Tercer ajuste anual y aguinaldo adelantado: las empresas tratan de atenuar la pérdida salarial
Hacia el final del primer semestre del año, la incertidumbre con la que las empresas debieron cerrar sus presupuestos salariales se comenzó a disipar.
Para bien o para mal, las dudas sobre el potencial impacto inflacionario en el bolsillo de los trabajadores y la influencia de las paritarias en los sueldos fuera de convenio, se fueron despejando con las primeras definiciones en la materia.
Aun así, nada está escrito en piedra y las empresas vienen revisando sus números cada vez más frecuentemente para ofrecer una propuesta más competitiva. Aunque con el mercado deprimido y el consumo aún en retracción, los titulares de Recursos Humanos se encuentran con poco margen para maniobrar y buscar mayores aumentos.
Por caso, los últimos datos que maneja el área de payroll de BDO Argentina, muestran que durante el primer trimestre las firmas de varios sectores hicieron esfuerzos para otorgar algún tipo de cifra que permitiera recuperar el poder adquisitivo perdido en 2018. "Eso llevó el promedio de incrementos para ese año a 38% anual", según dijo a este medio Alejandra Fernández, socia de Outsourcing & Payroll en BDO en Argentina.
"Y muchas compañías fueron adelantando porcentaje de bonos a cobrar a principios de 2019 para que el empleado no vea tan perjudicado su poder adquisitivo", añadió.
Respecto a 2019, de acuerdo a los últimos datos disponibles, el 76% de las firmas encuestadas por la consultora de talento Adecco informó que ya ha otorgado incrementos salariales a sus empleados fuera de convenio colectivo. El promedio de ajuste para este grupo en lo que va del año está en el orden del 27% al 31% anual, dependiendo de la industria analizada.
En la misma línea, la última encuesta de Beneficios y Compensaciones de HuCap postuló un incremento anual del 31,8% para el año, 2,3% más arriba de lo que se proyectaba en febrero para todo 2019. Pero aclararon que el porcentaje para el segundo semestre se encuentra "supeditado" al avance de la inflación, a nuevas negociaciones que puedan surgir de los gremios, a las cláusulas de revisión y a la realidad de cada rubro y empresa.
En tanto, las casi 350 grandes empresas consultadas por Willis Towers Watson (WTW) confirmaron que darán en promedio 34% de aumento a los no convencionados en 2019. Más de la mitad seguirá haciéndolo bajo un esquema de dos ajustes, pero un 30% se inclina por hacerlo en tres, y más del 12% ya definieron cuatro o más.
Un 32% de las firmas participantes de esta encuesta realizada durante la primera semana de junio, ya modificaron el presupuesto, mientras que el 68% espera la aprobación de la casa matriz para hacerlo. "Del 32% que ya tiene la autorización, los ajustes anuales para el personal fuera de convenio serían de entre 32% y 40%, siendo el promedio de 36,6%. En el caso del 68% que está negociando si se lo aprueban el promedio sería del 37,5 por ciento", dijo a iProfesional Marcela Angeli, directora del Área de Gestión del Talento y Compensaciones de WTW.
Y un dato no menor es que ese cambio está fundamentado, entre otros factores, al cambio en el cálculo de inflación: los presupuestos se habían cerrado con proyecciones de 33,6% y ahora esperan que supere el 37 por ciento.
Por su parte, la consultora Mercer detectó un promedio algo más alto en la estrategia de remuneración a los no sindicalizados: la mediana fue del 34,5%. La cifra fue un 4,5% superior respecto a la última medición de la consultora de febrero 2019, en el que la mediana de mercado para incrementos salariales era 30% anual.
"Esto demuestra que las empresas han revisado sus incrementos salariales para 2019 entre febrero y mayo. El contexto económico vigente en el país ha provocado que la mayoría de las compañías tengan que modificar periódicamente los porcentajes de incrementos salariales, aumentando su periodicidad y frecuencia. En tal sentido, existe un notable aumento en la cantidad de momentos de revisión salarial con respecto a la práctica habitual en años anteriores", destacó Ivana Thornton, directora de Career de Mercer.
El 52% de las empresas prevé otorgar 2 incrementos salariales en 2019, el 25% prevé otorgar tres y otro 15% dará más de esa cantidad, de acuerdo a Mercer. Al ser consultada sobre si esta estrategia de dividir en más oportunidades el aumento anual es también a una forma de trasladar el mecanismo de las instancias de revisión por inflación de las negociaciones paritarias al segmento fuera de convenio, Thornton dijo que "absolutamente es un reflejo de las cláusulas de revisión que se empezaron a ver en 2018".
"Responde a la falta de previsibilidad e incertidumbre que genera el nivel de inflación actual, así como a las necesidades financieras de las empresas. Para explicarlo en un ejemplo práctico, el aumento anual se reparte en más cuotas que antes de 2018", añadió.
Estrategias con foco efectivo
Además de mejorar el salario de bolsillo, las consultoras aseguran que las estrategias de RR.HH pasaron por potenciar el paquete de los beneficios que se traducen en efectivo, como el monto asignado para almuerzo y los reintegros por guardería o uso de auto.
