Carreras "difíciles y aburridas" pero estratégicas: cuáles recibirán becas e incentivos con la nueva ley
El Senado de la Nación aprobó por unanimidad días atrás un proyecto para fomentar el estudio de carreras universitarias estratégicas, que son aquellas que el país considera prioritarias para el desarrollo de su economía.
Estas áreas de estudio son las que se suelen tener en cuenta también en la asignación de becas, en la conformación de políticas públicas y educativas, en el desarrollo de programas y currículas en universidades, etc.
La Argentina contaba ya con una nómina de los programas considerados fundamentales, que aplicaba sobre todo para el programa de becas Progresar, pero que algunos consideran que había quedado en el tiempo.
El proyecto de Ley presentado por la senadora por el Frente de Todos, Silvina García Larraburu, busca crear una nueva lista de carreras universitarias prioritarias, mediante una propuesta plural y apartidaria, que considere las necesidades actuales y futuras de la economía argentina en lugar de quedarse con aquellas que fueron definidas varios años atrás.
"Realizamos un trabajo plural y federal que posibilitó llegar a un texto colectivo", dijo la senadora tras la aprobación del proyecto en la Cámara Alta del Congreso. Se refería a que para este proyecto se realizaron 12 sesiones, siete de ellas bajo formato virtual, 81 reuniones de Comisiones y la presencia de 13 Ministros más el Jefe de Gabinete.
"La planificación de políticas públicas educativas es una de las herramientas fundamentales que posibilita el desarrollo integral, sustentable e inclusivo de nuestra sociedad. En ese sentido, la normativa que hoy sancionamos tiene el objetivo de fomentar las carreras profesionales que requiere el país", sentenció. "La idea de este proyecto es federalizar la educación y la matriz productiva en base a la inserción de las carreras universitarias", añadió.
Además, la autora del proyecto detalló que "la presente iniciativa busca destinar una parte relevante del sistema de becas del ministerio de Educación a la promoción de carreras estratégicas, de manera que puedan determinarse actualizaciones de la nómina de estas carreras, interacción de los profesionales de las mismas con los estudiantes y también crear un registro para tomar razón de las becas que se ofrecen".
Carreras universitarias prioritarias: ¿qué dice el proyecto?
El verdadero cambio que introduce este proyecto de ley no es solo la actualización del listado de carreras consideradas estratégicas, sino la creación de un mecanismo para que el mismo se renueve periódicamente cada dos años.
Esto permitiría introducir nuevas disciplinas que puedan cobrar relevancia para el país o para el mercado laboral, eliminar aquellas que queden desactualizadas o en las que haya ya suficiente oferta de talentos.
Consultada por iProfesional al respecto, la legisladora autora del proyecto afirmó: "La actualización periódica permitirá que el sistema de becas responda a las dinámicas propias del sector científico, como a la demanda de técnicos y profesionales específicos de las 24 jurisdicciones del país. Ni la ciencia, ni las necesidades de nuestras provincias son estáticas. Por lo tanto, las carreras que consideramos estratégicas tampoco pueden serlo".
Si bien de la conformación del nuevo listado de carreras estratégicas tendrán parte distintas áreas del Gobierno y especialistas en educación, García Larraburu tiene su opinión personal acerca de cuáles son las áreas en las que se vuelve más necesaria la actualización de la nómina. "Creo que se debe seguir impulsando la matrícula de las ingenierías, haciendo énfasis en informática. Como sostuvo (el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto) Salvarezza en su exposición en la Comisión de Ciencia del Senado, necesitamos desarrolladores nacionales que puedan innovar y competir en uno de los rubros que más valor agregado genera y en dónde actualmente la incidencia transnacional es preponderante", le dijo la legisladora a este medio.
Y consideró que se deben potenciar también áreas como la biotecnología, la nanotecnología, la farmacia, la robótica, y también las licenciaturas en ciencias e ingenierías ambientales. "La generación de conocimiento local que se ponga al servicio de un crecimiento con inclusión social, son elementales a fin de salvar la dependencia extranjera", apuntó.
De la elaboración de esta nueva clasificación participarán los distintos Consejos Nacionales y Provinciales de Educación y de Ciencia y Tecnología, en conjunto con diferentes Ministerios Nacionales, y los Presidentes y Vicepresidentes de las Comisiones de Educación y Cultura de ambas Cámaras del Congreso.
Y al igual que ocurre con la actual nómina de carreras estratégicas, la nueva clasificación que creará la Ley que se debatirá pronto en Diputados, también tendrá un carácter federal, atendiendo a las necesidades específicas de cada región.
"Los Consejos están integrados por los Ministros de Educación de todas las provincias y las Universidades Nacionales. En este sentido, la iniciativa convoca al conjunto de la comunidad educativa a participar. Por otra parte, el criterio de federalización contempla que las carreras necesarias y estratégicas en una región pueden ser distintas en otra, por lo cual la nómina contemplará la heterogeneidad presente en el país", dijo al respecto García Larraburu a este medio.
