Los viajes de negocios pueden ser una oportunidad para salir de la rutina y cerrar tratos con clientes, aunque para los viajeros frecuentes a veces es sinónimo de estrés que se puede reducir si se contrata a una buena agencia de viajes corporativos responsable y se planean los itinerarios.
Mariano Resúa, socio Presidente de BTM Argentina, asegura que los viajeros que aprendieron a vivir con menor estrés se involucran en el proceso de reservación previo al viaje para elegir las opciones que más les convienen, y esto se logra con una agencia de viajes profesional.
Sin duda una agencia corporativa, debe tener en cuenta tres factores fundamentales al momento de vender un viaje corporativo y de ser elegida por una empresa como su agente de viajes de negocios.
Principalmente, se debe conocer la política de viajes de la empresa. El manual o guía de los empleados de la compañía para conocer los beneficios al momento de iniciar un viaje de negocios. Allí están las pautas y condiciones que tendrán el empleador al momento de realizar un viajes de negocios, como ser categoría, cambios de millas, hoteles, entre otras cuestiones, que harán que su viaje sea lo más equitativo posible.
Por otro lado, está el perfil del viajero, que es la biblia para las secretarías, allí se incluyen datos personales, los gustos y preferencias, si le interesa estar del lado de la ventanilla o pasillo en el avión, si es alérgico, prescripciones médicas, dietas, etc. Son los datos más relevantes de la persona, para gestionarles el viaje. Tener este material, acelera la reserva de pasajes.
Por último, es esencial contar con una excelente agencia de viajes, que sea fiable, a la cual puedan confiar, que sea responsable, que brinde un servicio personalizado y se dedique a viajes ejecutivos. Esto le permitirá al cliente llegará a destino y de buen humor, teniendo un viaje placentero.
La agencia de negocios deberá, cumplir con todo lo pautado, y trabajar para ofrecer la mejor calidad junto con la mejor tarifa, para que el viajero de negocios no solamente logre sus objetivos laborales en el destino, sino también pueda disfrutarlo como un corte con la rutina, brindando una razón extra para complacer su trabajo, sin aumentar los costos para la empresa.