Consejo de la Magistratura: peligra la mayoría oficialista en el órgano que selecciona y disciplina a jueces
El cambio en la correlación de fuerzas dentro del Congreso que se dará tras las elecciones legislativas del 14 de noviembre impactará también en la integración del Consejo de la Magistratura, un cuerpo colegiado clave para el oficialismo y la oposición debido a la compleja situación judicial de la vicepresidenta Cristina Kirchner y el ex presidente Mauricio Macri.
El órgano encargado de aprobar las ternas de candidatos a jueces y de juzgar el accionar de los magistrados se compone de 13 miembros, de los cuales seis son designados en representación del Congreso: tres por la Cámara de Diputados y tres por el Senado, en función de la cantidad de bancas que posee cada espacio.
La Ley del Consejo de la Magistratura (26.080) establece que tanto para la representación del Senado y como para la de la Cámara de Diputados, dos de los tres consejeros corresponden "a la mayoría y uno a la primera minoría" parlamentaria.
Gracias a la ventaja numérica que ostenta en el Senado, el Frente de Todos cuenta actualmente con mayoría en el Consejo. Entre sus legisladores y los representantes de jueces y abogados que juegan con el oficialismo en el plenario, reúne 6 de los 13 votos. Por su parte, Juntos por el Cambio puede, en el mejor de los casos, empatar.
Posible escenario tras las elecciones legislativas
Sin embargo, esta situación podría cambiar si los resultados de las primarias de septiembre pasado se repiten en los comicios del 14 de noviembre. Y es que si el Frente de Todos perdiera su condición de mayoría en la Cámara alta y quedara como primera minoría -con 35 bancas, según el pronóstico de las PASO- la oposición reclamará que ceda uno de los dos lugares que ocupan senadores de ese espacio.
El precedente para ese planteo es lo que ocurre con los tres diputados que integran el Consejo. Por ser primera minoría en la Cámara baja, el Frente de Todos tiene una sola representante, Vanesa Siley, mientras que los otros dos lugares corresponden a Pablo Tonelli, de Juntos por el Cambio, y a Graciela Camaño, de Consenso Federal.
Por el Senado, los consejeros del Frente de Todos son Mariano Recalde y María Inés Pilatti Vergara, mientras que Juntos por el Cambio tiene a la jujeña Silvia Giacoppo. En caso de pasar a ser primera minoría en la Cámara alta, el oficialismo podría perder el lugar de Recalde o el de Pilatti a manos de la tercera fuerza, el Interbloque Federal, tal y como ocurre con el caso de Camaño.
Si bien en ese escenario el oficialismo estaría perdiendo solo un voto, la composición del Consejo de la Magistratura, el posicionamiento político de sus integrantes y la situación de debilidad en la que quedaría el Gobierno tras una eventual derrota electoral podría hacer que esa pérdida tenga más peso del que parece en el pleno del organismo.
El Consejo de la Magistratura es presidido por Diego Molea, rector de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora y representante del sector académico. Su vicepresidente es Alberto Lugones, uno de los tres representantes de los jueces. Ambos suelen votar en el plenario junto con los legisladores del oficialismo.
A ellos se suma el representante del Poder Ejecutivo Gerónimo Ustarroz, hermano del ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro. Molea, Lugones y Ustarroz, junto a Recalde, Pilatti Vergara y Siley conforman la tropa oficialista dentro del Consejo.
La oposición, en tanto, tiene cuatro votos "fijos" en el organismo: los de Giacoppo y Tonelli, más el de Ricardo Recondo, representante de los jueces y el de Carlos Matterson, que representa a los abogados de la matrícula del interior del país.
Ese sector cuenta ocasionalmente con el acompañamiento de otros dos consejeros, considerados "neutrales": Diego Marías, de los abogados de la Ciudad de Buenos Aires y Juan Manuel Culotta, el tercer representante de los jueces en el organismo. Cuando eso ocurre, la oposición llega a los seis votos y el desempate queda en manos de Camaño, que se mueve con independencia.
Si la composición de los consejeros cambiara por el lado del Senado y el Frente de Todos perdiera un voto con el ingreso de un senador del Interbloque Federal, la desventaja del oficialismo sería considerable dado que esa bancada es, en el ámbito de la Cámara alta, parte de la oposición.
De esta manera, el sector que integran Giacoppo, Tonelli, Recondo y Matterson podría sumar un aliado y con el acompañamiento de Marías y Culotta alcanzaría los siete votos, mientras que el oficialismo se quedaría con cinco.
Situación compleja para el oficialismo
Así, la pérdida de un solo voto en el Consejo de la Magistratura dejaría al oficialismo en una situación compleja dentro de un organismo donde las fuerzas políticas que lo componen suelen cuestionar e impulsar investigaciones sobre los jueces que llevan causas sensibles para el poder.
Por citar dos ejemplos, en el Consejo de la Magistratura aguarda tratamiento un pedido de juicio político contra el juez de la Cámara de Casación Mariano Borinsky, algo que fue reclamado recientemente por el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal.
El proceso se apoya en las reuniones que Borinsky habría mantenido entre 2016 y 2019 con el entonces presidente Mauricio Macri en la quinta de Olivos, en fechas que coincidieron con el dictado de fallos contra Cristina Kirchner en causas como "Obra Pública" y "Ruta del dinero K", entre otras.
En paralelo, el consejero Tonelli, diputado del PRO, pidió en los últimos días que el organismo cite al juez federal subrogante de Dolores, Martín Bava, para notificarlo sobre una denuncia que tramita en su contra. Lo hizo luego de que Bava citara a declaración indagatoria a Macri en la causa que investiga el presunto espionaje sobre familiares de los fallecidos en el submarino ARA San Juan.