"Otra práctica que se vino dando para, por ejemplo, ajustar el desfasaje del año anterior, fue ampliar las políticas de bonos o adelanto de evaluaciones de desempeño con el fin de acercarse un poco más a la inflación, permitiéndole a las empresas deducir dicho monto de sus declaraciones anuales del Impuesto a las Ganancias. Si los bonos del 2018 los pagan hasta Mayo de 2019, dichos egresos podrán ser deducibles en la declaración jurada de 2018", añadió Diego Murdocca, socio de Outsourcing & Payroll en BDO en Argentina.
En ese marco, el ejecutivo asegura que hubo compañías que este año optaron por pagar bonos bianuales en base a objetivos y resultados semestrales.
No fueron las únicas estrategias. Algunas incluyeron también el adelantamiento medio aguinaldo de julio.
El 14% de las grandes compañías que suelen participar de las encuestas de WTW ya decidió adelantar el momento en el cual otorga el aguinaldo de mitad de año. Angeli, sin embargo, minimizó esa tendencia: "Las principales medidas tomadas por algunas empresas para minimizar el impacto de la inflación fueron, por un lado, adicionar un tercer incremento en el año, por el otro, incrementar o mejorar los beneficios, y también adelantar el mes del próximo incremento. Son muy pocas las que han decidido adelantar el pago del medio aguinaldo y aun menos (5 firmas) las que estarán pagando un aguinaldo doble".
"Por disposiciones legales, la primera cuota de aguinaldo se paga antes del 30 de junio. En general, las empresas lo pagan en dicha fecha, pero este año un 20% lo ha adelantado el pago para mitad de junio", reveló Murdocca desde BDO Argentina.
Por su parte, Terlizzi opinó que fueron varias las organizaciones que decidieron pagar este medio salario antes de la fecha o ya lo han adelantado, "pero consideramos que si bien por supuesto es bien recibido y valorado por los colaboradores, no tiene un impacto a largo plazo".
Por último, Thornton no consideró que haya una tendencia generalizada de adelantar el medio aguinaldo, sino que lo que prima son "intentos de retribución desde otros elementos de la propuesta de valor, más allá de la compensación en dinero. Lo que las firmas no pueden otorgar en dinero intentan brindarlo en beneficios, flexibilidad o en algún otro aspecto del balance vida-trabajo".
Vivan las diferencias
Mercer detectó, a diferencia de años anteriores, una mayor dispersión por sector de lo que serán los aumentos salariales para empleados fuera de convenio: "Hay mayor dispersión en el mercado respecto a los incrementos a otorgarse, en un rango que puede ir desde 26,5% hasta 46,2%, dependiendo de la industria y situación de negocio de la compañía", declaró Thornton.
¿A qué responde este fenómeno? "En contextos como el actual, surgen aún con más fuerza las diferencias que existen entre las posibilidades de las empresas para compensar la pérdida del poder adquisitivo del salario", indicó la Directora de Career de Mercer. "Entonces, el alto nivel de dispersión que observamos en los incrementos salariales refleja la diferencia en los niveles de rentabilidad de las distintas industrias, y particularmente de cada negocio", concluyó.
HuCap también detectó esta tendencia, aunque ya lo había notado en 2018. "Visualizamos una alta dispersión en los aumentos salariales, no solamente entre las distintas empresas sino también dentro de una misma organización", afirmó Miguel Terlizzi, director general de HuCap.
El experto explicó que esta amplitud de incrementos dentro de una misma compañía usualmente se debe a que, "frente a la imposibilidad de brindar el porcentaje estimado de inflación para el año y al no poder trasladar esto a todo el personal, empieza a ponerse en juego el desempeño de los colaboradores y aquellos puestos y personas claves que se quieren retener".
Y sobre la amplia dispersión entre compañías y sectores, aclaró que es un fenómeno típico de momentos donde la inflación no es clara. "Se estima un valor anual, pero mes a mes se va viendo como la inflación va superando lo estipulado. Por otro lado, ocurre en organizaciones donde han disminuido sus volúmenes de facturación y por ende de rentabilidad", definió Terlizzi.
Respecto de la dispersión entre sectores, Mercer observó mayores porcentajes de incrementos anuales proyectados para 2019 en las industrias de seguros (41,7%), servicios de salud (40,7%), bancos (37,9%) y energía (36,7%).
En líneas similares, Willis Towers Watson destacó al sector de Energía, que otorgará alrededor de un 39% de suba salarial este año, al de Comunicación y Entretenimientos (proyecta 37% para todo el año), y a la actividad Agropecuaria (36%).
Con 35% anual quedarían las prepagas y obras sociales, las empresas de alta tecnología, turismo, entidades financieras y el sector automotriz. Un 34% de incremento darían los sectores de Consumo, Industria Química y Petrolera, Servicios, Retail, y Logística y Transporte, de acuerdo a WTW.
Por debajo del promedio para empleados no agremiados quedaron la industria manufacturera (31% de suba en promedio), construcción (30%), metalurgia (31%), y la industria farmacéutica (32%).