El tiempo de movilización de los trabajadores que no tienen un lugar fijo de trabajo debe ser considerado parte de la jornada laboral, según una sentencia del Tribunal Europeo de Justicia.
Específicamente, la sentencia se refiere al tiempo que tardan los trabajadores en llegar a su primer compromiso del día y luego en regresar a sus casas al terminar la jornada.
Esto significa que algunas empresas, como las que emplean a cuidadores, plomeros y representantes de ventas pueden estar incumpliendo las reglas europeas sobre jornada laboral, indicó el sitio BBC Mundo.
Según el corresponsal de asuntos legales de la BBC, Clive Coleman, la sentencia tendría un "enorme efecto".
"Puede ser que los empleadores tengan que organizar los horarios de trabajo para asegurar que las primeras y últimas citas de sus trabajadores se den cerca de sus casas", explicó Coleman.
Mientras que Chris Tutton, de la firma de abogados Irwin Mitchell, considera que eso también significa que "miles de empleadores pueden estar potencialmente violando las reglas de jornada laboral de Reino Unido".
'Salud y seguridad'
El tribunal dijo que la sentencia es para proteger la "salud y seguridad" de los trabajadores, como establece la directiva de jornada laboral de la Unión Europea.
El transporte al trabajo debería contar como parte de la jornada para algunos trabajadores.
La directiva está diseñada para proteger a los trabajadores de la explotación y establece normas sobre la duración de la jornada, los descansos y las vacaciones.
Uno de sus principales objetivos es asegurar que ningún empleado de la UE está obligado a trabajar más de la media de 48 horas a la semana.
La sentencia se produjo tras un caso legal en España con una empresa llamada Tyco, que instala sistemas de seguridad.
Tiempo mínimo de descanso
La empresa cerró sus oficinas regionales en 2011, lo que produjo que los trabajadores tuvieran que cubrir distintas distancias para llegar a su primera cita del día.
"El hecho de que los trabajadores empiecen y acaben sus jornadas en sus casas se deriva directamente de la decisión de la empresa de cerrar las oficinas regionales y no del propio deseo de los trabajadores", dice la sentencia.
"Pedirles que carguen con la decisión de su empresa sería contrario al objetivo de proteger la seguridad y la salud de los trabajadores que persigue la directiva, que incluye la necesidad de garantizar un periodo mínimo de descanso".
La sentencia podría tener un "enorme efecto" en muchos trabajadores.
El abogado especializado en ley laboral, Caspar Glyn, también cree que la decisión puede afectar a "millones de trabajadores" en el continente europeo, señaló BBC Mundo.
Sin embargo, Glyn dice que, a pesar de las especulaciones, la sentencia no avala que los trabajadores que cobran el salario mínimo puedan reclamar más dinero por el tiempo que tardan en llegar al trabajo.
"El salario mínimo en Reino Unido deriva del derecho británico, no del europeo. No hay derecho europeo a un salario mínimo".
"Las regulaciones sobre salario mínimo en Reino Unido no cuentan como trabajo el transporte desde casa o hacia el lugar de trabajo", dijo.