Alta, media o baja: cómo se dividen las clases sociales en Argentina
Se escucha mucho en estos días hablar en la Argentina de las clases sociales. Se dice que de la mano de la alta inflación y la devaluación progresiva de la moneda de curso nacional, todas las personas en la Argentina son un poco más pobres, y que se achicó la clase media.
¿Pero cuál es hoy la línea de la pobreza? ¿Cuándo se es o no de clase media en la Argentina? ¿Cuántas clases sociales hay?
Las siguientes son algunas de las clasificaciones estadísticas más utilizadas en el país para medir fehacientemente las clases sociales.
Clases sociales: la deficinión de la Ciudad de Buenos Aires
Pocas personas lo saben pero la Ciudad de Buenos Aires tiene "su propio INDEC". Se trata de la Dirección General de Estadística y Censos (DGEyC), que a diferencia del Instituto Nacional de Estadística y Censos, evalúa no solo las condiciones de pobreza sino que también tiene una definición muy técnica de las distintas clases sociales que habitan en la Argentina.
Para entender la manera de definir las clases sociales del gobierno porteño, se debe conocer el Sistema de Canastas de consumo de la Ciudad de Buenos Aires.
El mismo fue diseñado en 2008 por la DGEyC, y lo que hace es medir la capacidad de acceso de los hogares de la Ciudad de Buenos Aires (CABA) para cubrir un conjunto de bienes y servicios compatible con el estándar de vida de la población de la Ciudad.
Desde 2011, las canastas del Sistema se valorizan utilizando los precios de la Ciudad de Buenos Aires y se publican resultados mensualmente. En ello se puede conocer el estado de situación actualizado de las distintas clases sociales.
Pero además, como la Ciudad misma forma parte del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), con el antecedente del Sistema de Canastas de Consumo la DGEyC construyó la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y la Canasta Básica Total (CBT), que definen las líneas de indigencia y de pobreza para una población de referencia de la Región Gran Buenos Aires. Estas líneas también se valorizan a precios de la CABA y se publican resultados mensualmente.
Dichos datos, en combinación con la información sobre ingresos, permiten obtener en forma trimestral, la cantidad y porcentaje (incidencia) de población en situación de indigencia y de pobreza, comparables no solo en el tiempo, sino también con los 24 partidos del Gran Buenos Aires (GBA), con los que la Ciudad conforma un mismo aglomerado.
Es decir, estos datos sirven para conocer los ingresos que necesitan desarrollar las personas que integran las clases sociales de la base de la pirámide en el AMBA.
A partir de estos dos métodos y de la información obtenida sobre los precios, se construye una estratificación de los hogares de la CABA en términos de su capacidad de acceso al consumo de bienes y servicios; es decir, se segmentan las distintas clases sociales del área más densamente poblada del país.
Cuántas son las clases sociales en la Ciudad de Buenos Aires
Como dijimos, el gobierno porteño tiene dos sistemas para medir la relación de la capacidad de consumo de bienes y servicios en la Ciudad de Buenos Aires y el AMBA. A partir de ello, desarrolla una estratificación de las clases sociales en su área de actuación.
Dichos estratos (clases sociales) están definidos de la siguiente manera:
- En situación de indigencia: hogares cuyo ingreso total mensual no alcanza para cubrir la Canasta Básica Alimentaria (CBA - Línea de indigencia).}
- En situación de pobreza no indigente: hogares cuyo ingreso total mensual no alcanza para cubrir la Canasta Básica Total (CBT – Línea de pobreza) pero permite al menos adquirir la CBA.
- No pobres vulnerables: hogares cuyo ingreso total mensual es de al menos la CBT y no alcanza la Canasta Total (CT) del Sistema de Canastas de Consumo.
- Sector medio frágil: hogares cuyo ingreso total mensual es de al menos la CT y no alcanza 1,25 veces la CT del Sistema de Canastas de Consumo.
- Sector medio "clase media": hogares cuyo ingreso total mensual es de al menos 1,25 veces la CT y no alcanza 4 veces la CT del Sistema de Canastas de Consumo.
- Sector acomodado: hogares cuyo ingreso mensual es de 4 veces o más la CT del Sistema de Canastas de Consumo.
Es decir, de acuerdo al sistema que utiliza el gobierno de la Ciudad, las clases sociales no son solamente la baja, la media y la alta. Hay seis clases sociales diferentes según este sistema de clasificación.
En esos seis estratos se clasifica a personas en situación de indigencia, a las que están en situación de pobreza, a la clase media baja (no pobres vulnerables), media y alta, y a la clase alta o "sector acomodado".
Las personas se clasifican según el estrato al que corresponde el hogar, aclara en su metodología el gobierno de la Ciudad.
Por qué dividir en clases sociales
Al explicar para qué sirve este sistema de estratificación de las clases sociales, la DGEyC explica que brinda, por un lado, la posibilidad de identificar a los sectores más desprotegidos de la sociedad en términos de situaciones de indigencia y de pobreza y, por el otro, da cuenta de la heterogeneidad de los sectores no pobres de manera de facilitar un análisis más integral de la situación social de la Ciudad de Buenos Aires y de su evolución en el tiempo.
A partir de estos informes mensuales se conoce y se da a conocer información sobre los valores de ingreso total familiar mínimo y máximo teóricos de cada estrato, correspondientes a un hogar de determiado tipo.
