Crudo diagnóstico sobre la rentabilidad de los sectores que trabajan en cuarentena
En un informe dado a conocer esta semana, en base a datos de la AFIP, el gobierno nacional mostró la cruda realidad económica que viven los sectores de la economía exceptuados de la cuarentena.
En base a los datos de la AFIP, uno de los anexos que sustentan la Decisión Administrativa 663/2020 publicada el domingo en el Boletín Oficial, se estima cuánto cayó la actividad de cada una de estas áreas durante la cuarentena.
La mencionada normativa sirvió para extender a más empresas, así como a trabajadores independientes, la posibilidad de solicitar créditos bancarios a tasa cero, con garantía del Estado.
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El mencionado reporte del Comité de Evaluación y Monitoreo del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) reconoce que "incluso en algunas actividades exceptuadas de la cuarentena muchas empresas registraron caídas en la facturación (por ejemplo, en el caso de ventas de combustibles, en donde muchas estaciones de servicio han sufrido la caída de la demanda debido a la intensa caída en la circulación de autos). Lo mismo ha ocurrido en muchas empresas de firmas con alto potencial de teletrabajo, como pueden ser los servicios profesionales".
El reporte consigna que hay algunas actividades en donde la facturación promedio se ha mantenido o incluso ha subido (como el comercio en supermercados o la producción de medicamentos), mientras que en otras hubo un "drástico desplome", como es el caso de los hoteles y restaurantes o en servicios ligados al esparcimiento, "ambos con caídas interanuales nominales mayores al 50%".
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Los analistas se basan en datos de la AFIP del período comprendido entre el 12 de marzo y el 12 de abril de 2020, y el mismo lapso en 2019.
"Esta profunda contracción también está teniendo impacto en ramas que, a priori, habían sido consideradas como relativamente poco afectadas (por estar exceptuadas de la cuarentena, o por tener un alto potencial para el teletrabajo). Sin embargo, los primeros datos de facturación sectorial recogidos por AFIP permiten ver que existe un porcentaje significativo de empresas de dichas ramas que, si bien están en condiciones operativas de producir, han disminuido su actividad como consecuencia de una retracción de la demanda", se lee en el análisis.
El organismo dependiente de la cartera que dirige Matías Kulfas ejemplifica diciendo que en el período relevado, la facturación promedio de servicios jurídicos cayó 10,8% nominal interanual, y que el 25% de las firmas del sector de peor desempeño la caída de la facturación fue superior al 87,5%.
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Menciona particularmente a la construcción (incluso vinculada a la obra pública), las profesiones liberales (como servicios notariales y jurídicos), la informática (como el procesamiento de datos), la comunicación, la seguridad y limpieza o al comercio de alimentos y bebidas (kioscos).
A su vez, producto de la heterogeneidad subyacente en el tejido productivo argentino, los datos permiten corroborar que al interior de cada rama hay desempeños muy disímiles entre las firmas -como por ejemplo en el rubro golosinas- los cuales parecen obedecer mucho más a distintos perfiles de la demanda que pueden tener firmas de un mismo rubro.
"Dentro del comercio mayorista de golosinas puede haber firmas cuyo funcionamiento siguió siendo dentro de todo normal (por ejemplo, por tener como principales clientes a los supermercados), pero hay otras en donde la facturación se desplomó por tener como principales clientes a los kioscos -cuya actividad, si bien exceptuada, se ha visto fuertemente resentida por el menor movimiento en las calles-", explicaron.
"Muchas empresas de este tipo de ramas experimentaron caídas notorias en su facturación. Todo ello incrementa las probabilidades de que las firmas cierren y, con ello, que los trabajadores formales pierdan sus puestos de trabajo. Con el objetivo de preservar el empleo de calidad se recomienda ampliar el listado de sectores potencialmente beneficiarios del ATP", concluyen.