Alerta por alquileres "truchos" de verano: crecen las estafas y advierten por la dificultad para controlarlos

Ya hubo 240 denuncias por presuntas estafas por alquileres falsos en la costa atlántica bonaerense. Muchas de las víctimas señalan que enviaron dinero por transferencias bancarias para reservar lugares para vacacionar y ya no obtuvieron respuesta de los supuestos propietarios.

Otros denuncian que pagaron el alquiler y, al llegar al lugar, la dirección no existía. En la mayoría de los casos, se trató de personas que se interesaron por propiedades (quintas, viviendas o departamentos a costos bajos) ofrecidas a través de redes y luego depositaron un porcentaje importante del precio (alrededor del 50%) a los fines de realizar la seña.

Las autoridades municipales señalan que el problema que están vislumbrando es que los estafadores crean una identidad falsa en redes sociales, ingresan a diversos grupos de Facebook o crean un perfil en Instagram para ofrecer una propiedad en alquiler. Destacan además que los perfiles son nuevos, tienen pocos posteos y un reducido número de seguidores, que en muchos casos, en el futuro se convertirán en víctimas.

Remarcan la ubicación del departamento y suben una innumerable cantidad de fotos para crear confianza en la víctima y desaparecen una vez que reciben el adelanto depósito.

Además. en un estudio conjunto de la organización no gubernamental Defendamos Buenos Aires y el Estudio Miglino y Abogados, quedó confirmado que "hasta el momento se han producido 240 estafas con alquileres falsos en la Costa Atlántica, fundamentalmente en Pinamar, Villa Gesell, Necochea y Mar del Plata, y en total los estafadores han timado al menos 8 millones de pesos".

"El veraneante deposita la mitad de la estadía en una cuenta de un banco de primera línea, confiando en la seriedad del asunto y la pesadilla no ha hecho otra cosa que comenzar", dijo Javier Miglino, Director de Defendamos Buenos Aires.

"En todos los casos los delincuentes crean un perfil en Facebook o Instagram, suben fotos, ofrecen una descripción sólida de la casa o departamento a alquilar. Contestan preguntas de todo tipo para dar imagen de seriedad y por fin se concreta la estafa. Comienzan a recibir depósitos del 50 por ciento de la estadía (entre 20 mil y 200 mil pesos), por una propiedad que nunca existió", dijo Miglino.

Otro punto a tener en cuenta es que utilizan fotos reales del exterior del alojamiento, aportan datos verdaderos sobre las comodidades del inmueble y ofrecen un número de celular. No hay datos de telefonía fija ni dirección del presunto propietario.

Los recaudos para no caer

El consultor en temas inmobiliarios Daniel Zampone advirtió que "es muy alto el riesgo de alquilar a través de ofertas que aparecen seductoras, por precio y calidad, en redes sociales y, así, por querer ahorrar unos pesos, se puede terminar pagando muchísimo más o directamente perder la posibilidad de disfrutar las vacaciones".

En este punto, recomienda que los alquileres se realicen siempre a través de inmobiliarias locales "porque son quienes conocen bien la zona y además son los que podrán resolver cualquier problema que surja en la propiedad que se contrate".

En tanto Miglino pidió que los turistas "no confíen" en aquellos casos en que les piden depositar en cuentas bancarias, cajas de ahorro o tarjetas prepagas porque "muchos bancos o financieras tienen una apertura veloz de cuentas, tomando muy pocos recaudos y la gente deposita con la mayor confianza porque es un banco importante y luego esas cuentas se consideran desiertas porque una vez retirados los valores, los titulares desaparecen".

Por otro lado, los especialistas aconsejan leer con atención los comentarios y las puntuaciones que les otorgan en las viviendas en este tipo de plataformas on line.

Es necesario tener la total seguridad sobre la titularidad de la cuenta a la que se pretende enviar dinero y utilizar sitios seguros. Es decir, evitar aquellos que no utilizan el protocolo https.

En caso de detectar una publicidad engañosa o con datos falsos, se pide informarlo a la  Dirección de Defensa del Consumidor del municipio, mientras que, en caso de  advertir una posible estafa, se deberá radicar la correspondiente denuncia penal en la fiscalía.

"Recomendamos a la gente que no puede chequear el domicilio de los propietarios de viviendas en alquiler veraniego en la Costa Atlántica, que no alquilen. Sino que lo hagan en destino. De ese modo evitarán ser estafados", precisó Miglino. Finalmente, el especialista advirtió que el engaño incluye la imposibilidad de avanzar con una denuncia en la justicia.

"La estafa incluye la trampa judicial posterior porque funcionarios judiciales afirmaron a Defendamos Buenos Aires que no es de competencia local resolver las estafas, ya que en los lugares sólo están la casa, pero el desapoderamiento y los depósitos ocurren en otro destino, que es donde se debe instruir la causa. Es una encerrona para los damnificados", concluyó Miglino.

Ya en el lugar, también pueden surgir controversias que deban ser solucionadas a través de reclamos ante Defensa del Consumidor o en los tribunales.

En principio, es fundamental contar "por escrito" con toda la información sobre aquello que le fue ofrecido, ya que esa documentación podría servir como una herramienta de reclamo.

También es conveniente tener documentadas por e-mail las respuestas a las preguntas formuladas sobre la oferta del bien.

Es importante que el usuario sepa, efectivamente, cuál es el alcance de la información y la publicidad que le brindan los proveedores al momento de ofertar, de modo general o individual el servicio.

Por ese motivo, se recomienda "guardar las publicidades que constan en los periódicos, revistas o folletos, donde se promociona un determinado servicio turístico".

Esto resulta útil, ante la eventualidad de formular una queja, justamente porque allí deberían constar las cualidades del servicio, su precio y el plazo de vigencia.

Esos documentos son parte del contrato. Por lo tanto, para estar preparado en caso de un incumplimiento es importante tomar estos recaudos, como así también solicitar algún documento que acredite que verdaderamente se está negociando con quien tiene poder sobre el inmueble y puede decidir.