El desempleo continuó a la baja: cuántos trabajan en la informalidad

El Instituto Nacional de Estadística y Censos, INDEC, dio a conocer el miércoles una nueva baja interanual del desempleo de 0,7 puntos para el último trimestre de 2022. Así, el estudio que abarca a los 31 principales conglomerados urbanos mostró que el 6,3% de esa población está desocupada (unas 900.000 personas).

La consultora Labor, Capital, Gowth (LCG) consideró que al extrapolar al total de la población nacional, ese indicador resultaría en que 1,4 millones de personas están desempleadas. Son 117 mil personas menos que un año antes, y unas 185 mil personas menos que en el trimestre inmediatamente anterior.

"La baja del desempleo se dio aún en un contexto de aumento de la PEA", remarcaron los analistas, "y se explica enteramente por la creación de empleo reflejada en el aumento de la tasa de ocupación." Se crearon unos 677 mil puestos de trabajo en el último año analizado, según LCG.

Esta consultora destaca que los niveles de desempleo están cayendo a valores récord desde los ’90 pero advierten que el desplome de los salarios también le pone un techo a esa tendencia, con más hogares en la búsqueda de complementar sus ingresos por la caída sostenida del poder adquisitivo.

Tasa de empleo y actividad

En tanto que a la vez, de acuerdo al INDEC, creció un punto interanual la tasa de empleo, al 44,6%, y 0,7% la tasa de actividad, al 47,6%.

Esta última es la tasa que mide qué porcentaje de la población económicamente activa (PEA) tiene ocupación, y se presenta con importantes diferencias: es del 70,7% para los varones y solo del 51% entre las mujeres.

Informe del Mercado de Trabajo, INDEC, cuarto trimestre 2022

Asimismo, a nivel geográfico, las regiones que presentaron mayores tasas de actividad fueron Gran Buenos Aires (48,3%), Cuyo (48,3%) y Región Pampeana (48,0%). La que tuvo menor tasa de actividad fue Noreste (43,1%).

Radiografía del desempleo

La tasa de desocupación fue de 6,7% para las mujeres, y de 6% para los varones. Fue también mayor en las regiones Gran Buenos Aires (7%) y Pampeana (6,5%), y menor en el Noreste (3,8%).

Asimismo, en los aglomerados con menos población esa tasa es menor que en los de mayor cantidad de habitantes. Es de solo 4,3% de la PEA en aquellos lugares donde viven menos de 500.000 personas.

De los desocupados, un 71% tiene secundario completo, un 29% tiene estudios superiores (completo o no), y el 6,2% lleva más de un año buscando trabajo.

Menor presión de demanda de empleo

Los ocupados o que tienen al menos una ocupación, eran 13,1 millones de personas en el cuarto trimestre de 2022. De ellos, el 26,4% (unos 3,5 millones) trabajaba de manera independiente o como autónomo, el resto son empleados asalariados.

Informe del Mercado de Trabajo, INDEC, cuarto trimestre 2022

De los 9,6 millones de asalariados, a un 35,5% no se les realiza el descuento jubilatorio. Esto significa que 3,4 millones de personas, más de la tercera parte de los asalariados, trabajan en la informalidad, 2,2% más que un año atrás.

"La informalidad entre los asalariados es hoy parecida a los niveles pre-pandemia: 35,5% en el tercer trimestre de 2022 y 35,8% en el primero de 2020," dijeron desde LCG

A su vez, de las personas que tienen una ocupación, el 57,2% son ocupados plenos que no demandan más horas de trabajo. A eso se suma un 11,6% que está subocupado (trabaja menos de 35 horas semanales y demanda más) y un 28,8% que tiene tareas más de 45 horas a la semana (sobreocupados)

La tasa de subocupación resultó del 10,9% de la PEA, 1,2 puntos menos que hace un año. Y también cayeron dos puntos, a 15,4% los ocupados demandantes.

Todo esto, sumado a la caída de la desocupación, redunda en una menor presión de la demanda de empleo sobre el mercado. En total, la baja fue de 2,3 puntos (de 30,5% en el tercer trimestre de 2021 a 28,2% al año siguiente)

Calidad de empleo

Respecto a los sectores con mayor o menor actividad, el INDEC destacó: "En referencia a las ramas de actividad de la población ocupada, se observa una variación positiva de 1,6 puntos porcentuales (desde el trimestre anterior) en el rubro de enseñanza (7,5% a 9,1%); y una variación negativa de 1,2 puntos porcentuales (19,1% a 17,8%) en el caso de comercio."

La informalidad y los monotributistas informales no son reflejados en las estadísticas

Pero a nivel interanual el organismo marcó una disminución relativa de 3,5% en los empleados en la construcción (de 19,4% a 15,9%) y de 2,7% en el área de servicio doméstico, donde las personas ocupadas pasaron del 13,5% al 10,8%.

"Finalizando el 2022, se puede ver la continuidad de la recuperación de la mano de obra tal como sucedió en 2021. En principio, podría decirse que el empleo privado es de calidad", analizó LCG, pero advirtió: "hay que tener en cuenta que los monotributistas o los independientes informales (proxy de empleos de baja calidad) no son estrictamente relevados por esta estadística."

En el mismo sentido se expresó Matías Ghidini, CEO de la consultora de talento GhidiniRodil, al conocer los resultados: "Hay que entender que estos datos del INDEC reflejan solamente una parte del mercado laboral argentino, que es el formal, un sector que en los últimos años ha perdido protagonismo. Con lo cual, cuando uno lee esta cifra hay que tener en cuenta que se está midiendo solamente una parte del mercado del trabajo, que depende las regiones, puede ser menos relevante."

Para este experto, si bien se genera trabajo, la calidad del mismo viene a la baja por tres motivos:

• el que crece es el empleo público y los monotributistas, cayendo el empleo privado y el autónomo,
• pérdida del salario real, "siendo el 2022 el quinto año consecutivo en la pérdida de valor y probablemente en 2023 también siga perdiendo".
• los jóvenes de 14 a 29 años siguen teniendo una tasa de desocupación que es el doble que el mercado general.

En ese contexto, Ghidini también alerta que la potencial desaceleración de la economía al 2023, con inflación y sexto año consecutivo de pérdida de poder adquisitivo, las perspectivas para el empleo no son las mejores.

"La demanda genuina por empleos privados de calidad se reduce solamente a un pequeño grupo de sectores, donde las compañías están mucho más prudentes, fundamentalmente por la incertidumbre económica local, producto de que la economía está atada a la política," dijo el CEO y cerró: "Esperamos un 2023 con demanda laboral frenada, incluso menor que en 2022, a tono con la incertidumbre general."