticas que promuevan la productividad, el trabajo decente y la formalización de la economía informal", añadió.

Te puede interesar

Secciones