Elon Musk, despidos en Twitter y el manual del "buen CEO"
Los despidos masivos en empresas tecnológicas pasaron de ser tan infrecuentes como un unicornio a ser parte de la vida diaria del mercado laboral. Pero lo ocurrido en Twitter desde el ingreso del empresario fundador de SpaceX y Tesla, Elon Musk, como dueño mayoritario de la compañía merece un capítulo aparte.
Como era de esperarse, al ingresar Musk la plana mayor del management recibió un "muchas gracias y hasta luego", junto con brillantes y millonarios paracaídas dorados a los cuales aferrarse. El consejero delegado, Parag Agrawal; el director financiero, Ned Segal; y la máxima responsable de políticas y asuntos legales, Vijaya Gadde, fueron de la partida.
Luego, según reportó el diario norteamericano The Wall Street Journal, se envió un email a todos los empleados de la compañía para asegurarles que el viernes 4 de noviembre a las 17 horas (hora Pacífico) recibirían un correo electrónico aclarándoles su futuro dentro de la empresa. Ese día, por seguridad, las oficinas permanecerían cerradas y el acceso a los sistemas de la compañía estaba restringido.
Las formas impersonales y poco epáticas de la compañía para efectuar el "doloroso proceso" de despidos masivos sorprendieron incluso a los más impersonales. Porque el nuevo management de la empresa del pajarito parece haber olvidado la regla número uno de la época: todo queda registrado en Internet. En ese marco, las formas valen el doble.
Despidos por email
Primero fueron solo rumores de prensa, sobre como Musk y su equipo se alistaban para despedir a 50% de los empleados de Twitter, unas 3.700 personas, para asegurar el futuro financiero de la empresa.Por Twitter (¿por dónde sinó?) Musk aseguraba que los despidos respondían al hecho de que la compañía perdía 4 millones de dólares por día y había que corregir esa sangría.
También se expresó por Twitter su propio fundador y exCEO, Jack Dorsey: "Me doy cuenta de que muchos están enojados conmigo. Tomo la responsabilidad por todos los que están en esta situación: yo hice crecer la compañía demasiado rápido y me disculpo por eso. Estoy agradecido por y amo a todos los que han trabajado en Twitter. No espero que eso sea mutuo en este momento… o en algún momento… y lo entiendo", escribió en inglés.
El jueves, se envió a todos los empleados un email al que tuvo acceso Reuters, diciendo que "en un esfuerzo por situar a Twitter en una senda de buena salud, el viernes pasaremos por el difícil proceso de reducir nuestra plantilla global".
Se avisó que las oficinas estarían cerradas a partir de ese momento y que se deshabilitaban las tarjetas de acceso y el acceso por Internet al sistema de la compañía, para "garantizar la seguridad de cada empleado, así como los sistemas de Twitter y los datos de los clientes".
"Si estás en una oficina o de camino a una oficina, por favor, vuelve a casa", dijo Twitter en su email. Asimismo, algunos de los empleados reportaron que ya los habían sacado también de los grupos de trabajo en Slack, por donde se comunicaron para despedirse.
La supuesta misiva de la red de microblogging que circuló a través de medios de comunicación el jueves decía que todos los empleados recibirían el viernes a las 17hs un email con el asunto "Tu rol en Twitter". La metodología, según aclararon, se debe a la naturaleza distribuida del trabajo en este momento y a tratar de que la noticia llegue a los impactados lo antes posible.
Los que conservarían sus empleos, lo recibirían en sus cuentas de correo laborales. En tanto que los despedidos tendrían el mensaje en sus cuentas personales. "Si no recibís un email personal de twitter-hr@ para las 5 del viernes, por favor comunícate" decía el correo que circuló en medios con una dirección de correo electrónico.
¿Qué dice el manual del CEO?
Más allá de lo previsible de la situación, lo que sorprende de este capítulo de Twitter es lo poco empática de la metodología elegida para efectuar los recortes. Poner en suspenso a toda la compañía por un día y dejar que las personas se enteren por email de su futuro sin siquiera el preaviso legal correspondiente ni tiempo para despedirse.
En muchas tecnológicas se aplicaron previamente "hiring freezes" o congelamiento de las contrataciones, para dejar que la nómina se vaya disminuyendo sola con las salidas voluntarias.
