Cayó levemente el nivel de burnout entre los argentinos pero aún afecta a 9 de cada 10
El 91% de las personas encuestadas por Bumeran en la Argentina el mes pasado aseguraron estar "quemados" o sentir el agotamiento crónico y excesivo por motivos laborales, conocido como burnout.
Esto quiere decir que el nivel de burnout que perciben quienes participan de las encuestas de la plataforma de empleo decreció en tres puntos porcentuales desde el año pasado, y es la primera vez que retrocede desde el inicio de la encuesta durante la post-pandemia. La cantidad de argentinos que dicen padecer burnout pasó de 81% en 2021 a 86% alaño siguiente, a 94% en 2023 y finalmente 91% este año.
Otro dato significativo es que este año la impresión que reportan los especialistas de Recursos Humanos relevados por Bumeran coincide exáctamente con lo que dijeron los talentos. El 91% de los responsables de ese área respondió que los empleados y empleadas están "quemados" en algún nivel, y eso marca una diferencia cuando en 2023 era solo el 83% el que percibía esa situación.
Argentina, los más altos índices de burnout
En el estudio participaron 5.899 personas trabajadoras y especialistas en recursos humanos de Argentina, Chile, Ecuador, Panamá y Perú. Argentina sigue siendo el que declara los índices más altos de trabajadores quemados, seguido de Chile con 89%, Panamá con 88%, Perú con 82% y Ecuador con 78 por ciento.
Las sensaciones que más declaran haber sentido los trabajadores son falta de energía o cansancio extremo (53%), negativismo o cinismo (38%), falta de efectividad para trabajar (21%) o todas ellas (41%).
El estrés (77%) y la desmotivación laboral (70%) estuvieron a la órden del día. Solo en el 19% de los casos se habló de violencia laboral, y solo el 44% dice estar trabajando más horas de lo que dura la jornada laboral. La gran mayoría trabaja entre 35 y 50 horas a la semana.
Al tratar de encontrar las causas de esta quemazón, los talentos consultados tienen diversas respuestas:
- 22% sobrecarga de trabajo
- 21% el trato de sus superiores
- 19% falta de claridad con respecto a lo que su rol implica
- 13% presión en el trabajo
- 12% falta de identificación con los valores de la organización
- 8% falta de tiempo para llevar a cabo todas las tareas
- 6% sentir que no están a la altura de su rol (síndrome del impostor)
Pero algo que sobresale de los resultados de la encuesta de Bumeran es una causa que no aparece en la lista anterior. Lo que viene involucionando en la Argentina es la posibilidad de organizar la vida laboral y la personal, el mentado "work life balance". Desde 2021 la mitad de los consultados no podia organizar estos requerimientos, pero la cantidad fue bajando hasta que en 2024 repuntó fuerte, al 53% de los participantes. El equilibrio entre estos aspectos de la vida es fundamental para mantener la salud mental.
Así, la Argentina permanece en el nivel medio de la región respecto a esta problemática, con Chile siendo el país en donde menos se puede encontrar el balance (57% no lo logra) y Panamá y Perú los mercados en donde parece haber mejor conciliación (52%). No obstante, ese porcentaje más bajo de Latinoamérica sigue estando muy por encima de los que obtenía la Argentina en años anteriores.
Por otra parte, desde Bumeran apuntaron que el 92% de las mujeres consultadas reporta haber experimentado burnout en el último año mientras que el 89% de los hombres y el 85% de las personas de otras identidades de género también manifiestan padecer este síndrome.
¿Hay alguna relación entre el burnout y la edad? El burnout apareció más frecuentemente en este estudio en el grupo de 26 a 50 años, con un 91%. Los rangos de 18 a 25 años y mayores de 50 registran un 87% en ambos casos.
Qué hacen las empresas sobre el burnout
Los especialistas en Recursos Humanos notan que los talentos están quemados cuando demuestran cansancio y agotamiento constante (68%) o desinterés en el trabajo (49%) o falta de satisfacción en los logros laborales (32%); pero también cuando tratan a los demás de forma insensible o están distantes (22%) o comienzan a faltar asiduamente (20%).
También hay casos en los que las personas mismas les comunican que tienen agotamiento crónico o burnout. Al 56% de los responsables del área se los han dicho en al menos alguna oportunidad.
¿Qué hacen las empresas en esos casos? En el 68% de ellos, no se hace absolutamente nada. El 92% dijo que las compañías no implementan estrategias enfocadas en esta problemática; y son más que el 86% que decía lo mismo el año pasado.
En el 22% las personas de Recursos Humanos pueden ofrecer apoyo emocional. en el 13% se reasignan tareas y responsabilidades, o se facilitan opciones de trabajo flexible (12%) entre otras soluciones.
En aquellas instituciones que sí cuentan con estrategias para reducir o combatir este síndrome, el 50% señala la promoción del equilibrio entre el trabajo y la vida personal; el 42% la supervisión y el apoyo continuo de superiores; el 33% el fomento de la comunicación abierta y la retroalimentación; y otro 33% los programas de bienestar emocional y mental.
Qué pueden hacer las personas contra el burnout
Las estrategias y soluciones para prevenir y combatir el burnout son variadas y está en manos de las personas encontrar aquellas que les resulten más efectivas.
Por caso, el 55% de los participantes de la encuesta de Bumeran dijeron que planean cambiar de trabajo.
Hay, además, algunas cosas que ya pusieron en práctica para tratar de sentirse mejor,como hacer yoga, gimnasia o ejercicio (35%), leer o mirar series (20%) para alejarse de la rutina, y conectar con sus seres queridos (10%). Un 4% desconecta los dispositivos cuando termina su jornada laboral.
Recientemente desde la Asociación Internacional del Coaching (ICF, por sus siglas en inglés), se recomendaron las siguientes 5 estrategias clave para evitar o sobrellevar este agotamiento tan característico:
- Identificar los límites: Aprender a decir "no" y establecer barreras claras entre el trabajo y la vida personal es fundamental. Esto ayuda a prevenir la sobrecarga y a mantener el equilibrio.
- Desconexión tecnológica: La hiperconectividad, aunque no se note, contribuye al agotamiento. Es necesario reducir el uso de dispositivos fuera del horario laboral y dedicar tiempo a actividades recreativas que te permitan recargar energías.
- Planificación y pausas: Organizar las tareas diarias y hacer pausas regulares puede marcar la diferencia. Tenemos que aprender a incorporar descansos cortos en la jornada para mantener el bienestar y la productividad.
- Cuidar el bienestar emocional: Es fundamental tomarse tiempo para actividades que disfrutes, como leer, caminar, ver a un ser querido o simplemente desconectar y respirar aire unos minutos.
- Pedir ayuda: Aceptar que no se puede con todo es el primer paso. Hay que tomar conciencia en que a veces debemos apoyarnos más en los demás y construir una red de contención tanto dentro como fuera del trabajo.
Aseguran, claro está, que el coaching puede ser una herramienta para prevenir el burnout y gestionar el estrés de forma más efectiva. Pero claro que en los casos más severos, cuando los síntomas pasan a ser graves y evidentes, lo ideal es consultar profesionales de la salud y de la salud mental que puedan evaluar el caso. Con las estrategias adecuadas, es posible terminar el año con más energía y bienestar.