La oposición busca reflotar el proyecto para que los créditos UVA se actualicen por salarios

Es uno de los inexorables capítulos en los planes de "reparación" de la economía: las cuotas de los créditos hipotecarios que ajustan por UVA pasarán por una reforma, de manera que la inflación no termine por hacer impagables las cuotas.

Si bien el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, dijo que anunciarán medidas específicas para ese sector (que tendría alrededor de 120 mil tomadores), los deudores temen que sean insuficientes. Durante los últimos dos años, las cuotas tuvieron un incremento cercano al 100%. Y en los últimos doce meses, el porcentaje subió un 55%, casi 20 puntos más que el salario.

Este es un sector electoral crucial y desde el Frente de Todos lo saben. Durante los festejos del domingo pasado, Máximo Kirchner prometió que tomarán medidas y el candidato a gobernador bonaerense, Axel Kicillof dijo que "los créditos UVA son otra estafa" y que son impagables.

"En el Congreso, cuando se aprobó la ley, me expresé en contra del formato: la cuota tiene que subir con el salario y no con la inflación, está hecho para los bancos. Va a haber que atenderlo", dijo en una entrevista.

Es que los tomadores vienen luchando desde hace tiempo con el pedido de alguna medida para calmar la escalada de las cuotas indexadas a la inflación, motivo por el cual en algunos ya dejaron de abonarlas.

Precisamente, en la cámara de Diputados del Congreso nacional, la oposición firmó varios dictámenes para asistir a los deudores pero no avanzaron porque los diputados de Cambiemos consideraron que no era válido el reclamo, ya que por el aumento de cuotas, en realidad, aquellos salieron favorecidos con la devaluación porque el monto en dólares se licuó y el precio de los inmuebles se mantuvo. 

Además, desde el oficialismo remarcaban que la cuota tenderá a morigerarse una vez que baje la inflación y que los deudores poseen un mecanismo para pagar un monto menor extendiendo los plazos. Pero, tras los últimos coletazos, ello está muy lejos de ocurrir.

A principios de abril, la Comisión de Vivienda y Ordenamiento Urbano de la Cámara de Diputados, presidida por el diputado Felipe Solá, dictaminó un proyecto de ley de emergencia para los beneficiarios de créditos hipotecarios UVA, UVI y Procrear Ahorro Joven.

La propuesta declaraba la emergencia habitacional y buscaba proteger la capacidad de pago de los deudores, estipulaba un plazo de 365 días de suspensión de las ejecuciones hipotecarias para el que tenga dos o tres cuotas sin pagar no entre en situación de ejecución y modifica el cálculo de las cuotas. El punto central es que se calcule el aumento en  base al incremento salarial en lugar de la inflación. Este sería el proyecto que la oposición busca que sancione el Congreso durante este año. Fuentes del Frente de Todos consultadas por iProfesional indicaron que ese sería el texto que se aprobaría si Alberto Fernández es elegido presidente. Si se repitiesen los resultados de las PASO, el peronismo estaría cerca del quórum propio, por lo que su aprobación es más que factible.

El Colectivo Hipotecados UVA autoconvocados emitió un comunicado en el que se mostraron preocupados por la "fuerte suba en el tipo de cambio".

La organización, conformada por usuarios que tomaron los préstamos del gobierno nacional atados a la inflación, expresó en el documento que "a fines de marzo de 2016 el gobierno anunció la creación de las Unidades de Valor Adquisitivo (UVA), que se ajustan por inflación y su objetivo fue el de facilitar el acceso a la vivienda propia".

"La publicidad oficial hablaba de la conveniencia de tomar éstos créditos, dado que la inflación iba a tener un sendero descendente y durante 2019, se estabilizaría en torno al 5 por ciento anual. Nada de ello ocurrió. Hoy asistimos a la posibilidad cierta de que la inflación se descontrole", indicó el grupo.

"A tres años y medio de su puesta en práctica, una vez más nos vemos en la obligación de manifestar que estos créditos son absolutamente inviables", expresaron los referentes de la ONG.

"Desde el Colectivo Hipotecados UVA Autoconvocados, exigimos al gobierno nacional una pronta y urgente atención de nuestra problemática disponiendo un congelamiento en la indexación de nuestros créditos, ya que asistimos a la posibilidad cierta de no poder afrontar el pago de nuestras hipotecas. Están en juego decenas de miles de hogares. Políticas irresponsables no pueden poner en juego el derecho a conservar nuestras viviendas, dependiendo del humor de los mercados", añade el comunicado.

Con todo lo expuesto, los usuarios pidieron "el congelamiento inmediato en la actualización del valor de la UVA, e inmediata sanción de una ley que ponga fin a los créditos indexados por CER".

"Medida insuficiente"

Como una manera de buscar la mayor aprobación posible de este sector de cara a las primarias del próximo 11 de agosto, el Gobierno anunció que se haría cargo de la diferencia entre el aumento de la cuota y el incremento salarial si esa brecha supera el 10% entre octubre 2018 y diciembre 2019.

Tanto los deudores como los miembros de la oposición en el Congreso consideraron que la medida es "insuficiente" ya que "no ataca el fondo del problema" sino que se trata de un paliativo que abarca cerca de 15 meses. Es decir, en el 2020, los deudores volverían a sufrir un descalce entre la inflación y el aumento salarial.

En este punto, los deudores denuncian que ya hay familias que no pueden solventar el incremento de las cuotas y que comenzaron a recibir notificaciones por las demoras, por lo que la iniciativa gubernamental "no alcanza".

Es que el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, dijo que el Estado destinará "como máximo" un fondo de 80 millones de pesos para subsidiar a quienes hayan tomado estos créditos y hayan visto a las cuotas subir más que sus salarios. Y dijo que esta partida no aumentará el gasto público dado que se realizará una reasignación de fondos dentro del Presupuesto 2019 votado por el Congreso.

Es decir, el dinero que será depositado en las cajas de ahorro de las personas afectadas estará entre 695 y 800 pesos promedio.

Hace un mes, Macri destacó que gracias a la baja de la inflación los créditos hipotecarios UVA "volverán a ser un éxito importante".

"Detrás de los bancos que otorgan créditos hay un Estado que está haciendo un trabajo estructural para desarrollar y robustecer el sistema financiero. Se nos fue con la inflación, pero ahora con la baja de la inflación creo que los créditos hipotecarios, los UVA, que arrancaron muy bien, volverán a ser un éxito importante y concreto", afirmó el Jefe de Estado. Ello, ahora, se transformó en una utopía.