Diez respuestas que usted nunca debe dar en una entrevista de trabajo
La primera impresión es fundamental. Y más cuando se trata de una entrevista laboral. Donde se juega todo en pocos minutos. Cómo se desenvuelva y el modo en el que responda a las cuestiones, dependerá en que sea contratado o no.
Por lo general, todas las entrevistas incluyen algunas o varias preguntas tipo en las que se busca ver si existe una adecuación persona-puesto vacante, más allá de la formación académica y la experiencia profesional. El objetivo es conocer al candidato e indagar en las competencias que se demandan para el puesto.
Por ello, Carolina Mouné, responsable de recursos humanos de Adecco Professional, y María José Martín, Directora de Atracción y Gestión de Talento de ManpowerGroup, explicaron al sitio Finanzas.com cuales son las claves y las respuestas que el postulante no debe pronunciar nunca en una entrevista de trabajo para lograr ganar la partida y conseguir el puesto.
Martín señaló al sitio español que la premisa fundamental es "no mentir". Y añadió que nunca se debe ir a una entrevista de trabajo sin haberla preparado anteriormente.
"De la misma forma que hay que adaptar el currículum a la oferta antes de enviarlo, hay que trabajar con antelación la entrevista poniendo en valor todo lo que podemos aportar al puesto y sabiendo que el entrevistador basará la entrevista en cuatro bloques: aspectos personales; formativos; experiencia laboral y descripción de empleos", consideró.
Mouné, en tanto, señaló a Finanzas.com varias cuestiones generales que nunca se deben hacer. "No se debe llevar la iniciativa, preguntar sobre cómo lo estás haciendo en la entrevista, perder las formas, preguntar cuánto tiempo va a durar la entrevista, criticar a ex-compañeros, ex-jefes, etc. o utilizar vocabulario improcedente", enfatizó.
Respecto a las preguntas de la entrevista, estás son algunos consejos de las expertas para salir airoso del encuentro y dar una buena impresión.
1.- ¿Por qué estudió esa carrera?
Mouné explicó que, con esta pregunta, se busca detectar coherencia, confianza en uno mismo, capacidad para la toma de decisiones e independencia. Por lo tanto, se deben evitar respuestas del tipo: "No me daba la nota", "Porque mis padres me lo dijeron" o "Porque mis amigos la eligieron".
2.- ¿Qué es lo que más y lo que menos le gusta de su profesión?
Ante todo, nunca se deben hacer críticas destructivas de anteriores empresas, ni anteriores jefes. "Se deben explicar las ventajas e inconvenientes de la profesión desde una actitud constructiva, y cuando se hable de los inconvenientes, enfocarlos como aprendizajes", enfatizó Mouné.
Además, la experta de Manpower apuntó que "lo importante es transmitir profesionalidad y demostrar que aunque haya cosas que gusten menos se llevará a cabo el trabajo porque forma parte de las responsabilidades".
3.-¿Cómo se definiría? O ¿Cuáles son sus cualidades y/o defectos?
Mouné recomendó hacer un análisis previo sobre estas cuestiones antes de acudir a la entrevista porque "siempre" se preguntan aspectos positivos y negativos.
"Se puede preguntar al entorno más cercano para que lo definan, porque es más objetivo", sostuvo. En concreto, los puntos débiles se deben enfocar como áreas de mejora y como aspectos que también tengan un lado positivo.
También es importante aportar "las acciones que se llevan a cabo para mejorar los puntos débiles, además, de interrelacionar todo con la posición a la que se opta", afirmó Martín.
4.- ¿Qué conoce sobre nuestra empresa?
Con esta pregunta se mide la planificación, el análisis del detalle y la orientación comercial. Por ello, ambas expertas coincidieron en que se debe realizar un análisis previo de la empresa en la que va a ser entrevistado.
"Es una pregunta obligatoria y, en muchas ocasiones, los candidatos reconocen no haber mirado la página web", coincidieron.
5.- ¿Por qué es la persona idónea para el puesto? ¿Qué puede aportar?
Permite señalar los aportes diferenciales de cada uno. Hay que responder desde la sinceridad y la humildad porque "no se puede menospreciar al resto de candidatos aunque sean competencia", comentó Mouné.
Martín, en tanto, opinó que "hay que poner en valor todos los aspectos profesionales y las experiencias laborales anteriores para ejemplificar todo lo que se puede aportar".
6.- ¿Prefiere trabajar sólo o en equipo?
Depende del trabajo, pero cada vez se valora más, "saber y poder trabajar en equipo", dijo la experta de Adecco, aunque, Martín matizó que "no hay repuesta mala porque dependerá del puesto a desarrollar".
7.- ¿Cómo actuá ante un problema laboral?
Seguramente el entrevistador le pedirá que ponga algún ejemplo y diga como salió airoso de la confrontación.
Por ello, se debe explicar la situación específica y ceñirse a ese momento, cómo lo vivió, cómo lo resolvió y qué aprendió de la situación.
"Se aconseja tener alguna situación pensada porque es una pregunta frecuente". En este caso, la pregunta trata de investigar "la capacidad resolutiva, cómo afrontar el estrés y la tolerancia a la frustración".
8.- ¿Por qué quiere cambiar de trabajo?
Cuidado con esta pregunta. Nunca se debe hacer críticas sobre nuestra empresa actual. "Se pueden argumentar las razones que nos hacen estar en esta situación como posibilidad de desarrollo profesional, aprender de otros sectores, etc", afirmó Mouné.
Por el contrario, los motivos económicos o cercanía a domicilio no son valorados de forma positiva.
9.- ¿Cómo se ve dentro de cinco años?
Sirve para indagar en los planes futuros, en si la persona querría continuar en la compañía por mucho tiempo ya que la mayoría de empresas buscan perfiles estables.
"Cuando se incorporan nuevos empleados hay una inversión por parte de la compañía en la formación y si alguien ya afirma que se ve en otro lugar de aquí a un tiempo, puede interpretarse como inestabilidad", afirmó la experta en recursos humanos de Adecco.
Martín agregó que "esta explicación también da pistas claras a la empresa de cómo trabajar el desarrollo profesional del trabajador".
10.- ¿Tiene alguna pregunta?
Lo mejor es llevar alguna cuestión ya preparada que denote interés e inquietud por el trabajo. Por ejemplo: '¿por qué surge esta vacante?' o '¿cuáles son los siguientes pasos del proceso de selección?'.
"No es recomendable preguntar sobre salario, al menos en el primer encuentro, ni pedir feedback de la entrevista", matizó Mouné.
En resumen, Martín señaló que el candidato debe responder a las preguntas con la máxima sinceridad, explicando ejemplos que refuercen el mensaje y poniendo en valor todos aquellos puntos que pueden fortalecer su candidatura en el puesto y que demuestren todo lo que puede aportar.
En su opinión, "no hay respuestas correctas e incorrectas, ni perfectas. El candidato debe mostrarse realmente como es".
Y Mouné aconsejó dedicar un tiempo a la preparación de la entrevista: conocer la empresa, el puesto que se demanda, si se puede al entrevistador, a través de redes sociales, llevar pensados tres aspectos positivos y tres a mejorar, situaciones más complicadas, cómo nos vemos en un futuro, qué puedes aportar, etc.