Cambiemos frenó la aprobación de proyectos de ley económicos de la oposición

Con lo justo y a pocos segundos de considerar fracasada la reunión, la oposición de la Cámara de Diputados consiguió reunir el quórum para realizar una sesión especial a fin de debatir proyectos para eliminar el impuesto a las ganancias a los jubilados y limitar los aumentos en los servicios públicos.

Los antimacristas sabían que estaban condenados a la derrota, dado que Cambiemos logró imponer el número para bloquear la votación de todos los proyectos de ley del temario, que necesitaban una mayoría especial de dos tercios de los presentes por no contar con el dictamen de comisión. Si lo hubiesen tenido, habrían precisado de la mitad más uno.

La sesión inició con la votación del paquete de proyectos sobre exención del pago del impuesto a las Ganancias para jubilados y pensionados, en línea con el fallo de la Corte Suprema de Justicia. El resultado fue 130 votos afirmativos y 91 negativos, es decir, a la oposición le faltaron 18 votos para habilitar el tratamiento sobre tablas.

Luego se votó el segundo paquete, con iniciativas contra la suba de tarifas, que recibió 120 votos a favor y 96 en contra; y por último, el paquete que incluía proyectos educativos, propuestas contra la violencia de género y los despidos en Fabricaciones Militares obtuvo 104 votos a favor y 89 en contra.

A pesar de las previsiones iniciales, la oposición debió transpirar más de la cuenta para que se sienten en sus bancas 130 legisladores y comenzar a debatir casi 80 proyectos de ley de índole económico. Lo logró casi cincuenta minutos después del horario pactado y a pocos segundos de que la sesión se considerara caída .

El interbloque Argentina Federal, el Frente Renovador y el Frente para la Victoria-PJ fueron las bancadas que más legisladores aportaron para comenzar la reunión, y contaron con la presencia de otros diputados como los integrantes de Red por Argentina, el Frente Cívico por Santiago, los puntanos, los diputados de la izquierda; los santafesinos Alejandra Rodenas, Alejandro Ramos y Luis Contigiani; los catamarqueños Silvana Ginocchio y Gustavo Saadi, José Luis Ramón. También estuvo Teresita Villavicencio, del bloque de Martín Lousteau, y como es habitual el salteño Alfredo Olmedo.

Fueron decisivos los ingresos al recinto de los kirchneristas Leopoldo Moreau y Rodolfo Tailhade, miembros de la Comisión Bicameral de Inteligencia que en ese momento recibía al jefe de la AFI, Gustavo Arribas. Fueron llamados de apuro al ver que no llegaban al número mínimo para iniciar la sesión.

También fueron rechazadas las iniciativas sobre la declaración de la emergencia en materia de violencia de género; la creación de un régimen de actuación policial especial; y la restricción de la autorización para portación, tenencia y uso de armas de fuego a personas denunciadas por este tipo de violencia.

 

Inicio caliente

El titular de la Cámara baja, Emilio Monzó, anunció que el orden de los temas sería la excepción del impuesto a las Ganancias para jubilados, las iniciativas sobre tarifas y, luego, el resto de los temas, indicó el sitio Parlamentario.com.

Después de abierta la sesión y cuando ya se habían leído por secretaría uno a uno los proyectos, el interbloque oficialista se mantuvo de pie a la espera de ver cómo el resto de los bloques perdía el quórum.

Observando el accionar de Cambiemos, la jefa del Frente Renovador, Graciela Camaño, aseguró: "Vamos a intentar hacer un trabajo parlamentario, más allá de que los votos decidirán el trámite que va a seguir esta sesión".

Felipe Solá sostuvo que "no se puede negar el derecho de discutir y debatir problemas que son grandes". "Clausurar el Parlamento es darle la razón a aquellos que piensan que esto no es una expresión vital de la democracia", agregó.

Pero en ese momento pidió la palabra el cívico Juan Manuel López, quien consideró que "no podemos tratar esta cantidad de temas sin dictamen" y pidió una moción de orden para que "se pase a votar ahora mismo la habilitación o no de los expedientes". "Es deber de los que piden las sesiones especiales poder sostener su quórum", chicaneó.

Siguió en los reclamos Pablo Kosiner, el titular del interbloque Argentina Federal, señalando que "estamos pidiendo que se traten temas de la sociedad; esto es mucho más que el ego personal de un diputado".

Cuando el oficialismo pidió votar una moción de orden, Camaño estalló indignada, emprendiéndola contra Monzó y presentó contra él una cuestión de privilegio atribuyéndole "sumisión" a los dictados del oficialismo. Sin embargo, cuando se consiguió quórum para mantener la sesión y Monzó evitó realizar la votación pedida desde el oficialismo, Camaño retiró la cuestión y terminó valorando la actitud del diputado del Pro.