En el caso de la Ciudad, se analizan cinco hogares tipo y sus ingresos para entender la situación de las clases sociales en el AMBA:
- El Hogar 1 está compuesto por una pareja mujer y varón de 35 años de edad, ambos económicamente activos y propietarios de la vivienda, con dos hijos varones de 9 y 6 años de edad.
- El Hogar 2 lo compone una pareja de adultos mayores, mujer y varón, ambos ya económicamente inactivos y propietarios de la vivienda
- El Hogar 3 es el único unipersonal del sistema que utiliza la Ciudad, se conforma de un adulto varón de 25 años, económicamente activo y propietario de la vivienda.
- El Hogar 4 es el de una pareja compuesta por una muje y un varón de 25 años de edad, ambos económicamente activos y propietarios de la vivienda pero sin hijos.
- Y finalmente el Hogar 5 de esta clasificación de la Ciudad es el de una pareja de una mujer y un varón de 25 años de edad, ambos económicamente activos y no propietarios de la vivienda. Es decir, es el único que contempla el gasto de alquiler.
Para cada uno de estos hogares mensualmente se analiza y establece un nivel de ingresos para quienes se encuentran en situación de indigencia, de pobreza, quienes son clase media o acomodada, etc. Así se divide y se analizan las clases sociales y sus ingresos en un momento dado
En la DGEyC saben que esta clasificación en hogares tipo no cubre toda la diversidad de hogares que conforman la Capital Federal o el AMBA, pero consideran que es una estratificación lo suficientemente significativa.
Clases sociales y el INDEC
Como mencionamos, el Instituto Nacional de Estadística y Censos -el organismo oficial de estadística a nivel nacional en la Argentina- no mide las clases sociales en sí. Lo que registra es una canasta alimentaria y una canasta básica de bienes y servicios que son las que determinan las líneas de indigencia y pobreza, respectivamente.
El INDEC tiene además una clasificación en deciles de la población de acuerdo a sus ingresos, pero no la vincula necesariamente con una definición de clases sociales.
Lo que si muestra esa clasificación es una profunda brecha de género en esos ingresos, ya que los deciles más pobres son los que incluyen mayor porcentaje de mujeres, mientras que en los de mayor poder adquisitivo hay históricamente una mayoria de hombres.
Pobreza e indigencia
Decíamos que el INDEC desarrolla la medición de la pobreza y la indigencia; es decir, de aquellas líneas que marcan de acuerdo a los ingresos si una persona pertenece o no a las clases sociales en la base de la pirámide.
Esto se mide mensualmente a través de la Encuesta Permanente de Hogares o EPH, uno de los instrumentos estadísticos más desarrollados en el organismo oficial.
La mencionada encuesta mide el porcentaje de hogares de los 31 principales aglomerados urbanos a lo largo y ancho del país que superan o quedan por debajo de la línea de pobreza, y en ese mismo grupo, cuáles no superan la línea de indigencia.
Los primeros son los que pueden pagar con sus ingresos la canasta alimentaria pero no la canasta total, los segundos los que no pueden costear con sus ingresos ni siquiera los alimentos básicos para mantener una alimentación con los nutrientes necesarios.
En los últimos análisis del INDEC y al cierre de este artículo, los hogares debajo de la línea de pobreza en la Argentina eran alrededor de un tercio de los incluídos en la muestra, y albergaban al 40% de la población aproximadamente. En la indigencia se encontraba alrededor de un 8% de los hogares y más del 10% de la población.
Esos son quienes integran en la Argentina las clases en la base de la pirámide.
Ingresos
Otro de los estudios del INDEC que puede ofrecer algún indicio respecto de las clases sociales es el de distribución de los ingresos de la población, que también se realiza en base a los datos obtenidos en la Encuesta Permanente de Hogares.
En ese estudio se determina cuál es el ingreso medio de la población argentina, también un promedio del ingreso del estrato bajo, el estrato medio y el estrato alto (es decir, de cada una de las clases sociales más ampliamente conocidas).
Se realiza además una división de la población en diez deciles de acuerdo a sus ingresos, y se identifica qué porcentaje de la población está en los deciles de más altos ingresos, en los de ingresos medios y en los de menos ingresos. Esto es otro dato que se puede poner en la balanza a la hora de hablar de clases sociales en la Argentina.
Clases sociales para la Cepal
La Comisión Económica para América Latina (Cepal) también se interesa por las clases sociales en la región.
Para la Cepal, en tanto, las clases sociales de ingresos medios son definidos como aquellos cuyos ingresos per capita varían entre 1,8 veces y 10 veces la línea de pobreza en un país en un momento determinado. Y por otra parte, quienes en ese país perciben ingresos mayores a esa cifra, serían considerados ya parte de la clase alta de esa población.
Dicho esto, vale la pena destacar que la Cepal no realiza un estudio de ingresos sino que lo que releva es la sensación que tienen las personas sobre su clase de pertenencia.
Por caso, en el último informe que entregó el organismo multinacional al respecto se notó que, si bien durante años el porcentaje más alto de población que se reconocía dentro de ese la clase media correspondió a la Argentina, esa identificación fue en baja.
Ese porcentaje pasó del 86% en 2011 a 73,9% en 2018. Y hoy hay números más altos en la región en Chile, Costa Rica, Ecuador y Uruguay. Así y todo, de acuerdo al análisis de Cepal, en la comparación regional, la Argentina sigue siendo uno de los países menos desiguales de la región.