Cuatro de cada 10 argentinos se irían si tuvieran una oportunidad laboral en el exterior
"¿La única salida es Ezeiza?" se preguntan hoy muchos argentinos jóvenes que no encuentran en el contexto de crisis económica en la Argentina, una perspectiva que les permita mantener el optimismo sobre su futuro.
La experiencia indica, tras la "fuga de cerebros" ocurrida luego del estallido económico y social de Diciembre de 2001, que muchos podrían tener en la cabeza buscar un mejor pasar en otro destino. Y sin embargo, no es necesariamente así.
"Diría que son dos crisis incomparables en este sentido, ya que el desarrollo de la economía digital 'acercó' el mundo y redujo las distancias de 'lo foráneo'", dijo a iProfesional Gonzalo Peña, de la firma de investigación de mercado, Oh! Panel.
"Hoy es más sencillo que ayer radicarse en el extranjero, especialmente para los Millenials", opinó el consultor, y por otra parte recordó que "en 2001 se evidenciaba un claro hartazgo con la clase política que, en cambio, hoy no se registra. Actualmente existe una polarización, pero el voto anti-sistema es prácticamente inexistente. Y eso marca una diferencia cualitativa muy clara", sentenció.
Lejos entonces del escenario de hace casi dos décadas, de acuerdo al Monitoreo de Opinión Pública de mayo de esta consultora, un 81% de los 1.000 argentinos que contestaron su encuesta no se encuentran activamente buscando oportunidades laborales que impliquen radicarse en el exterior.
El 19% que si lo está haciendo es solo dos puntos por encima de la medición de diciembre, la primera ocasión en la que Oh! Panel incluyó esta consulta en su medición regular.
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El objetivo de la consultora es medir semestralmente este "pulso" sobre el interés en emigrar, debido a que es un tipo de decisión que no se toma de forma rápida ni compulsiva.
No obstante, al ser consultados sobre si se irían del país en el caso de tener una oportunidad laboral concreta en el exterior, un 39% optaría por hacerlo (un 21% lo haría definitivamente y un 18% probablemente).
En tanto que un 36% optaría por quedarse incluso si tuvieran una oferta en el extranjero, y 24% indicaron que seguramente rechazarían esa posibilidad de trabajo.
Tanto en diciembre de 2018 como en mayo de este año, un 25% de los consultados por Oh! Panel dijeron no saber exactamente cómo reaccionarían ante esta oportunidad. Pero la cantidad de los que partirían en caso de tener trabajo asegurado en otro país cayó del 42% al 39% entre ambas mediciones.
"Hoy radicarse en el exterior no es una opción sencilla. Más allá de la crisis local se percibe que el mundo no está transitando por un momento de 'esplendor' laboral, con excepción del mercado norteamericano. Pero en lo relativo a Europa y América Latina, las expectativas de conseguir un mejor futuro laboral son hoy reservadas", explicó Gonzalo Peña a iProfesional.
Por otra parte, el experto prefirió realizar un análisis por generaciones de profesionales y trabajadores: "Hoy al X y al Baby Boomer les cuesta mucho más pensar en radicarse en el extranjero. El Millenial, en cambio, lo evalúa con mayor factibilidad en tanto y en cuanto lo económico se sume a la posibilidad de acceder a un entorno laboral que les ofrezca un equilibro entre vida laboral y personal".
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De hecho, si se analizan los datos de estas dos mediciones, lo que ocurrió fue una polarización hacia los extremos. Lo que cambió en los últimos seis meses es que son más los que están seguros de que se irían a vivir a otro país si tuvieran una chance (del 17% en diciembre al 21% en mayo) y también los que afirman que rechazarían esa posibilidad para quedarse en la Argentina (de 20% en diciembre a 24% en mayo).
Peña asegura que esa polarización es coyuntural: "Las diferencias son estacionales, más que significativas en lo estadístico. Es decir, queda claro que existen dos segmentos claramente diferenciados en torno al 20% cada uno: los que se irían con una chance y los que de ninguna manera (o bajo ningún contexto) lo harían".
Seguridad y progreso
La próxima consulta de Oh Panel! sobre esta temática será en diciembre, después de las elecciones presidenciales en las que probablemente se definirá el modelo económico del país para los próximos cuatro años.
Esto tendrá un impacto definitivo en las decisiones de migración. De hecho, el 20% de quienes respondieron a la encuesta de Oh! Panel en diciembre indicaron que un cambio de Gobierno sería uno de los factores que colaborarían en la decisión de no irse a vivir a otro país.
No obstante, lo que más pedían entonces los consultados (un 23% de ellos) fue una reducción de la inseguridad, y un 18% se inclinó por una baja en la inflación. En ese marco, Peña reflexionó que la incertidumbre es la variable clave que motoriza las opiniones de los argentinos en torno a este tema.
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"Más allá de quien resulte electo en 2019, lo que motoriza la decisión de migrar es la falta de certidumbre sobre el mediano plazo. Sobre cómo serán las reglas de juego en lo económico, esencialmente, en la Argentina. Y hoy, en la campaña electoral, eso está en disputa y acrecienta la incertidumbre", apuntó.
No obstante, al ser consultados por los motivos reales que los impulsan a buscar otro lugar donde radicarse, las razones económicas superaron a las políticas y sociales.
Más de la mitad (54%) indicó que se iría a vivir al extranjero a un destino con mayor estabilidad económica; y un 41% mencionó también que quiere residir en un país con mayores posibilidades de progreso económico.
Además, el 44% de los consultados mostró que quisiera estar en una nación donde las personas estén más tranquilas, sin angustia ni nerviosismo. Y solo 41% mencionó que buscaría para vivir un lugar más seguro.
En mayo no se realizaron estas consultas, pero las prioridades y preocupaciones de los argentinos siguen más o menos en el mismo orden y están encabezadas por variables económicas.
Las principales preocupaciones fueron la inflación (86%), pobreza (67%), desempleo (66%), estado de la educación (56%) y la inseguridad (55%), indicó Oh! Panel.
Por otra parte, al analizar cómo se siente la sociedad, la consultora aseguró que en mayo se profundizó la negatividad.
•56% está desesperanzado
•61% está triste
•62% se encuentra enojado
•61% está harto y escéptico
Peña indicó que los análisis de Oh Panel! muestran que a partir de Semana Santa, con el anuncio del plan "alivio" o precios esenciales, hubo una caída en la imagen e intención de voto al oficialismo. Tampoco se terminó de consolidar en la opinión pública la "ancha avenida del medio", que permitiría aliviar en parte la polarización.
"Dicha situación genera un stress social por la incertidumbre que mencionaba anteriormente, en el contexto de una economía que no despega y, aún peor, no evidencia señales claras de cuándo lo hará", sentenció.