El "Método Pomodoro", furor entre empresarios: cómo funciona este sistema para aumentar la productividad
Cada vez más, el Método Pomodoro va ganando popularidad para mejorar la concentración y la productividad. Una herramienta ideal para empezar a usar ahora, con el año avanzando y las vacaciones lejos, dando paso a la rutina del trabajo o el estudio. Con el año por delante, necesitamos ser productivos y eficiente. Sin embargo, estamos inmersos en un mundo de distracciones en el que la gestión del tiempo resulta un desafío clave para el éxito personal y profesional.
El Método Pomodoro se basa en dividir el trabajo en intervalos de 25 minutos, llamados pomodoros, separados por descansos de 5 minutos. Cada 4 intervalos, se realiza una pausa más larga de entre 20 y 30 minutos.
"Este enfoque está respaldado por la neurociencia, ya que nuestros cerebros tienen ciclos naturales de actividad y descanso. Al trabajar en intervalos, aprovechamos estos ritmos para maximizar la productividad y la eficiencia", aclara Claudia Castellanos, Master Coach Ejecutiva y de Salud.
El método, que en definitiva es una técnica de gestión del tiempo, fue desarrollada por el italiano Francesco Cirillo a finales de la década de 1980, cuando era estudiante universitario. La inspiración para el método y que lo consagró como especialista en el campo de la productividad, surgió de su propia necesidad por encontrar una forma efectiva de concentrarse y ser más productivo en sus estudios.
¿Y qué tiene que ver el tomate? Nada, salvo que el temporizador que Cirillo usaba era el de su cocina y tenía forma de pomodoro, es decir, de tomate en italiano.
El objetivo principal del Método Pomodoro es mejorar la concentración y la productividad al dividir el trabajo en períodos manejables y evitar la fatiga mental mediante descansos regulares. Al trabajar en bloques de tiempo definidos, el método colabora en mantener el ritmo y a combatir la procrastinación, ya que la tarea parece más manejable cuando se divide en segmentos más cortos.
Pero además, dice Castellanos, este método, también puede tener beneficios para la salud mental, ya que ayuda a reducir el estrés y la ansiedad.
"El exceso de trabajo sin pausas nos lleva a sentirnos abrumados, confusos, lentos, con más adrenalina y cortisol, lo que afecta negativamente nuestra capacidad para ser productivos. La técnica proporciona momentos regulares de alivio del estrés, lo que mejora nuestro bienestar emocional y sensación de control".
Los descansos cortos entre sesiones de trabajo, agrega la especialista, permiten que el cerebro asimile lo aprendido y fortalezca la memoria a largo plazo. Por lo tanto, la técnica Pomodoro también facilita el aprendizaje y la retención de información a largo plazo.
"En nuestro equipo de trabajo aplicamos Pomodoro especialmente durante la mañana, ya que nuestros ritmos circadianos nos hacen estar más enfocados y llenos de energía en esa etapa de la jornada. Cuidamos especialmente de usar la técnica en períodos muy demandantes", cuenta Castellanos a iProfesional.
Para alcanzar el objetivo, detalla, acordaron respetarse y evitar interrumpirse los unos a otros. "Es increíble, pero lego de cada etapa nos vamos sintiendo más productivos y lejos de estar cansados, nos aumenta la energía al ver avances y tareas finalizadas", dice Castellanos, directora de Latincoaching quien trabaja hace más de 30 años con empresarios, líderes y directivos de negocios.
Muchas personas y empresas están adoptando esta técnica como parte de sus rutinas diarias de trabajo, utilizando aplicaciones y temporizadores como, Pomodoro Focus Timer, Focus Plant o Engross, son solo algunas de las herramientas actualmente operativas para Android e iOs.
Cuatro consejos para aplicar la Técnica Pomodoro
- Eliminá las distracciones: Apagá tu celular, cerrá las pestañas innecesarias del navegador y buscá un lugar tranquilo, ordenado y agradable donde puedas trabajar sin interrupciones.
- Planificá tus tareas: Antes de comenzar, definí qué tareas querés completar y cuánto tiempo le vas a dedicar a cada una. Una manera eficaz es establecer prioridades distinguiendo lo urgente de lo importante. "Algo que también nos funciona es visualizar el tiempo del día como monedas de oro. Eso ayuda estratégicamente a determinar prioridades en función de qué inversión de tiempo nos rendirá más frutos.", agrega Castellanos.
- Sé constante: Es importante ser constante con la técnica y realizar los pomodoros y descansos de forma regular.
- Sé flexible: La técnica es una guía, no una regla rígida. Podés adaptarla a tus necesidades y preferencias.
El Método Pomodoro resulta una herramienta útil para mejorar la concentración y la productividad, ya sea trabajando, estudiando e incluso con las tareas del hogar. Así que si estás buscando una forma de mejorar el rendimiento, configurá ya mismo un temporizador e intentá que tus próximos 25 minutos sean los más eficaces.