Otra novedad que introduce el proyecto es la creación de un "Registro Nacional de Becas de Educación Superior" que se ofrecen en universidades e institutos universitarios para las carreras que resulten seleccionadas, así como la correspondiente asignación de presupuesto para promocionar las mismas.
Se busca de esta manera estimular el ingreso de estudiantes que cursen el último año de la educación secundaria en cualquier de las carreras prioritarias.
Además de la realización de talleres vocacionales el proyecto de ley plantea promover las páginas web de las universidades incluidas en la oferta de carreras universitarias estratégicas y desarrollar campañas de comunicación audiovisuales y gráficas, con "contenidos que destaquen la importancia de las labores de los profesionales de las carreras consideradas estratégicas para el desarrollo económico y productivo del país".
Cuáles son hoy las carreras universitarias estratégicas en la Argentina
La Argentina tiene actualmente un mapa de carreras universitarias y terciarias que son prioritarias para el desarrollo del país.
La idea surgió luego de la crisis económica y social del 2001, cuando se comenzó a hablar acerca de que había profesiones con muchísimos estudiantes, más de los que podía absorber el mercado, mientras que en otras que eran menos atractivas para los jóvenes por ser consideradas "difíciles" o "aburridas" no se generaba la suficiente cantidad de graduados para satisfacer la demanda de talentos que las industrias necesitaban para recuperarse y avanzar.
También era necesario desarrollar carreras vinculadas, por ejemplo, a la energía, a la biotecnología, etc. que no tenían suficiente representación en las instituciones educativas.
Si bien el Estado había tenido siempre mecanismos para promover que los estudiantes pudieran completar carreras universitarias, como las Becas Sarmiento, por ejemplo, se comenzó a pensar en iniciativas que promovieran el estudio de las que resultaban menos atractivas para los jóvenes pero que ya se presentaban como estratégicas para el país.
Esa idea tuvo un punto cúlmine en enero de 2014 con el lanzamiento del programa de Becas Progresar, durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner. El mismo fue implementado por la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) y continúa siéndolo hasta el día de hoy, siempre con el mismo objetivo de colaborar con la inclusión laboral de los jóvenes mediante ayudas financieras para terminar sus estudios.
Quienes necesitan las asistencias para realizar estudios en áreas consideradas estratégicas, reciben montos mayores al obtener una Beca Progresar, y tienen prioridad en el proceso de selección de los beneficiarios.
Sin embargo, la autora del proyecto de Ley asegura que esta nueva nómina es absolutamente independiente de las Becas Progresar. "Aquel programa fomenta la continuidad en los estudios sin distinción de carreras. Con la Ley de Carreras Estratégicas se creará la nómina de las mismas y se darán a conocer las becas específicas que ofrecen las diferentes universidades y organismos a fin de promover su ingreso entre los estudiantes", afirmó.
García Larraburu le aclaró a iProfesional que el actual mapa de carreras que resultan estratégicas para el programa Progresar no se verá modificado por esta Ley. "El Consejo que se crea por esta norma, ampliará los programas de becas sumando carreras estratégicas para el desarrollo productivo del país y la nómina estará a cargo del Consejo Asesor constituido cada dos años a tal fin", detalló.
Es decir, el mapa de carreras consideradas estratégicas en el marco del programa Progresar seguirá vigente, y los beneficiarios no dependerán de los cambios que cada dos años se realicen en la nómina creada por la nueva Ley (en caso de que termine de aprobarse) para seguir renovando sus becas.
Las carreras que se definieron como estratégicas hace años fueron en principio las de Ciencias Básicas, Ciencias Aplicadas y Enfermería.
El hecho de que sean o no estratégicas para el programa Progresar varía de provincia en provincia, de acuerdo a las necesidades del mercado y de desarrollo de cada una de ellas. Por ejemplo, mientras en el norte del país priman las de Agronomía e Ingeniería, en el Sur se fomenta el estudio de carreras técnicas, Higiene y Seguridad en el trabajo, Seguridad Vial, y Recursos Naturales Renovables.
En donde abunda la oferta académica es en la Provincia de Buenos Aires, con 334 carreras universitarias consideradas estratégicas (más que el doble de la oferta de Santa Fe o Córdoba) y las mismas son en campos tan variados como la Vigilancia y Control Aéreo, Seguridad del trabajo en Buques y Ámbito Portuario, Manejo Ambiental del Territorio, Diseño de Marcas y Envases, Mantenimiento Industrial del Sector Automotriz, Urbanismo y Ecología Urbana, etc.
También para distintas zonas del país se consideran clave los estudios quizás menos conocidos por los jóvenes y con menores tasas de egreso de profesionales, como la Geología o la Geoinformática, la Matemática aplicada, la Explotación de Minas, la Floricultura, la Agrimensura o la Aeronáutica, entre otras.
Guardaparque, agrimensor o meteorólogo son profesiones de gran demanda para las necesidades del país, por más que no se encuentren ampliamente difundidas entre los jóvenes como opción de estudio profesional.
Y sobre todo luego de la pandemia las ciencias médicas, la enfermería, la bioquímica clínica o la bacteriología cobraron mayor relevancia.