Cuando no hay tiempo para ello, es casi costumbre avisarles a los empleados que tienen en riesgo su posición y darles un par de meses para encontrar otro rol dentro de las búsquedas abiertas que tiene la compañía.
Por eso es que quizás se sintió tan abrupta decisión por parte de Twitter. Daniel Colombo, Máster Coach especializado en alta gerencia y equipos, recordó el episodio de Better.com, la compañía que en pandemia despidió a 900 empleados en una videollamada, "en un mensaje breve y totalmente deshumanizado".
"Ahora, es una empresa de alcance global la que muestra prácticas que no condicen con el cuidado y respeto de la desvinculación de personas", dijo el experto. Para él, en las empresas donde las personas son un valor central, "cada cambio en el vínculo laboral requiere respeto por la integridad de la persona afectada, comunicación absolutamente clara y transparente, y mitigación de daños."
Con esto último Colombo se refiere a proporcionar, en ciertos casos particulares (por ejemplo, de enfermedad, embarazo, etc.), un sistema de asistencia concreto por determinado plazo. "Muchas compañías hacen acuerdos con otras para sugerir que puedan entrevistar a estos talentos desvinculados, e incluso les dan procesos de mentoría o de coaching ejecutivo para ayudarlos", añadió.
Otra recomendación de Colombo que podría estar en el manual del "buen CEO" es diseñar procesos que privilegien lo humano: "Si bien expresaron formalmente que se daría un ‘duro proceso’ (y lo es), lo conveniente también es agradecer, reconocer y poner de relieve cuál ha sido el rol de aporte que tuvo toda la masa de personas a desvincular", ejemplificó sobre Twitter.
"No es lo que dice el manual pero si es lo que hacía falta hacer", reflexionó por su parte el autor y especialista en management Leo Piccioli, en diálogo con iProfesional.
"Creo que van a tomar decisiones individuales equivocadas, porque la única forma de hacer esto es recortar algunas áreas enteras -creo que pueden ser políticas públicas, lobbing, moderación de contenido, tal vez algo de marketing- tomando decisiones en base a los dedos oscilantes de algunos jefes en los que confíen", prosiguió el exCEO de Staples en Argentina.
"Es endeble, está mal. Pero me pongo del otro lado también y el CEO dentro mio dice que los números no cierran y hay que hacerlos cerrar. La empresa pierde plata, paga un montón de intereses. Y es real que no está cumpliendo con las normas de preaviso y tendrá que pagar una multa. Entonces, es injusto, pero es el dueño y tiene que hacerlo", consideró Piccioli.
Las consecuencias
Ya el jueves pasado se presentó una demanda colectiva contra Twitter por parte de sus empleados, que argumentan que la empresa estaba llevando a cabo despidos masivos sin avisar con la antelación requerida de 60 días, en violación de las leyes federales y de California.
La demanda también pide al tribunal federal de San Francisco que emita una orden para restringir a Twitter la posibilidad de solicitar a los empleados despedidos que firmaran documentos sin informarles debidamente.
Para el fin de semana, a través de Twitter y otros foros especializados en talento tech como Blind, ya circulaba la noticia de que se pediría a algunos de los desvinculados que vuelvan. ¿Será que Twitter no puede funcionar con solo el 50% del staff que tenía?
Asimismo, a través de redes sociales, exempleados de la empresa del pajarito que hoy están en otras compañías, se solidarizaban con el personal actual y compartían búsquedas laborales de otras tecnológicas a donde podrían aplicar y ser bien recibidos. Sin dudas, el capital humano del cual se deshaga Musk para ahorrar será más que valorado en empresas competidoras.
Para esas personas que hoy se encuentran buscando trabajo tras un despido tan públicamente debatido, Colombo también tiene un consejo: "Cuidado con los mensajes que vierten en la misma red social, como ‘jamás te pongas la camiseta de una empresa’ y cosas por el estilo. Podés expresar tu dolor, la injusticia y cualquier otra emoción sin olvidar que todo queda impregnado en tu historial laboral."
"Esas definiciones no te ayudarán a encontrar tu siguiente empleo. Te definen; así como las malas prácticas de una nueva gestión, la definen", aconsejó.
Y por último, dijo: "También revisa los contratos que firmaste oportunamente. Y este punto no es menor a la hora de salir a protestar por algo que, con todo viso de realidad, duele e indigna. Sin embargo, revisa lo que has firmado para chequear otros aspectos formales que no sean sólo emocionales."