1 de Mayo, Día del Trabajador: los logros y las deudas pendientes del empleo en Argentina
El 1 de mayo es el Día Internacional del Trabajador, declarado así por la UNESCO. En la Argentina suele ser una fecha muy importante del movimiento obrero y gremial, y este año no será la excepción.
Una vez más, 1 de mayo se teñirá de color político, en un año electoral al cual el oficialismo llega con una profunda pérdida de poder adquisitivo en los bolsillos de los trabajadores, altos niveles de pobreza y una demostrada incapacidad desde todos los rincones del arco político para frenar el avance de la inflación.
Más allá del apoyo que pueda lograr uno u otro espacio de parte del sector gremial, vale la pena repasar cuál es la situación del empleo en la Argentina en este 1 de mayo.
Empleo en Argentina 2023
Es cierto que un importante logro de la actual administración ha sido reducir a mínimos históricos el desempleo: está en 6,3% en el último trimestre de 2022, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Los puestos de trabajo registrados acumulan una suba del 4,7% en los últimos 12 meses relevados, con más de 13 millones de personas en total.
Aun así, la tendencia de los últimos años es que se generan empleos de menor calidad (monotributistas, independientes, trabajadores de casas particulares, etc.) mientras el empleo registrado en relación de dependencia, reduce su participación total.
De acuerdo a la consultora Labor Capital Growth (LCG), el empleo registrado privado pasó de ser el 56% del total de puestos registrados en 2012 al 48% actual. Los asalariados del sector público crecieron de 23% a 26% en ese período, y los trabajadores independientes del 23% al 27%.
No obstante, vale la pena remarcar que el incremento general del trabajo registrado está motorizado en parte porque cada vez más personas tienen más de un empleo u ocupación, para sumar ingresos en momentos de inflación de tres dígitos.
"Hay más competencia, porque la caída del salario real y la baja productividad, indican que aún el que está ocupado está saliendo más intensamente a buscar un segundo o tercer ingreso, y eso impacta indirectamente en quienes están desempleados," dijo recientemente a este medio el economista y responsable de IDELAS, Daniel Sticco.
La informalidad también ganó terreno, a medida que avanza la crisis económica. El propio INDEC, en su último análisis de generación de ingresos indicó que de los 16,3 millones de potenciales trabajadores en el país, el 33,7% está "en negro", lo cual representa un empeoramiento de 2,1 puntos desde el año pasado.
Donde más rápido avanza la informalidad es en las áreas de servicios comunitarios, servicios sociales de salud, el agro y el servicio doméstico.
Cuánto tiempo demora encontrar trabajo en Argentina
A diferencia de lo que indican los datos oficiales del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, más de un estudio privado sobre el mercado argentino mostró que, tras la salida de las cuarentenas por COVID-19 hay cada vez más personas que demoran un año o más en conseguir trabajo.
La última investigación al respecto, de la multinacional Randstad, mostró que quienes dijeron estar buscando empleo por más de 12 meses en 2022 eran el 18%, y en este año son el 32%; es decir, casi el doble.
A estos estudios se sumó recientemente la consultora Adecco, que encuestó en Argentina a 2.500 personas: el 65% consideró que la situación laboral empeoró en comparación a 2022 (el 7% dijo que está mejor y el 28% igual).
En cuanto a la búsqueda laboral, un 83% opinó que es difícil conseguir un trabajo en Argentina. Ante esta dificultad, un 20% de los encuestados admitió haber mentido en entrevistas laborales, ya sea debido a la necesidad, a los requisitos, al lugar en donde viven, el hecho de tener hijos o la falta de calificación, entre otros.
El 85% de los encuestados por Adecco considera indispensable tener la oportunidad de trabajar de forma remota, en los casos que sea posible. No obstante, los motivos más importantes para permanecer en un trabajo fueron la Remuneración (79%), Ambiente laboral (58%) y Desafíos/Posibilidades de crecimiento (47%). Recién el cuarto puesto lo ocupa la flexibilidad horaria (37%).
Sueldos 2023
Todas las consultoras privadas de remuneraciones y beneficios indican que los salarios perdieron poder de compra en 2022 y lo volverían a hacer en 2023.
En su encuesta de marzo entre más de 400 grandes empresas, Mecer indicó que las subas promedio para empleados fuera de convenio serán del 90,1% este año, cuando ya estiman una inflación superior al 100%.
También WTW ubicó los incrementos promedio en 87%, divididos en cada vez más cantidad de ajustes salariales para hace frente a los desafíos de la inflación.
Pese a este defasaje entre sueldos y precios, "pareciera que no habrá modificaciones importantes en lo que las empresas tienen planificado para el primer semestre. En todo caso los cambios serán en los ajustes que hoy tienen planificados para el segundo semestre", confirmó a este medio la Directora de Work & Rewards de WTW, Macela Angeli.
Por otro lado, en el caso de los agremiados los acuerdos paritarios se cierran por no más de tres meses. El límite del 60% anual que sugería el ministro de Economía, Sergio Massa, se diluyó rápidamente en el horizonte, y hoy los reclamos gremiales arrancan en 80% o 90% anual. Varios cerraron ya por encima de esa suba.
Otro indicador es el Salario Mínimo, Vital y Móvil, que también se está actualizando trimestralmente desde hace tiempo. El último ajuste superó el 26% trimestral para los meses entre abril y junio, cuando llegará a 87.987 pesos.
En la misma línea, analizando el reporte de ingresos del INDEC, LCG advirtió que el ingreso per cápita promedio ponderado se ubicó en los 58.867 pesos mensuales, lo que implicó una caída del 5% real del poder adquisitivo respecto del 4to trimestre de 2021. Sin embargo, también marcan una disparidad: la pérdida fue del 5% real en los 8 deciles de menores ingresos, pero de 4,5% en los dos de mayores ingresos.
Qué se celebra el 1 de Mayo
El 1º de mayo se instituyó como Día Internacional del Trabajador en conmemoración de la sangrienta represión que sufrieran los obreros de la fábrica McCormick, durante varios días de abril y mayo de 1886, en la ciudad de Chicago, Estados Unidos.
Fue por el reclamo de una jornada laboral de 8 horas, cuando en ese momento el día de trabajo podía extenderse hasta 18 horas de corrido. La protesta contó con una adhesión en todo el país de más de cinco mil trabajadores, clamor que finalmente hizo ceder al sector patronal.
Pero, los dueños de McCormick no aceptaron el cambio y sus trabajadores se concentraron en los alrededores de la fábrica en señal de protesta. Para frenar la situación, la empresa recurrió a la policía. El día 1º de mayo la protesta fue acallada a balazos por las fuerzas represoras, que causaron numerosos muertos y heridos.
El 2, el 3 y 4 de mayo los obreros se reunieron en el mismo lugar y en ambas oportunidades volvieron a ser salvajemente atacados, por lo que nuevamente gran cantidad de manifestantes perdieron sus vidas o quedaron gravemente heridos.
El último día estalló una bomba, hecho conocido como el "atentado de Haymarket", que motivó el posterior enjuiciamiento de seis obreros, los "Mártires de Chicago", cuya culpabilidad jamás fue probada. Cuatro de ellos fueron condenados a muerte y los otros dos a trabajos forzados de por vida.
Treinta y tres años después, en 1919, la primera conferencia de la OIT, que acababa de ser constituida, proponía la adopción universal de la jornada de ocho horas y la semana de 48 horas. Tras un largo debate, la moción fue finalmente aprobada.