En año electoral, Argentina "pelea el descenso" en el ranking de inversión de empresas españolas

Si en 2015 uno de los "caballitos de batalla" de la campaña de Cambiemos fue la fallida "lluvia de inversiones", este año está claro que los estrategas detrás del equipo del Gobierno tendrán que apuntar a otro tipo de promesas.

Las corridas cambiarias, el pedido de apoyo al FMI, la devaluación y la baja de la actividad y del consumo llevaron a que la Argentina incluso perdiera la poca confianza que había logrado cultivar entre inversores de la economía real.

Prueba de ello es informe de empresas españolas en Latinoamérica, que anualmente releva la escuela de negocios IE Business School. El mismo mostró que en todos los países de Sudamérica se incrementarán los desembolsos en 2019, excepto en la Argentina y Venezuela.

Esa mala ubicación en el ranking de las preferencias españolas marca la percepción que los empresarios tienen sobre la economía argentina, más allá de los apoyos retóricos como el que el rey Felipe acaba de realizar en el marco de su visita oficial, en la cual expresó: "apoyamos todos los programas de reformas que están en marcha".

Lo cierto es que el 76% de los empresarios españoles planea aumentar sus inversiones en la región y solo un 23% las sostendrá. El restante 1% las recortará.

 

En ese panorama, la Argentina es el único país de Sudamérica en el cual los ingresos solo se mantendrán. A excepción de Venezuela, en donde por la crisis social, política y humanitaria, las compañías ibéricas anticipan achicar su participación, en todos los otros países del "vecindario" se inyectará dinero, sobre todo por crecimiento orgánico (55% de los casos) e incluso por adquisiciones de compañías.

El 45% de las 106 empresas consultadas por la casa de altos estudios española estimó que el entorno económico mundial afectará positivamente a la región este año –el año pasado un 68% tenía esta perspectiva- y un 38% ya piensa que el impacto será negativo (desde 18% en 2018).

 

Pese a todo, la mayoría sigue apostando a crecer en esta región, aunque Argentina quedó dentro de las pocas excepciones. En esta zona del Río de la Plata las compañías solo esperan mantener su participación. Solo en el 23% de los casos relevados se mantendrán las inversiones, y los países en los que existe esa previsión son sobre todo de Centroamérica: Guatemala, Honduras, Nicaragua y Cuba.

En Argentina, de acuerdo al "12° Panorama de Inversión Española en Iberoamérica" de IE Business School, hay 49 empresas de bandera roja y amarilla. BBVA, Santander, INDRA, Telefónica, Iberia, Llorente & Cuenca, Grupo Planeta, NH Hotel group, Prosegur, son algunas de ellas.

Y para este mercado la expectativa de los hombres de negocios españoles no es tan positiva: al ser consultados en una escala del 1 al 5 –de "muy mala" a "muy buena"- cómo evolucionará este año la situación económica en cada país, el puntaje que dieron a la Argentina fue 1,5 puntos menor que en 2018. Quedó solo por detrás de Venezuela, con un puntaje de 2,05 en promedio.

 

"La salida de capitales en mayo de 2018, que provocó una fuerte presión en las monedas locales, tuvo su peor experiencia en el caso de Argentina, pues obligó a Macri a solicitar apoyo al FMI y subir los tipos de interés en un 60%. Esto, si bien estabilizó la moneda, hizo entrar al país en recesión y subir la inflación un 40%. Todo esto lo siguieron muy de cerca las empresas españolas", aclaró a este medio Mariano Vila, Director General de la consultora Llorente & Cuenca, firma que participó en España del estudio de IE Business School.

"En esta línea, la percepción de las empresas sobre la economía argentina fue demoledora: se ha situado la penúltima posición, solo quedando Venezuela detrás. El año pasado estaba en el puesto nº 8", recordó el directivo argentino.

También es cierto que en Argentina los inversores encuentran muy presentes dos de los peligros que más les preocupan. "Los principales riesgos que afrontarán las inversiones españolas serán la inestabilidad política, la desaceleración económica y el riesgo de tipo de cambio, especialmente en Argentina. En general, casi todos los riesgos o amenazas que perciben los inversores españoles aumentan este año, dado el panorama de incertidumbre política y económica", indicó Juan Carlos Martínez Lázaro, profesor de IE Business School.

La inestabilidad política es el riesgo que más creció, de acuerdo a la opinión de los inversores españoles. Aunque un 20% de ellos también marcan exclusivamente para el mercado local otra alerta importante: el tipo de cambio.

Por el contrario, Colombia y Chile serán las economías que tendrán mejor comportamiento durante 2019, seguidas por Panamá y Perú, de acuerdo a los empresarios consultados. Y México será el país en donde más crecerán las inversiones desde España.

Gonzalo Garland, vicepresidente de Relaciones Externas del IE Business School agregó que la encuesta fue realizada posteriormente a que se concretaran los cambios de gobierno en dos de los mercados más importantes del continente, México y Brasil, que mostraron entonces una leve caída en la expectativa de los inversores españoles respecto del año pasado.

Su caída, sin embargo, fue mucho menor a la que experimentó Argentina (de 1,5 puntos) , "presumiblemente producida por la gran inestabilidad cambiaria que sufrió el país en 2018, a pesar de no haberse producido un cambio político como el de los otros dos países", dijo Martínez Lázaro.

"Es que los inversores españoles no creen que los cambios políticos van a llevar a cambios importantes en las políticas y el entorno macroeconómico que afecta a la inversión extranjera. La situación económica del país, más allá de la opción política, es lo que de verdad afecta más a las empresas españolas. Y esto refuerza esa apuesta de largo plazo más allá de los naturales cambios de gobierno que se producen en los países en los que operan", evaluó.

Vila, por su parte, tiene una visión más optimista: "A pesar de estas malas noticias y percepciones, el empresario español defiende el mantenimiento de la inversión, y sigue apostando por el país, esperando los resultados electorales de este año".

¿Y Buenos Aires?

La Capital Federal ni siquiera aparece entre las metrópolis más atractivas de la región para los dueños de empresas y ejecutivos españoles.

Más aún, al calificar a las principales ciudades, solo obtiene una puntuación importante en la categoría "ocio".

 

En este sentido, Vila aclaró que "Buenos Aires sigue siendo una ciudad atractiva a ojos del expatriado español, ubicada en un segundo nivel después de Miami y Panamá. Sin embargo, como lugar para el establecimiento de una sede regional, la inestabilidad económica, sobre todo en el aspecto cambiario, ejerce una presión importante y condiciona para la toma de decisión. Es por ello que, a pesar del atractivo como ciudad, no se encuentra dentro de las primeras cinco referencias".

"Sin duda, un cambio o mejora económica va a favorecer el retomar la preferencia de Buenos Aires cómo ciudad latinoamericana donde establecerse", indicó al respecto el director general de Llorente & Cuenca en Argentina.

En lo referente a las ciudades más atractivas a la hora de ubicar sus operaciones centrales, la clasificación no sufre variaciones con respecto a 2018, y Ciudad de México vuelve a ser, por quinto año consecutivo, la más votada, seguida por Miami y Bogotá.

"Ciudad de Panamá mejora sustancialmente este año y destaca sobre Bogotá, Buenos Aires, Lima y Ciudad de México, que se mantienen en un segundo nivel como destinos preferidos por los directivos españoles para residir", se lee en el reporte de IE Business School.